Los creadores de Call of Duty en Infinity Ward fundaron un nuevo estudio bajo el amparo financiero de EA.
Los principales responsables de la serie Call of Duty, Vince Zampella y Jason West, abandonaron el año pasado Infinity Ward por discrepancias con Activision, anunciando inmediatamente que formarían un nuevo equipo de desarrollo, Respawn Entertainment, bajo el amparo financiero de Electronic Arts.
Algo que motivó a Activision a demandar a EA por 400 millones de dólares al considerar que habían mantenido negociaciones secretas con ambos creativos cuando aún trabajan en Infinity Ward. Decisión que Electronic Arts recurrió hace un tiempo y que hoy mismo ha desestimado la corte superior de justicia de Los Angeles, que ha considerado que Activision ha presentado las suficientes pruebas como para admitir a trámite su demanda.
Por tanto, el próximo 7 de mayo ambas partes se verán las caras en los tribunales en el que se ha convertido en uno de los culebrones más polémicos de la industria del videojuego. Además, Zampella y West también tendrán que acudir a juicio ya que Activision también los ha demandado por conductas “impropias” que alentaron la insubordinación en Infinity Ward, con el apoyo de Electronic Arts.