WoW Wrath of the Lich King: Impresiones jugables

WoW Wrath of the Lich King: Impresiones jugables
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El reino online de World of Warcraft aumenta su nivel para darnos más territorios que visitar, más mazmorras que explorar y un nuevo tipo de personaje capaz de marcar la diferencia en la lucha contra el Rey Exánime. Los Caballeros de la Muerte de Horda y Alianza comparten destino común en Rasganorte, el nuevo continente que presenciará una expansión que recoge la vitalidad clásica de la saga Warcraft.

Un videojuego tan enorme como World of Warcraft necesita de grandes lugares en los que mostrarse, así que no es de extrañar que en 3DJuegos decidiéramos coger un avión para irnos directamente al corazón de Blizzard, en California, y descubrir así lo que la nueva expansión del inmenso MMORPG nos tiene deparado para los próximos meses. Un título que intentará dar más juego a los millones de suscriptores que ya forman parte de este particular mundo online que ha roto todas las previsiones posibles.

Con Burning Crusade, los amantes del fascinante mundo online basado en Warcraft pudieron ponerse en el rol de dos nuevas razas, aumentar su nivel de experiencia hasta la cifra de 70 y descubrir nuevas regiones gracias a la incorporación de monturas voladoras. Esto fue hace algo más de un año y Blizzard ya está dispuesta a sacar una segunda expansión en ese siempre desafiante intento por contentar a sus fieles seguidores. La política de novedades seguirá vigente, aunque ahora estará más centrada en los jugadores más expertos.

World of Warcraft expande su reinado
Anunciada al mundo durante el mes de agosto en el último evento BlizzCon, la expansión conocida con el nombre de Wrath of the Lich King supone la segunda actualización de contenidos para el apreciado MMORPG. Más niveles de experiencia (hasta el 80), una nueva clase, un continente adicional, una profesión a descubrir y todo un conjunto de contenidos y de optimizaciones que comprenden mazmorras inéditas y posibilidades tan interesantes como controlar armas de asedio dentro de entornos destruibles.

Para disfrutar de esta nueva expansión (territorios, mazmorras...) será necesario poseer un nivel de personaje cercano al 70.
Para disfrutar de esta nueva expansión (territorios, mazmorras...) será necesario poseer un nivel de personaje cercano al 70.

Blizzard quiere seguir justificando la existencia del que es el videojuego masivo online más exitoso de todos los tiempos, y se nota que están haciendo lo posible para dar a los usuarios más expertos nuevos motivos para seguir jugando dentro de un mundo que nos propone una historia que complemente a todo lo vivido ya en Azeroth. Para ese objetivo específico se ha invitado a un viejo conocido que muchos de los fans de Blizzard conocerán gracias a un título tan emblemático como Warcraft III.

Enemigo común
Hablamos del Rey Exánime, antagonista indiscutible de una expansión que nos propondrá expulsarle de su trono helado a través de una contundente derrota. Dará igual que seamos de la Horda o de la Alianza. El objetivo será siempre el mismo y tendrá mucho que ver con el hecho de visitar Rasganorte, nuevo continente que nos planteará heladas pero también variadas regiones en las que librar batallas de manera recurrente contra el ejército de no-muertos que se ha montado el ahora poderoso y descomunal rey Arthas.

El inicio del camino para acabar con el terror en Rasganorte, y librar de paso a Azeroth de una posible amenaza, tiene diferentes puntos de partida dependiendo de si nuestro personaje pertenece a la Alianza o a la Horda. De esta manera, y según nos explicó Jeffrey Kaplan (lead designer del juego), podremos comenzar nuestra aventura en Fiordo Aquilonal o en Tundra Boreal, regiones situadas en los extremos este y oeste del mapa del nuevo continente que supone Rasganorte.

Una vuelta a lo clásico
Desde allí comenzarán los usuarios su partida (siempre que posean ya un personaje de nivel 68) con el fin de descubrir unos territorios que acercan una temática, unas razas y una historia completamente inéditas a los jugadores de World of Warcraft. No ocurrirá lo mismo para los conocedores de títulos como Warcraft III, que verán en esta expansión un buen motivo para rememorar algún que otro elemento del pasado. Es el caso, por ejemplo, del diseño con el que se ha impregnado a la obra, y es que la sensación es la de ver una vuelta al clásico mundo de Warcraft.

Wrath of the Lich King aporta un mundo que vuelve a ser tan fantástico como los primeros Warcraft desarrollados por Blizzard.
Wrath of the Lich King aporta un mundo que vuelve a ser tan fantástico como los primeros Warcraft desarrollados por Blizzard.

Hay una introspección hacia el aspecto visual original de la saga, gracias en parte al retorno de viejos conocidos que van más allá del ya citado Rey Exánime. En efecto, el propio continente de Rasganorte ya estaba presente en Warcraft III, incluido su aspecto ártico, el cual regresa para darnos además una historia reminiscente de la tratada en el conocido videojuego de estrategia. Según nos comentaron los desarrolladores, ha sido todo un reto trasladar toda la propiedad intelectual existente a esta expansión, aunque también admiten que trabajar en ello ha sido algo realmente excitante.

Un mundo para jugadores con mucho nivel
Todas las regiones que componen el mapeado de Rasganorte tienen un tono de color y una ambientación diferentes, pero todos coinciden en que están diseñados para ser visitados por usuarios que ya hayan jugado y llegado al nivel máximo que permite Burning Crusade: el nivel de experiencia 70. Por ello no se concibe la posibilidad de que alguien pueda entrar directamente en esta expansión sin haber pasado antes por Burning Crusade. Según la propia Blizzard, sería algo que no tendría sentido.

En cualquier caso, las zonas que tuvimos la ocasión de apreciar son realmente atrayentes y están dotadas de ese espíritu Warcraft tan característico de la casa de videojuegos californiana. Fuimos conscientes de que aún quedaban algunas zonas por terminar (algo que representaron desde Blizzard con unos andamios "in-game" a modo cómico sobre una de las localizaciones), pero zonas tan importantes y extensas como las correspondientes al Cementerio de Dragones ya mostraban un estado de gestación muy avanzado.

Nuevas mazmorras que visitar
Concretamente, la historia de esta región será especialmente importante para la expansión puesto que, además de poseer espacios muy variados, contiene una de las mazmorras más desafiantes del videojuego: Naxxramas. Aquí será donde veamos a uno de los oficiales más poderosos del Rey Exánime, aunque no habrá ocasión de encontrar su misteriosa entrada (la mazmorra es una necrópolis flotante) ni de comprobar su gran dificultad hasta que no alcancemos el nivel 80.

No obstante, y si queremos hablar de las mazmorras con las que los usuarios se encontrarán en primera instancia, entonces tenemos que mencionar a Utgarde Keep. Esta es la primera mazmorra de la expansión a la que accederemos, estará habitada por los Vrykul (una de las muchas razas NPC que veremos en el juego) y formará parte del enorme decorado repleto de bosques, de explanadas e incluso de algún que otro puerto que juntos conforman el escenario del Fiordo Aquilonial.

Descubriendo Rasganorte
Realmente, hay mucho que descubrir en esta expansión, y mucho más si tenemos en cuenta que las conexiones entre un punto y otro de Rasganorte están muy bien resueltas. Según Kaplan, un usuario que empiece en un extremo del mapa no tendrá ninguna dificultad para encontrar a su amigo situado a una gran distancia. Las posibilidades de movilidad estarán correctamente integradas, ya que aparte de teletransportes, existirá la posibilidad de usar nuevas monturas de vuelo específicamente diseñadas para la ocasión.

Planteado como un continente situado en el Norte del mapa de Azeroth, Rasganorte es el continente más grande jamás visto en una expansión de World of Warcraft.
Planteado como un continente situado en el Norte del mapa de Azeroth, Rasganorte es el continente más grande jamás visto en una expansión de World of Warcraft.

Otro punto a tener en cuenta es que dependiendo del punto desde el que empecemos, y como viene siendo habitual en World of Warcraft, la experiencia será completamente diferente. A esto ayuda la existencia de diferentes regiones como las frondosas y coloridas Colinas Pardas (una de las localizaciones más impactantes de la expansión debido a sus altos pinos), el ruinoso y tribal lugar de Zul'Drak o la tropicalidad de Sholozar Basin. Todos ellos parajes en los que no nos detendremos ya que un vídeo vale más que mil palabras.

El Caballero de la Muerte
De esta manera dejamos por un momento lo que significa el territorio de este novedoso continente metido entre las aguas que separan a Kalimdor y a los Reinos del Este para hablar de una de las incorporaciones más importantes de esta expansión: el Caballero de la Muerte. Es relevante no sólo porque supone el primer personaje de la clase héroe en aparecer dentro de World of Warcraft, sino porque promete una dinámica de juego realmente innovadora y que creemos que será capaz de contentar a los más experimentados.

Para empezar, hemos de apreciar que cualquier personaje, sea de la raza que sea, podrá convertirse en Caballero de la Muerte siempre que tenga el nivel 55. Nosotros pudimos ver a un enano o incluso a un tauren transformados en personajes de este tipo y os podemos asegurar que a nadie se le escapó una pequeña sonrisa durante la presentación que tuvo lugar en el salón de conferencias de la compañía Blizzard. Ver a tu propio personaje metido en esta nueva clase supone un impacto visual, pero también jugable.

Jugando con la energía oscura
Esto viene motivado por el hecho de que con el Caballero de la Muerte se ponen en marcha los conocidos como "runes", elementos que sustituyen en este tipo de personajes a las barras de maná o de ira. Hay "runes" de tres tipos diferentes (blood, frost y unholy) y todos ellos se pueden combinar de manera diferente para conseguir determinados efectos sobre las habilidades que vamos a poder desencadenar. Al emplear una habilidad que gaste una "rune" determinada, ésta inmediatamente se regenerará durante unos segundos.

Para jugar a Wrath of the Lich King se hará necesario que los usuarios hayan probado antes a subir su nivel con la anterior expansión (Burning Crusade).
Para jugar a Wrath of the Lich King se hará necesario que los usuarios hayan probado antes a subir su nivel con la anterior expansión (Burning Crusade).

En definitiva, se trata de una mecánica muy semejante a la ya vista en el caso de la ira o el maná, sólo que el Caballero de la Muerte lo que hace ahora es dar a los usuarios la oportunidad de tener mayores posibilidades estratégicas a la hora de combatir. La mecánica de combinar las "runes" de una manera u otra podría determinar la mayor o menor efectividad de nuestras ofensivas, las cuales tienen como característica peculiar el incorporar el uso de energía oscura (algo que viene directamente de la expansión The Frozen Throne de Warcraft III).

¿Querías un “tanque”?
Efectivamente, el Caballero de la Muerte es otra incorporación que viene inspirada por Warcraft III, algo que va a determinar algunas de sus habilidades especiales (las cuales no han sido reveladas completamente). Por el momento, sólo sabemos que el uso de "runes" aumenta el denominado como "runic power", un indicador que, una vez relleno, nos permitirá desencadenar acciones muy potentes, provocando enfermedades a los contrarios, reviviendo a amigos para que luchen durante un período de tiempo o invocando a seres desde los poderes del más allá.

Es importante tener en cuenta que el Caballero de la Muerte ha sido creado para ser el personaje de tipo "tanque" que todos anhelaban. Todo ello sin que suponga un sacrificio adicional en nuestro plantel de personajes, ya que no tendremos que deshacernos de ninguno. La única limitación es que sólo se nos permite disponer de un Caballero de la Muerte por servidor y por cuenta, aunque todavía tenemos que esperar para conocer detalles concretos acerca de su implementación en el juego, ya que no pudimos probarlo en la versión que Blizzard puso a nuestra disposición.

Mejorando la experiencia World of Warcraft
Lo que sí podemos asegurar es que el Caballero de la Muerte tendrá sus propias “quests” que ayuden a comprender mejor la historia de un personaje que estamos deseando conocer casi con las mismas fuerzas con las que esperamos ver las nuevas posibilidades en materia de monturas aéreas. Según hemos podido averiguar, en los nuevos aeroplanos cabrá la posibilidad de llevar pasajeros y disputar combates en el aire dentro de misiones que nos llevarán incluso a fases de rescate a bordo de una especie de helicóptero.

Cada localización en Rasganorte tendrá una tonalidad diferente y característica, algo que denotará una ambientación única y muy expresiva.
Cada localización en Rasganorte tendrá una tonalidad diferente y característica, algo que denotará una ambientación única y muy expresiva.

Por tanto, muchas posibilidades para una expansión que según sus diseñadores va a optimizar algunos aspectos adicionales, importantísimos en el caso de las mazmorras. En particular, para esta expansión, se va a optar por mazmorras de 10 y 25 jugadores (a elegir). La finalidad última no es conseguir un entorno "casual" o "hardcore", sino que se fomente un tipo de relaciones que favorezcan una mejor cooperación a la vez que se propicia un clima en el que probablemente nos podríamos encontrar más a gusto. Esto no quiere decir que se obvien las mazmorras de 40 jugadores, las cuales se incorporarán en un parche si es que Blizzard aprecia que la experiencia de juego no corre peligro.

Ni “casual”, ni “hardcore”
Con todo, tenemos una expansión que vuelve a la vertiente más purista de Warcraft, ofreciéndonos una progresión de niveles (de 70 a 80) que se asemejará mucho, en términos de dificultad, a la vivida en Burning Crusade (de 60 a 70). Según Jeffrey Kaplan, no será ni para jugadores ocasionales ni para jugadores expertos y se diseña pensando en cómo juega cada persona, aunque lo cierto es que Wrath of the Lich King estará más indicado para aquellos que hayan jugado a la anterior expansión.

Mejorará el apartado gráfico, y eso es algo muy apreciable si consideramos que Rasganorte es un territorio más extenso que el incorporado en la anterior expansión. Además, los requerimientos de máquina volverán a ser bajos, aunque con posibilidades para aquellos ordenadores preparados a dar más de sí. Incluso habrá nuevos peinados y bailes, además de muchas mejoras en el árbol de técnicas para que cada clase se adapte mejor al nuevo rango de niveles.

Un rumbo diferente a Burning Crusade
En suma, una expansión muy completa pero de la que aún nos quedan muchos detalles por conocer. De hecho, esto es algo más que notorio si tenemos en cuenta que los talentos aún no están implementados, al igual que muchas zonas del mapa, las cuales están aún están en desarrollo. En cualquier caso, la expansión va a muy buen ritmo y lo que hemos podido jugar ha estado a la altura de lo que se espera de una compañía como Blizzard, que cuida el acabado de sus juegos hasta el último detalle.

En realidad, la idea de crear el continente de Rasganorte ya se había tenido en cuenta desde hace años. No obstante, ahora ha sido el momento adecuado para ponerla en marcha.
En realidad, la idea de crear el continente de Rasganorte ya se había tenido en cuenta desde hace años. No obstante, ahora ha sido el momento adecuado para ponerla en marcha.

Es cierto que en esta ocasión no tendremos el placer de ver nuevas razas jugables, pero la incorporación del Caballero de la Muerte puede hacer que no echemos nada de menos, además de que puede llegar a convertirse en el baluarte de esta nueva expansión. Algo parecido ocurre con las posibilidades de vehículos de combate o de asedio, los cuales estamos deseando ver en acción. En general, Blizzard va a volver a apostar por un buen cúmulo de novedades, aunque en otro sentido diferente al de Burning Crusade.

Esperando a la beta
En esta ocasión, se pretende aportar más contenidos para los jugadores avanzados, con nuevas “quests” que se nota que quieren ser más originales, a la vez que se plantean incorporaciones como la "inscripción", una profesión con muchas posibilidades que se resumen en la idea de permitir a los usuarios aumentar el poder de las magias. Evidentemente, habrá alguien que nos enseñe la profesión, pero este será otro de los puntos a desvelar en el futuro.

No hay una fecha establecida para lanzar el título al mercado. Tampoco hay ninguna fecha programada para poner en marcha una beta para que los usuarios contribuyan a mejorar el juego. No obstante, se sabe que las betas son una práctica habitual para Blizzard y esto será algo que probablemente juegue en favor de los usuarios, que puede que no tengan que esperar mucho tiempo hasta que empiecen a probar Wrath of the Lich King.

Llamamiento a los habitantes de Azeroth
En lo que se refiere a nosotros, sólo nos queda hacer un llamamiento a los habitantes de Azeroth para que salgan de vez en cuando del mundo virtual de World of Warcraft y comprueben los nuevos detalles que en 3DJuegos estamos deseando ofreceros lo antes posible. De hecho, os emplazamos a una cita con los verdaderos protagonistas de esta expansión, que no son ni más ni menos que Jeffrey Kaplan (lead designer), J. Allen Brack (producer) y Tom Chilton (lead designer).

Con ellos charlamos en nuestra más reciente visita a Blizzard para conocer de primera mano qué es lo que nos va a ofrecer la nueva expansión de World of Warcraft. Con especial tratamiento sobre la comunidad de usuarios, las preguntas giraron en torno a lo que los jugadores esperan de Wrath of the Lich King, aunque también tuvimos tiempo para hablar de la industria y de planes de futuro, pero esto ya será algo que veréis en un futuro artículo en el que desvelaremos algún que otro detalle importante más acerca de esta interesante expansión.

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