La transición al modelo de negocio free-to-play ha sido más costosa de lo que imaginaban.
El cofundador de Crytek, Avni Yerli, ha admitido que la reputación del estudio se ha visto seriamente dañada durante los últimos meses a raíz de la delicada situación financiera que atraviesan, y que entre otras cosas ha llevado al estudio a vender los derechos sobre la licencia Homefront.
"La transición para convertiros en una compañía online ha llevado mucho más tiempo del que habíamos imaginado. Y esta ha sido la principal causa de nuestros problemas", asegura.
Tras las últimas acciones llevadas a cabo por el estudio, continúa, "estamos preparados para seguir adelante con nuestros planes de negocio para 2014 y 2015". Además, insiste, aunque sabe que toda esta situación "ha dañado nuestra reputación, Crytek debe centrarse en su principal cometido, que es hacer juegos de alta calidad. Y cuando ofrezcamos esos juegos esperamos volver a la senda correcta, y la gente verá que Crytek está donde debe estar".