Rara es la consola que no ha recibido su respectivo juego de golf. Se puede estar más o menos de acuerdo con la popularidad que alcanzan, pero lo que está claro es que al final a nadie le parece mal practicar un swing. En 3DS podremos hacerlo, y con Mario, en un videojuego diseñado nada más y nada menos que por Camelot Software. Lo probamos sobre el "green".
Probablemente el golf sea uno de los deportes que más personas han practicado antes en una consola que con un palo en la mano. Ha sido un auténtico clásico desde tiempos inmemoriales en todo tipo de consolas. Lo hemos jugado en una Atari 2600, en una NES y hasta en los máquinas 100-en-1 de los decomisos que antaño tanto existían. Siempre ha habido golf, y ahora con Nintendo 3DS no iba a producirse una excepción.
Lo cierto es que la Gran N lleva sin lanzar un videojuego de Mario Golf desde el año 2004 (cuando le tocó el turno a la mítica Game Boy Advance). Aquel videojuego cosechó un más que notable éxito en términos de crítica, y no debemos sorprendernos demasiado, porque su desarrolladora, Camelot Software, no son sólo los autores de los Golden Sun, sino también de algunos de los títulos de deportes con más calidad de las máquinas Nintendo.
Ahí tenemos ejemplos como el magnífico Mario Tennis para comprobarlo. Pero lo que nos interesa verdaderamente de todo esto es conocer que esta desarrolladora japonesa está trabajando ahora en Mario Golf: World Tour, título destinado a Nintendo 3DS que llega para darnos los mejores swings y hoyos. Cargad vuestro set que nos vamos con Mario y sus amigos para descubrir qué es lo que nos ofrece esta nueva entrega dentro de la serie.
Golf para todos
Intuitividad. Nada de conceptos técnicos, complejos comandos ni engorrosas interfaces. Camelot Software sabe muy bien cómo ponernos a jugar sin complicaciones desde el primer minuto, y esto es algo que logra otra vez en este título. No necesitamos ni el tutorial para comprender los principios básicos, consistentes en escoger la dirección de lanzamiento, pulsar un botón para activar el indicador de golpe y volver a presionarlo cuando la barra alcanza el punto óptimo de disparo.
Un esquema que todos los que hayan probado algún juego de golf conocerán de sobra, al igual que el efecto que producen tanto el viento como la inclinación del terreno sobre el movimiento de la bola. Hay factores a tener en cuenta, y eso sin mencionar los distintos tipos de hierba, los temidos búnker u obstáculos en forma de árboles y estanques.
Esto no es un juego de simulación, es puro arcade. Por supuesto, tendremos unos escenarios más realistas que otros, pero la tónica es la de lanzamientos con estelas y efectos psicodélicos, todavía más pronunciados si hacemos uso de items especiales. La flor hace que la pelota atraviese cualquier elemento, sin detenerse; y luego tenemos otros como una bala o un huracán que se encargan de transportar el esférico hasta su destino. El realismo definitivamente no es una clave del programa, pero sí la diversión.
Mejora tu handicap
Las modalidades que pudimos probar en esta sesión de juego fueron la Partida Rápida, que nos permitió descubrir la jugabilidad principal del producto, y el Club del Castillo, algo así como un peculiar modo historia. Aquí manejamos a nuestro propio Mii. Podemos explorar el entorno, conversar con otros personajes, acudir a una tienda para comprar equipamiento, cambiarnos en el vestuario, practicar… pero ante todo competir en los diversos recorridos planteados.
La idea tras esta modalidad, centrada claramente en nuestra progresión como golfistas, consiste en hacer muchos hoyos con el fin de disminuir nuestro handicap. Cuanto menor sea, mayor prestigio tendremos como jugadores. Así podremos acceder a nuevos retos y crecer en definitiva dentro de este sereno deporte.
No se nos permite hablar demasiado sobre la faceta online, pero basta dejar constancia de que tendremos algo incluido en esta misma modalidad, y lo cierto es que promete… En cualquier caso, tendremos que esperar para descubrir el resto de facetas que comprende el lanzamiento, puesto que nos quedamos con la sensación de que sólo hemos visto una de las varias capas que posee este Mario Golf: World Tour.
¿Realismo? No, gracias
Uno de los aspectos que más valoramos de esta obra es que sea accesible, fácil de utilizar. A ello contribuye de forma definitiva la doble pantalla, que se encarga de hacer limpia y cómoda la interfaz, con indicadores y menús muy bien ordenados. Por cierto, cabe recalcar que el juego se puede manejar de principio a fin con la cruceta-stick y botonera, aunque para el golpeo además se puede emplear el stylus por si nos resulta más cómodo (en nuestro caso obtuvimos mayor precisión mediante los controles tradicionales).
Visualmente no hay mucho que decir. No alardea técnicamente, pero tampoco se limita a ofrecer lo justo. Parece que tendremos un título muy cuidado, sobre todo en el apartado musical, con -atención- las composiciones de Motoi Sakuraba (el genial músico detrás de los "Tales of"). Esto es tal vez lo más importante, ya que acompaña perfectamente a este estilo de juego, con ritmo pero sin excederse, generando una muy agradable ambientación.
Por tanto, sensaciones positivas que ahora queda por comprobar si van más allá de la media establecida dentro del género. Si despunta jugablemente es la gran duda que tenemos ahora mismo, y eso no lo podremos comprobar hasta que llegue el próximo 2 de mayo, momento en que veremos si Mario y compañía consiguen un birdie, un par o un bogey. Id preparando vuestro set de golf.