La llegada de Captain Toad: Treasure Tracker a Nintendo Switch era cuestión de tiempo. Sus niveles cortos, pero repletos de ingenio, se adaptan perfectamente a la naturaleza portátil de la plataforma. Además, es la excusa perfecta para añadir nuevos niveles y una característica cooperativa realmente interesante. Os descubrimos cómo le sienta a Toad el efecto Switch.
La idea original de Captain Toad: Treasure Tracker se encuentra en Super Mario 3D World, unas fases en que debíamos manejar al simpático champiñón para recolectar una serie de estrellas. Todo mediante dos dinámicas centrales y muy sencillas: movernos y rotar la cámara. En un principio se iba a manejar a Mario, pero debido a que su característica era saltar, se hacía necesario crear niveles más grandes… y eso era justamente lo que se quería evitar. Se llegó a pensar en Link como candidato, pero finalmente se optó por Toad.
Cuenta el equipo de desarrollo en una entrevista con la publicación Nintendo Life que deseaban crear un videojuego a partir de aquellos minijuegos, y tuvieron luz verde cuando Miyamoto creyó que era buena idea. Así nació todo. Crearon multitud de niveles en los que se añadió la posibilidad de coger cosas y tirarlas, así como otras mecánicas, e incluso jefes. Con esto se pretendía dar variedad a una peculiar aventura que obtuvo una respetable aceptación. Su puntuación de 81 en Metacritic y el más de millón de unidades vendidas así lo confirman.
Tres años y medio después de que Captain Toad se estrenara en Wii U, el juego llega a Nintendo Switch con dos importantes novedades. Una tiene que ver con la incorporaciones de nuevos niveles, basados en los reinos de Super Mario Odyssey (incluyendo Nueva Donk). La otra está relacionada con la incorporación de juego cooperativo para dos usuarios. En definitiva, una oportunidad para redescubrir el título bajo el carácter portátil de Switch, pero sobre todo para descubrir uno de los videojuegos más curiosos y carismáticos que nos ofreció la pasada consola de Nintendo.
El concepto Hakoniwa
Jardines en miniatura
Cada uno de los más de 60 niveles que contiene el juego responde al concepto de jardín japonés en miniatura (Hakoniwa). Las fases se agruparon en distintos episodios que iban desde la presentación de mecánicas, hasta los desafíos más complicados.
Todo siempre bajo la premisa de encontrar varios diamantes en cada pantalla, así como los Pixel Toad, realmente diminutos y para los cuales debías poner al 100% tu capacidad de observación. Era y sigue siendo un videojuego muy rejugable, con niveles cortos (en torno a 5-10 minutos) que sientan muy bien al carácter portátil de Nintendo Switch. Superar el juego puede llevarte en torno a 8 horas, pero completarlo totalmente cuesta el doble de tiempo.
A destacar
- Buena duración de juego: más de 15 horas para exprimirlo.
- Potente rejugabilidad, gracias a tareas como encontrar a los Pixel Toad.
- Genial diseño jugable, con niveles cortos pero muy satisfactorios.
Nuevos niveles
Inspiración en Super Mario Odyssey
Captain Toad: Treasure Tracker nació a partir de un videojuego de Mario, así que no es extraño que le vaya a devolver la partida, incorporando niveles inspirados en su última aventura: Super Mario Odyssey. Es toda una experiencia ver la ciudad de Nueva Donk representada a modo de diorama y en miniatura, haciendo honor al concepto Hakoniwa en que se apoya el título.
¿Hay más? Estamos pendientes de descubrirlos, aunque si recordáis los lugares de aparición de Captain Toad en el juego del fontanero, puede que tengáis una buena pista de lo que vais a ver. En cualquier caso, un buen añadido. No transforma al título, pero sí que le da una interesante inyección de novedad.
A destacar
- Nuevos niveles, con lo cual se incrementa el tiempo total de juego.
- Inspiración en fases de Super Mario Odyssey, como Nueva Donk.
- Cuidado al trasladar el aspecto visual y artístico original.
Aventuras en cooperativo
Protagonismo para los Joy-Con
Es probablemente la gran novedad de Captain Toad: Treasure Tracker: la posibilidad de compartir la aventura en cooperativo para dos jugadores. Cada jugador sujeta un Joy-Con. Uno maneja el movimiento de Toad y otro puede apuntar y disparar a los enemigos mediante el sensor giroscópico.
En cierta manera, el juego se hace más sencillo mediante la inserción de estas mecánicas, pero no es algo que hayamos lamentado. Más bien, hemos aplaudido la incorporación, ya que se siente fresca y oportuna. En cualquier caso, Captain Toad se disfruta tanto en solitario como en compañía, y esa es la mejor noticia posible.
A destacar
- Añadido de cooperativo para hasta dos jugadores.
- Un usuario controla a Toad y el otro apunta y dispara a los enemigos.
- La aventura se hace más sencilla en compañía, pero no menos interesante.