El nuevo CEO de la compañía ha hecho un cambio de estrategia de última hora
La relación con las empresas y el mes del Orgullo es complicada. Si bien es difícil poner la línea de cuánto tiene de hacer caja apelando al colectivo LGTB y cuánto es celebración genuina, para muchos es mejor tenerlo que no tenerlo. En juegos como los MMORPG, donde la comunidad es un motor tan importante, esto es aún más evidente.
Es desde 2023 que en Runescape tenía celebración oficial del Orgullo con un evento que duraba todo junio. El juego lleva desde 2001 siendo uno de los MMO más veteranos y con una comunidad fiel detrás. Este 2025, sin embargo, la empresa ha reculado. Todo parece culpa de una persona en específico: Jon Bellamy. El nuevo CEO de la compañía que se instauró este mismo abril y lo tomó como uno de sus primeros mandatos.
Según revela una investigación de Pink News, la decisión ha sido tomada después de fuertes conflictos internos dentro de Jagex, la empresa desarrolladora. La decisión final evidentemente la tenía Bellamy, quien decía que cancelarían cualquier evento que estuviese realizado para centrarse en "lo que los jugadores quieren", incluso aunque eso significase cortar contenido ya realizado.
Resulta que los jugadores tienen otra opinión. En estas semanas, la comunidad de Runescape ha sido muy verbal en posicionarse en contra de Bellamy y el estudio por la decisión. Un jugador los llamaba en X "absolutos cobardes", en Bluesky otro afirmaba que se trata de "un asqueroso y triste resultado de la deformada realidad de las redes sociales", y en Reddit, un popular post en una comunidad de discusión del juego bromeaba agradeciendo a Jagex que hubiese dado validez a las amenazas y el acoso.
La comunidad está celebrando sus propios eventos
Independientemente de que el propio juego los promueva oficialmente o no, los jugadores han decidido celebrar sus propios eventos. Como el Orgullo real, muchos lo utilizan como desfogue y diversión rodeados de usuarios con los que se sienten seguros. Otros lo utilizan como oportunidad de reivindicación, según comenta uno de los participantes, un evento en OSRS (versión Legacy del juego) va ya en su octavo día de protesta.
No son solo los jugadores los que echan en cara la decisión. En Bluesky un viejo trabajador admite sentirse muy enfadado y considerarlo "cobarde y repugnante". Según reporta la investigación de Pink News, a raiz de las quejas de trabajadores preocupados de Jagex, Bellamy organizó una reunión posterior en la que no daba su brazo a torcer y se justificaba afirmando que: "El contenido es controvertido de un modo que antes no lo era".
Estas opiniones convervadoras que llevan con nosotros desde el Gamergate se han exacerbado con la presencia de un gobierno que las justifica. El mandato de Trump está teniendo consecuencias patentes en términos de diversidad e inclusión en el mundo del entretenimiento, con grandes empresas como Disney volviendo a políticas más conservadoras en busca de evitar represalias. A esto se le une que las voces de extrema derecha siguen cobrando cada vez más fuerza en la comunidad gamer, en especial dentro de entornos de redes y creadores de contenido.
Imágenes: AlexUndeath, RenderSoft, Steam
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