"Lo que me sorprende es que en 2012 hay juegos como Dishonored o Dragon's Dogma que demuestran el interés por nuevas ideas".
Timo Ullman, director de Yager, ha hablado con el magazín británico EDGE sobre cómo observan el actual estado de la industria del videojuego desde la óptica del estudio.
"Llevar al límite la tecnología sigue siendo uno de nuestros principales principios", reconoció Ullman. "Está en nuestro código genético, pero incluso eso te puede poner en problemas. Cuando desarrollábamos Spec Ops seguíamos nuevas tecnologías y eso detenía nuestro progreso. Pero realmente tratamos de atrapar las emociones de otra gente, y eso es algo que hemos aprendido de Spec Ops también".
"Reescribíamos la historia a menudo, y cada cambio tenía consecuencias dramáticas en todos los niveles. Cuando cambiábamos la historia, el diálogo tenía que alterarse también, y eso significaba que teníamos que alterar los niveles para dar espacio suficiente a los personajes para que pudieran hablar", aseguró.
"Lo que me sorprende es que incluso en 2012 hay juegos como Dishonored o Dragon's Dogma que demuestran el interés por nuevas ideas", continuó. "Nunca hemos tenido tantas plataformas ni más modelos de negocio, así que es un buen momento para una nueva IP. Después de siete años de ciclo de consolas, la gente está esperando algo nuevo (jugadores y distribuidores de hecho), y eso encaja bien".