Need for Speed Rivals: Impresiones E3

Need for Speed Rivals: Impresiones E3
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Las mejores ideas de toda una generación se unen con las apuestas para la siguiente en Need for Speed: Rivals. Modo individual y multijugador, todo en uno. Los suecos de Ghost Games realizan su debut pisando fuerte el acelerador con una de las entregas más atractivas de la afamada franquicia de velocidad.

Parece salido de la nada, pero Need For Speed Rivals puede convertirse en el título de la franquicia más ambicioso hasta el momento. ¿Cómo lo consigue? Fijándose muy bien en la clave del éxito de anteriores títulos, así como en lo que no funcionó, y mezclándolo todo con las posibilidades que ofrecen las consolas de nueva generación.

Velocidad

En cuanto a sus inspiraciones, hay mucho de Hot Pursuit y Most Wanted aquí, aunque quizá más del primero. Se nota en los circuitos alpinos, alejados de las grandes ciudades y con paisajes de ensueño. Las persecuciones de los policías tendrán también más importancia que nunca y vuelven de nuevo los gadgets como la barrera de pinchos o el impulso electromagnético para que, como policía, podamos frenar a los coches a la fuga y detenerlos a toda costa. Tener su base jugable en Hot Pursuit no les ha impedido sin embargo implementar todo lo bueno que tenía Most Wanted, como un sistema sin menús que utiliza checkpoints en la carretera para generar pruebas, o utilizar el botón derecho de la cruceta digital para lanzar un menú rápido con opciones rápidas y directas.

Todo para conseguir Speed Points, uno de los pilares en los que se centra este Rivals. Cuantos más tengamos más oportunidades tendremos de conseguir mejores vehículos o desbloquear nuevos eventos. Aunque esto no es nuevo, sí lo es el hecho de que tengamos que acceder a Bancos de Puntos, lugares situados por el mapa donde atesorar nuestra experiencia, puesto que si nos capturan por el camino podemos perderlos.

Pero lo que mejor funciona de Rivals es su apuesta por volver a lo simple en un circuito complejo. Lo deja claro su imagen y estética: un coche rojo, un coche azul. Azul contra rojo. Red versus Blue. No hay por qué rizar más el rizo a la hora de competir, y este sistema no excluye el galardonado Autolog, que nos permitirá jugar con amigos y comparar las puntuaciones y tiempos a batir para ver quién es el mejor corredor. De nuevo, seguirán siendo los Speed Points lo más importante, ya que ellos definirán quién es el verdadero maestro entre todos los rivales.

En Need for Speed Rivals no solo podremos personalizar nuestros vehículos estéticamente, también a nivel mecánico con todo tipo de mejoras, nitros, ondas de choque, inhibidores…
En Need for Speed Rivals no solo podremos personalizar nuestros vehículos estéticamente, también a nivel mecánico con todo tipo de mejoras, nitros, ondas de choque, inhibidores…

Como ya estamos acostumbrados a ver en este E3 en muchos títulos, Need For Speed también se suma a esta nueva modo de fusionar el modo individual con el multijugador. Todos prometen lo mismo: no tienes por qué jugar con otras personas si no quieres, pero si lo haces tendrás una experiencia más gratificante. Para todo lo demás, está la inteligencia artificial. Agresiva como pocas veces hemos visto en un Need For Speed, llegando a dudar en algunos momentos si ese coche que nos ha empujado sin piedad en cuanto hemos asomado el morro es una IA o un jugador de verdad.

De hecho, en cuanto a esta mezcla de offline y online, Rivals hace malabares con todas sus opciones. Puedes estar compitiendo en una carrera tradicional, con varios coches en pista y encontrarte en tu camino con un policía rival controlado por otro jugador que decide perseguirte por eso de cumplir con la ley. Mientras que tú estás realizando tu carrera offline, se te añade además esta nueva persecución online y todas ellas suman Speed Points. ¿No te parece bastante? Entonces suma algunas misiones secundarias que funcionan a modo de reto y que te recompensan por utilizar el impulso electromagnético, por ejemplo, en determinadas situaciones. El principal objetivo es que consigas encadenar cuantos más eventos mejor para poder sacar una buena tajada de puntos en el menor tiempo posible.

A un jugador, cooperativo o multijugador, pasar de un modo a otro es tremendamente sencillo en el mundo abierto de Need for Speed: Rivals.
A un jugador, cooperativo o multijugador, pasar de un modo a otro es tremendamente sencillo en el mundo abierto de Need for Speed: Rivals.

Añade ahora a todo este concepto jugable un apartado gráfico que luce tremendamente bien. Se podría decir que es gracias al sorprendente Frostbite 3, pero ejemplos como The Run nos dejan claro que no todo es poderío gráfico de motor, sino que el diseño de carreteras y el empaque final es más que concluyente. Ghost Games, el poco conocido estudio de desarrollo que está detrás del proyecto, ha creado un título más que atractivo en lo visual y no se han cortado en llevar el Frostbite 3 a las situaciones más adversas, con fuertes tormentas que nos chocan de cara, reflejos en todas las superficies que así lo requieren y un gran diseño de circuitos. Los atajos vuelven a ser útiles y la conducción es sólida tanto en tierra como en asfalto, todo coronado con esas impactantes montañas en el horizonte, como DICE marcó creando la orografía de Hot Pursuit.

Da igual si eres policía o corredor. Rojo o azul. Need For Speed Rival es en nuestro primer vistazo un juego sólido y, sobre todo directo. No pierde el tiempo en esperas para el multijugador, ni hace que nos volvamos locos mientras intentamos mirar el GPS y conducir a 200 kilómetros por hora, gracias a un sistema de guías en curvas bastante intuitivo (y poco intrusivo). Añádele el baño next-gen y con todo ello tienes un título de carreras que puede mirar con la cabeza bien alta a esa vorágine de juegos de conducción que se avecina en la meta de final de año.

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