Acción en equipo con tintes del género MOBA y una pizca de la estrategia propia de los juegos de cartas. Esa sería una buena descripción de Paladins: Champions of the Realm, el nuevo juego de corte multijugador en el que trabajan los creadores de Smite, y que una vez más promete sorprender a propios y extraño con un planteamiento jugable similar a lo visto en otros títulos, pero a la vez único y con mucha personalidad.
Se labraron una gran reputación con el notable juego de acción multijugador Tribes: Ascend, y tiempo después hicieron lo propio con el que a día de hoy continúa siendo uno de los MOBA más populares del momento, el adictivo Smite. ¿Qué hacer ahora? Mientras buscan devolver a la primera línea de fuego la obra con la que se dieron a conocer, el equipo de Hi-Rez Studios se ha propuesto fusionar ambos géneros de un modo realmente atractivo con su prometedor Paladins: Champions of the Realm, que fue presentado hace unos meses en la feria alemana Gamescom, donde ya nos dejó con buenas sensaciones tras disputar alguna que otra partida.
Es un juego con mucha acción donde nunca hay un segundo de respiro, pero a la vez también es un título que exige de nosotros cooperación con los aliados y un uso inteligente de las habilidades especiales con las que han sido dotados los diversos héroes a los que tendremos acceso. Nada nuevo, pensaréis muchos de vosotros; y así es, aunque lo cierto es que este colorista videojuego también aporta novedades más que interesantes relacionadas principalmente con la forma de entender las batallas y el curioso sistema de progresión de habilidades por el que apuesta.
El rey de la colina
Ambientado en un llamativo mundo propio de la ciencia ficción, Paladins enfrentará a dos equipos de seis jugadores, cada uno en intensos duelos donde el objetivo final será destruir la base del contrario, como en cualquier MOBA, aunque para hacerlo antes tendremos que demostrar nuestra supremacía en el campo de batalla tomando y defendiendo una serie de puntos de control, necesarios para convocar a las máquinas de guerra con las que derribaremos las defensas del enemigo. Lo bueno es que solo puede haber uno de estos vehículos sobre el terreno, lo que nos motivará a pelear todavía con más dureza si cabe para evitar que sea el equipo contrario quien convoque a esta máquina de asedio.
Quien lo consiga, obviamente, adquirirá una importante ventaja estratégica que sin embargo tendrá que aprovechar con cabeza si no quiere que el bando contrario le arruine la fiesta en cuestión de segundos. Porque estos vehículos no son invulnerables. Así que una vez han sido convocados, toca defender y atacar según el bando en el que nos encontremos. Algo que, insistimos, garantiza que en todo momento haya tiroteos, persecuciones, explosiones y muertes imposibles. Si es que hasta al morir y reaparecer en nuestra base se nos permitirá usar una montura para regresar rápidamente al campo de batalla. Uno en el que se darán cita una presumible gran variedad de campeones que desempeñarán roles muy concretos centrados en la defensa, ataque, apoyo y demás.
De momento ya conocemos a siete de estos héroes, que nos han sorprendido positivamente por su llamativo diseño y las habilidades especiales a las que tienen acceso, aun cuando en algunos casos ahondan en mecánicas de juego ya vistas en otros títulos del estilo. Hablamos por ejemplo del caballero Fernando, que usará un enorme escudo para proteger a los suyos mientras ataca a los contrarios con una lanza; o Cassie, que se apoyará en el uso de un arco para golpear a los rivales desde la distancia con el apoyo también de un águila robótica, que a su modo entorpecerá los avances del bando contrario.
Por separado cada uno de estos campeones desempeñará un buen papel en el campo de batalla, pero solo aquellos que sepan combinar con inteligencia sus habilidades saldrán victoriosos de los envites más difíciles. Esto es algo en lo que sus creadores han insistido con mucha vehemencia. Por otro lado también resulta muy interesante el sistema de progresión de habilidades por el que se apuesta, valiéndose de una baraja de cartas con un buen puñado de atributos y mejoras con las que hacer de nuestro personaje un luchador único frente a otros rivales que hayan optado por el mismo campeón. ¿Cómo funciona exactamente? Sencillo.
Cada vez que subamos de nivel se nos instará a seleccionar una carta de entre tres opciones al azar, con mejoras que van desde una mayor cadencia de fuego a más precisión, daños adicionales como de fuego o veneno, más velocidad de movimiento, regeneración de salud mejorada y un largo etcétera. En total podremos acumular cinco de estas cartas, que contarán además con otros tantos grados de calidad que determinará su efectividad. ¿Cómo mejorar su poder? Reservando su elección a los momentos finales de la partida cuando nuestro campeón tenga ya un buen nivel de habilidad, pues será este el que determine su "calidad". No solo eso. Una vez alcanzado el nivel cinco, cada vez que mejoremos nuestras habilidades nos tocará sustituir una de las cartas iniciales por otra distinta, que obviamente tendrá mucho más valor.
El equipo de Hi-Rez Studios ha destacado la versatilidad de este sistema de progresión de habilidades, que nos va a permitir adaptar el estilo de juego de nuestro campeón a las diversas condiciones del combate. Y esto será importante teniendo en cuenta que las batallas se decidirán casi siempre en el último momento, ya que nada puede darse por perdido / ganado hasta que una de las dos bases caiga. Algo que nos encanta, pues dota a las batallas de un toque de épica que siempre se agradece en esta clase de producciones. Además, el propio diseño de escenarios parece ir en esta dirección, al apostar por una estructura lineal con un único camino en el que una y otra vez colisionaremos contra el ejército contrario. Está por ver si todos los escenarios se rigen por la misma norma, o también los hay con varios caminos posibles y otros elementos que marquen el devenir de los acontecimientos.
Buenos puntos a tener en cuenta, y más si eres de los que disfrutas de las experiencias de acción cooperativa. Por supuesto todavía hay muchas incógnitas que resolver, pero por estética, intensidad de su acción y también por antecedentes, en 3DJuegos tenemos muchas ganas de jugar versiones más avanzadas de Paladins Champions of the Realm. A finales de año se espera que dé comienzo su fase de pruebas, a la que podéis registraros a través de su web oficial. En 2016 debería estrenarse el juego en PC, Xbox One y PlayStation 4.