Aun así esperan obtener beneficios al final del año fiscal.
Por tercer semestre consecutivo y a pesar del incremento en ventas de 3DS, Nintendo ha vuelto a registrar pérdidas que ascienden a los 22.996 millones de yenes (270 millones de euros). Resultados algo mejores que los obtenidos en el semestre anterior, en el que las pérdidas fueron un 150 % mayores, pero aún lejos de las expectativas de los de Kioto.
Durante estos últimos seis meses (del 1 de abril al 30 de septiembre), Nintendo ha generado unas ventas por valor de 200.994 millones de yenes (unos 1.938 millones de euros), frente a unas pérdidas operativas de unos 280 millones de euros.
Desde Nintendo han destacado que las ventas de 3DS y sus juegos se han incrementado en un 65 % y 134 % respectivamente; datos que sumados a la mejora en la rentabilidad del hardware han logrado reducir las pérdidas de la compañía. Sin embargo, las discretas ventas de Wii y Nintendo DS, los costes de producción asociados a la fabricación de Wii U, y el cambio de divisas que sigue perjudicando al yen, no han permitido a Nintendo salir de esta racha negativa.
Por plataformas, Nintendo 3DS ha logrado vender 5,06 millones de máquinas y 19,03 millones de juegos en estos últimos seis meses del año. Resultados que han permitido a la portátil alcanzar la cifra de 22 millones de consolas vendidas en todo el mundo, con casi 65 millones de juegos en total.
Peores resultados han obtenido Nintendo DS y Wii, que tan solo han logrado vender 0,98 y 1,32 millones de consolas en el último semestre. El total, sin embargo, resulta espectacular ya que Nintendo DS ya ha vendido 152 millones de máquinas en todo el mundo, mientras que Wii se aproxima a los 100 millones (actualmente lleva 97,18 millones).
A nivel de software, la portátil de doble pantalla ha vendido 17,30 millones de juegos en el último semestre (para un total de 917,61 millones); mientras que Wii ha vendido 23,74 millones de juegos (para un total de 842,20 millones).