Una de las sagas más terroríficas de los últimos tiempos tiene nueva entrega en ciernes, y ésta continúa dibujándose en horizonte como una de las más prometedoras y ambiciosas de la franquicia. Los chicos de Vatra Games tienen ante sí la oportunidad de reivindicarse: Downpour es su bandera.
Shattered Memories, Homecoming, Origins, The Escape... Los últimos cinco años han sido tremendamente prolíficos para la franquicia Silent Hill, con abundantes títulos y la mayoría de éstos de una calidad muy respetable. En los últimos tiempos Konami ha apostado por llevar la marca hacia públicos más occidentales, precisamente, encargándoles sus desarrollos a estudios europeos y norteamericanos.
Ahora la pelota está en el tejado de Vatra Games, que tras el interesante trabajo llevado a cabo por parte de Double Helix con el estimable Homecoming, tienen la oportunidad de dar el salto a los estudios de primera línea con este Downpour. El aguacero está cerca.
La Huida
Como ya adelantamos en su momento, en Downpour seremos un presidiario huido de la justicia, que aprovechará un misterioso accidente del autobús que lo transportaba para tratar de recuperar la libertad que la justicia le había negado. A partir de entonces, y esto ya es información nueva, descubriremos por un periódico abandonado por el suelo, que la ciudad hacia la que nos encaminamos ha sido fuertemente azotada por una brutal tormenta.
Con las carreteras bloqueadas, y sin salida posible, a los habitantes de la urbe sólo les quedó la opción de refugiarse en sus casas. El desastre está a la vuelta de la esquina. En el momento en que nos informamos seguimos nuestro camino, y será entonces cuando el usuario comience a familiarizarse con el curioso sistema de cámaras del juego, que mezclará las habituales del género de la acción/aventura, con otras más propias del Survival Horror en general, y de la propia saga Silent Hill en particular. ¿Cómo serán éstas? En momentos determinados y para preparar algunos sustos verdaderamente épicos, Vatra planea cambiar la cámara de ubicación en instantes determinados para jugar con el dramatismo de secuencias concretas o con el pavor del usuario.
Por supuesto los responsables de estos golpes de efecto son principalmente los monstruos, de los cuáles ya se han mostrado algunos como los Screamers (que podríamos traducir como "los que gritan"), bestias despellejadas que desorientarán a nuestro protagonista con sus gritos antes de aprovechar nuestro desconcierto para tratar de destrozarnos con sus garras.
El combate está a medio camino entre Shattered Memories y Homecoming, con un personaje que recupera de alguna manera la torpeza que tradicionalmente ha caracterizado a los personajes de las series sin llegar a los extremos de, por ejemplo, la Heather de Silent Hill 3. Sin embargo en esta ocasión, y lejos de apostar por los controles directamente torpes, se apuesta porque el propio Murphy demuestre con su movilidad su falta de preparación para la lucha, y que cuente con unas armas que se desgasten con mayor velocidad que en entregas precedentes.
La sensación de persecución será constante, con esa clásica angustia que siempre ha traído consigo la marca Silent Hill, todo ello aderezado con armas que en su práctica totalidad vuelven a ser de corte cuerpo a cuerpo, y que constantemente nos obligarán a plantearnos el abandonar nuestras favoritas ante su inminente desgaste.
El Otro Mundo será de nuevo uno de los grandes protagonistas de nuevo en Downpour, y una de las secciones de pesadilla que se ha mostrado en las presentaciones del juego hace referencia a una inundación. En la secuencia un pequeño restaurante comenzará a inundarse con nosotros en su interior, obligándonos a escapar del agua y huir de una misteriosa nube oscura de humo que comenzará a perseguirnos al más puro estilo Perdidos a través de un pasillo.
Silent Hill: Downpour se pondrá a la venta para PC, Xbox 360 y PlayStation 3. Con él tendremos una nueva entrega de las siempre interesantes series Silent Hill, que ante todo busca recuperar el pulso de los primeros episodios de la franquicia.