Recuérdalo, en la guerra todo vale. Destruye ciudades, tiéndele emboscadas al enemigo, usa posiciones elevadas… De la mano de los creadores de Warhammer 40.000: Dawn of War nos llega lo que sin duda promete ser un auténtico recital de realismo, tecnología y profundidad táctica. Prepárate, la guerra más real llega a tu Pc.
La Segunda Guerra Mundial es uno de los acontecimientos que más títulos ha inspirado. Cualquier tipo de juego tiene grandes lanzamientos de esta temática, ya sean basados en el propio conflicto o empleando a los nazis como rivales, el prototipo de enemigo total, 100% maligno. Juegos de acción (Call of Duty, Medal of Honor), aventuras gráficas (Indiana Jones, Nibiru), simuladores de vuelo (IL-2, Heroes of the Pacific) o de submarinos (saga Silent Hunter) y, por supuesto, la estrategia; que ha convertido la Segunda Guerra Mundial en su elemento más recurrente. Sería fácil por tanto pensar en Company of Heroes como en un RTS más, destinado a aprovechar este habitual filón, nada más lejos de la realidad.
Relic es la compañía que desarrolla este título, y si eres aficionado a la estrategia seguramente sabrás que son los responsables de Homeworld 2, y del sensacional Warhammer 40.000 Dawn of War. Como se puede suponer el título está pues en buenas manos.
Profundidad táctica
En Relic están más interesados en la profundidad táctica de los combates que en los aspectos estratégicos tales como la parte de la recolección de recursos o la correcta administración de las fases de producción. Por tanto han decidido emplear como modelo el concepto Dawn of War. En Company of Heroes se empleará un sistema muy parecido al de Warhammer, encontrando diferentes puntos estratégicos en el mapa que mediante su control nos permitirán obtener recursos. La pequeña vuelta de tuerca al sistema ideado por Relic, consiste en que en los citados puntos no obtendremos la totalidad de los recursos, si no que algunos estarán destinados a la producción de electricidad, munición o combustibles, de forma separada e independiente, con lo cual necesitaremos el control simultáneo de varios para poder estar convenientemente abastecidos.
La inteligencia artificial es uno de los aspectos en los que más énfasis han puesto los chicos de Relic. El aumento de nivel de dificultad no incidirá únicamente en la aceleración de las fases de producción del enemigo como suele ocurrir en la mayoría de juegos, en los niveles más altos el comportamiento del enemigo y su destreza a la hora de llevar a cabo las tácticas será verdaderamente desafiante. Pero la evolución no viene dada solamente en la IA del rival, nuestros hombres también se comportarán como soldados reales. Todos los objetos tienen una serie de propiedades a las que nuestros hombres estarán atentos; si pierden su cobertura correrán a buscar otra o caminarán haciendo los clásicos turnos para las coberturas.
Uno de los aspectos más interesantes de la ya lejana primera parte de La Batalla por la Tierra Media, era el factor de que las unidades conservaban la experiencia y las mejoras ganadas de misión a misión, lo cual aportaba una cohesión muy importante a la campaña, junto a una sensación de responsabilidad y preservación de los hombres en el jugador, que otorga un gran realismo a la experiencia de juego. Company of Heroes afortunadamente va a tratar de hacer hincapié en ese hecho, y el concepto será muy similar al del título de EA. Cuando nuestras unidades estén heridas podremos decidir mandarlas a la base y esperar a que se recuperen rápidamente, o reservarlas para la siguiente misión conservando la vital experiencia del combate.
El aspecto dinámico de unos escenarios totalmente cambiantes por la destrucción, harán que ninguna partida sea igual, y que ninguna táctica pueda ser empleada en repetidas ocasiones. Deberemos emplear la cabeza como pocas veces hemos visto en un juego de estrategia, llevándolo completamente a otro nivel.
La táctica de destruir las posibles coberturas del enemigo debe ser tomada en cuenta, así como la posibilidad de echar abajo torres o edificios donde el enemigo pueda situar francotiradores o panzerfaust. En la mayoría de juegos la solución más factible y rápida sería la de enviar la totalidad de nuestro ejército directo hacia el enemigo por el camino más corto y todos en bloque; esa táctica en Company of Heroes nos llevará al desastre más absoluto.
La WWII como nunca la habías visto
El motor gráfico que se ha empleado es Essence, el mismo que el de Warhammer, y es algo que se nota en cuanto se ven las screens. Los soldados tienen un cierto “aire” a los personajes de Warhammer, pero todo tiene un aspecto mucho más evolucionado. La cámara, como ya sabemos, podrá ser situada literalmente donde queramos, aunque para tener el mayor control posible de la situación lo ideal es la vista cenital.
El juego incorporará la posibilidad de emplear Directx10 o 9, pero lógicamente el espectáculo con el nuevo estándar gráfico será verdaderamente apabullante, con muy poco que ver con su otra versión. Nos atrevemos a decir que gráficamente es el mejor juego de estrategia que hemos visto. Las capturas y videos son verdaderamente impresionantes, y el motor implementado, que ya de por si era brillante, ha sufrido muchísimos cambios. Pero la cosa no queda en simples mejoras visuales para hacerlo más agradable para la vista, este portentoso apartado gráfico repercute y mucho en la jugabilidad.
Los entornos son completamente destructibles, reaccionan con total realismo al impacto de balas y explosiones, con lo cual deberemos ser muy cuidadosos a la hora de emplear según que armamento de nuestros hombres, porque los cambios en el escenario pueden crear o solucionar muchos problemas. A su vez también habrá que estar muy atentos de donde parapetamos a nuestros soldados, porque podremos asistir impotentes a la progresiva desaparición de los muros que nos cubrían por los disparos del fuego enemigo y quedarnos expuestos.
El modelado de los personajes es sobresaliente, y asistiremos a multitudinarias batallas con decenas de soldados moviéndose al mismo tiempo y con gran nivel de detalle y unas animaciones brillantes.
Company of Heroes estará orientado fundamentalmente al modo singleplayer, con una campaña más larga que la de Dawn of War, pero igual de intensa. El juego promete ser una experiencia verdaderamente fascinante y única, ofreciendo numerosos factores nunca vistos en un género tan trillado y lleno de clichés como la estrategia en tiempo real. ¿Lo malo? Hazte con un buen sofá y espera cómodamente sentado, porque hasta septiembre de este mismo año no lo veremos.