Yoshinori Kitase ha hablado recientemente de los planes originales para el videojuego de rol.
Tras el regreso de Final Fantasy VII, Final Fantasy IX y Final Fantasy X a sistemas como Nintendo Switch, PS4, Xbox One o PC, muchos pensaron que Final Fantasy VIII era el patito feo de la franquicia. Nada más lejos de la realidad: la firma tenía ambiciosos planes para el software protagonizado por Squall y Rinoa, una auténtica remasterización del clásico de PSX. Según ha explicado en la revista japonesa Famitsu su director, Yoshinori Kitase, los planes del reestreno de Final Fantasy VIII eran similares al de sus homónimos de 32 y 128 bits.
"Al principio, el plan era lanzarlo en las máquinas de generación actual con los mismos gráficos que el original. Sin embargo, el título recientemente celebró su vigésimo aniversario y, como los televisores evolucionaron decidimos que era necesario mejorar la calidad de los personajes", hemos sabido gracias a la traducción de Siliconera, "continuamos su desarrollo hasta que justo antes de completar su desarrollo, de golpe, decidimos trabajar en el perfeccionamiento de los protagonistas, por lo que nos encontramos en la necesidad de efectuar un cambio de fecha para su estreno".
Kitase ha reconocido la labor de Hiroshi Harada (programador de las batallas), Tomohiro Kayano (modelador de personajes) y el propio Tetsuya Nomura (diseñador de los protagonistas) como los principales encargados de traer de vuelta el clásico J-RPG. Destacó el director que "pudimos revivir Final Fantasy VIII con una calidad maravillosa. Los problemas estaban allí, pero al final fue la decisión correcta". Final Fantasy VIII Remastered llegará a PS4, Xbox One, Nintendo Switch y PC en una fecha por determinar en el presente 2019.