Watch Dogs: Impresiones exclusivas

Watch Dogs: Impresiones exclusivas
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Una ciudad entera en la pantalla táctil de tu móvil. Esta es la valiente propuesta que Ubisoft Montreal nos lanza con Watch Dogs, un videojuego de mundo abierto que explora el género de una forma que nunca antes había intentado. Nos convertirmos en Aiden Pierce durante unas horas para descubrir más acerca de su enigmática lucha de venganza. Y recuerda: la información es poder.

Ha pasado ya mucho tiempo desde aquel E3 de hace dos años, cuando Watch Dogs se mostró de forma oficial causando la sorpresa entre usuarios y prensa especializada. El título ha estado en nuestro radar desde aquel mismo anuncio, debido tanto al estudio que se encuentra detrás (Ubisoft Montreal, de ya dilatada trayectoria) como a la innovadora temática y jugabilidad que atesora el videojuego.

Como nos sentenciara hace escasos días Jonathan Morin -director creativo- este videojuego no pretende ser una crítica del actual mundo interconectado que tenemos, sino más bien "una representación de la conducta humana". Y esto es precisamente lo que obtienes cuando eres arrojado a la Chicago que manifiesta la obra, descubriendo a gente que va y viene usando su dispositivo móvil en un entorno rico y repleto de oportunidades.

La idea de manejar toda una ciudad a través de un dispositivo móvil parecía una utopía, pero después de comprobar de cerca su propuesta podemos constatar que es una realidad, y además plenamente satisfactoria. Una de las mayores complicaciones era conseguir un sistema de juego equilibrado, que nos permitiera activar una grúa, controlar una cámara o abrir un puente a distancia mediante una simple orden, y que eso a su vez se integrara con otra serie de mecánicas ya algo más tradicionales como disparar o conducir. Que no se rompiera este simple y a la vez complicado nexo era la mayor preocupación del estudio canadiense, pero gracias al retraso experimentado todo se ha hilado para que no haya fisuras. Tanto, que ya tenemos nueva fecha de lanzamiento: el próximo 27 de mayo.

El héroe tecnológico

Sus responsables se muestran entusiasmados con el universo Watch Dogs, uno que nace de la idea de ciudades controladas por complejos sistemas operativos. Chicago, una de las urbes más avanzadas en este sentido, se convierte así en epicentro de la acción, en el lugar que se ha escogido para que Aiden Pearce -un astuto hacker- ponga en jaque al control establecido por el ctOS, un sistema con los datos de cada uno de los residentes. Seremos el particular justiciero que busque a sus enemigos en base a un original pero fulminante dispositivo. Y no es un arma de fuego, es un teléfono móvil.

No han sido pocas las voces que se han pronunciado sobre una hipotética falta de carisma por parte del protagonista… pero es que Ubisoft Montreal todavía no quiere desvelar las verdaderas motivaciones de este particular "vigilante hero". Nosotros sabemos algo, pero preferimos no desvelar mucho. Sólo os diremos que nos encontramos ante una historia de venganza, la pérdida de alguien muy querido y la búsqueda de la fuerza que ha causado todos los problemas que tenemos actualmente.

La nube de misterio que ha rodeado este tiempo a nuestro personaje es por tanto algo premeditado, porque se prefiere que sea el usuario el que descubra los secretos que le conciernen. Todo ello en una trama que va a estar muy presente, en la cual no seremos lobos solitarios, sino que tendremos aliados. Un avance lineal y 30 horas de campaña principal (muchas más si decidimos ir a por todos los contenidos) edifican una experiencia que, según hemos comprobado, ha ganado en riqueza desde la última vez que tuvimos ocasión de probarlo.

No todo serán misiones dadas por la trama. También tendremos secundarias y eventos fortuitos que implicarán salvar a otros ciudadanos. ¿Serás héroe o villano?
No todo serán misiones dadas por la trama. También tendremos secundarias y eventos fortuitos que implicarán salvar a otros ciudadanos. ¿Serás héroe o villano?

Chicago, ciudad de hackers

Gente haciéndose fotos por la calle, un borracho dando tumbos, un vagabundo tocando la guitarra, un transeúnte que escupe al suelo… y sobre todo cantidad de gente atendiendo a su dispositivo móvil suponen la particular fauna tecnológica que nutre la Chicago de Watch Dogs. Surgía la duda de si el entorno iba a ser escaso en contenidos, pero estas se borraron inmediatamente tras ver unos cuantos minutos de juego. Se trata de una ciudad viva, con cantidad de detalles y cosas que hacer.

Evidentemente, la historia goza de su propia línea de misiones, siendo necesario acudir a los puntos señalados para comenzar cada tarea. Sin embargo, las misiones secundarias constituyen su propia vertiente, y de hecho pueden alargar la experiencia hasta las 80 horas según ya se confirmó. Aquí no debemos olvidarnos de ciertos eventos aleatorios que surgen mientras paseamos, como asistir a delitos fortuitos en los que podemos intervenir o pasar de largo. Esto afectará a nuestra reputación, importante en la aventura de una forma similar a como vimos en Assassin's Creed.

Otra vez, hay sinergias entre proyectos, y no sólo con el videojuego mencionado, sino también con Far Cry 3. Las particulares atalayas y torres de radio procedentes de ambos juegos se ven aquí manifestadas a través de estaciones ctOS que se reparten a lo largo de cada ciudad, las cuales -una vez saboteadas- nos dan acceso a nueva información, que se traduce en muchas más cosas que hacer. La estructura está de esta forma muy elaborada, constituyendo una entidad con profundidad que parece va a darnos mucho juego. Así lo intuimos a través de un vistazo al mapa, repleto de iconos por todas partes.

La acción de disparos es importante, pero eso no quita que un buen "porrazo" quite las tonterías a cualquiera. Y lo cierto es que la faceta es contundente y está bien resuelta.
La acción de disparos es importante, pero eso no quita que un buen "porrazo" quite las tonterías a cualquiera. Y lo cierto es que la faceta es contundente y está bien resuelta.

Las tres herramientas de Aiden

Del videojuego no sólo sorprende al versatilidad con la que se mueve el protagonista, que hereda descaradamente -y para bien- el sistema de animaciones empleado por Ubisoft Montreal en otras de sus producciones, sino que también destaca la integración de un sistema de coberturas y de apuntado que funciona satisfactoriamente. Esto lo comprobaremos en las misiones, con tareas que conllevan infiltración y tiroteos a partes iguales.

Algunas secciones del juego, de hecho, están diseñadas para que puedas abordar su resolución de distintas maneras: a tiros o sin malgastar una sola bala. Aunque hay otra vía complementaria, exclusiva de Watch Dogs, que otorga alma al producto. Nos referimos a la posibilidad de sacar provecho del escenario a través de nuestro teléfono móvil. Muchas veces, la ventaja consiste en crear distracciones para pasar desapercibidos (hacer sonar la alarma de un vehículo), y otras podrían simplemente salvarnos el pellejo en una persecución en coche (activando los semáforos en un cruce).

Lo curioso, y la vez digno de elogio, es que los desarrolladores hayan sabido integrar todas estas posibilidades sin que sea necesario detener o ralentizar la acción, dando órdenes una tras otra para accionar mecanismos, siempre teniendo en cuenta la barra de batería -recargable con el tiempo- que se muestra en la parte inferior de la pantalla. Había que poner un límite. Todo ocurre en absoluto tiempo real, incluida la selección de armas. Realmente, solamente tenemos una excepción, el "combat focus", que podemos activar a voluntad para acertar con mayor seguridad a nuestros contrarios. Así la vida -que es autorrecuperable- no se nos agotará demasiado pronto.

No seremos un solitario. Watch Dogs tendrá otros protagonistas, y todos ellos perfectamente caracterizados, con "motion capture" incluido. Hay mucho trabajo detrás.
No seremos un solitario. Watch Dogs tendrá otros protagonistas, y todos ellos perfectamente caracterizados, con "motion capture" incluido. Hay mucho trabajo detrás.

Un sandbox diferente

La integración del sistema de órdenes vía teléfono móvil para interactuar con el entorno es una clave fundamental, y destaca la manera en la que la IA de los enemigos responde de acuerdo a si decidimos levantar una barrera mecánica (que sirve como cobertura al estilo Vanquish) o si hacemos sonar una melodía (que actúa como señuelo). Experimentar con la urbe, ya sea navegando entre cámaras de seguridad para controlar la situación, o colándonos en comunicaciones privadas, abre un nuevo concepto de jugabilidad en mundo abierto.

Esto es lo que distingue a Watch Dogs de cualquier otro "sandbox", aunque eso no quiere decir que en su periferia siga defendiendo ciertos elementos clásicos. Por citar algunos, tenemos un árbol de habilidades para mejorar nuestras técnicas de hackeo, combate o creación de objetos. Sólo necesitamos puntos de habilidad y decidir qué aspecto mejorar. Por ejemplo, se nos da la oportunidad de disminuir el tiempo de recarga de las armas o de incrementar la cantidad de explosivos que podemos llevar.

Luego tenemos también las tiendas de armas, para adquirir todo tipo de rifles de asalto, lanzagranadas, pistolas, escopetas y francotiradores. Asimismo, hay minijuegos, desde uno que pertenece a una misión (consistente en resolver una especie de puzle gráfico abriendo circuitos al estilo BioShock), hasta otro que nos plantea una partida de póker (aunque con la ventaja que nos otorga el poder ver las cartas de los demás a través de las cámaras). Ya no todo consistirá sólo en ganar, sino en tirarte faroles para que suelten cuanto más pasta mejor…

Dicen que no uses el móvil cuando conduces, pero en Watch Dogs os aseguramos que será vital, además de muy divertido. Controla las carreteras a tu antojo.
Dicen que no uses el móvil cuando conduces, pero en Watch Dogs os aseguramos que será vital, además de muy divertido. Controla las carreteras a tu antojo.

Cuidado con el móvil

No son pocos los que dicen que Watch Dogs se ve peor ahora que desde su presentación en el E3 del 2012. Nosotros sólo podemos decir que visualmente después de probarlo en la "next-gen" es uno de los videojuegos que mejor agradecen la aparición del nuevo hardware. Por sus dimensiones, atención al detalle y cantidad de elementos en pantalla es un título que lucirá definitivamente a otro nivel en consolas como PS4 y Xbox One.

La obra está trabajada en todas sus facetas, ya vayamos a pie o en coche, siendo especialmente notoria la dedicación puesta en el sistema de animaciones. El estudio de Ubisoft Montreal es bien conocido por su trabajo en la técnica "motion capture", de hecho posee su propio laboratorio. Aunque no se nos haya concretado, es evidente que se ha vuelto a usar, y con muy buenos resultados, tanto en las partes puramente in-game como en las no pocas intros que se van alternando para descubrirnos la trama de la aventura.

La banda sonora es otro aspecto al que debemos hacer mención, con música licenciada a bordo de los vehículos (podemos saltar de canción en cualquier momento) y temas originales para la parte de las misiones (con música ambiental que se modifica según la situación en que estemos). Doblaje al español y un multijugador del que no se nos han concretado más detalles de los que ya se conocían -esto seguro que os lo descubriremos más adelante- completan la información de la que disponemos actualmente, muy prometedora toda y la cual nos sirve para hacer una primera conclusión: el videojuego nos ha convencido. Ahora sólo queda que llegue el 27 de mayo para empezar a hacer justicia en Chicago desde nuestro móvil. Así que dejad de "wasapear".

Para saber más: Entrevista con Jonathan Morin

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