Quienes cumplan 18 años en 2022 podrán dedicar parte de la subvención a juegos y suscripciones.
El Consejo de Ministros aprobó ayer el Bono Cultural Joven, un programas de ayudas puesto en marcha desde el Ministerio de Cultura y Deporte que permitirá a los jóvenes que cumplan 18 años este 2022 disponer de hasta de 400 euros para la adquisición y el disfrute de productos, servicios y actividades culturales, y sí, eso incluye poder invertir una parte de esa cantidad en videojuegos, tanto en caja como en digital.
La iniciativa busca revitalizar y dinamizar el sector cultural en España, reduciendo el impacto negativo causado por la pandemia de la Covid-19, así como fomentar la accesibilidad universal y diversificada a la cultura, promoviendo entre los jóvenes una fidelización que genere el hábito de consumo de productos culturales. Se calcula que cerca de 500.000 personas podrán beneficiarse del Bono Cultural Joven, y para su aplicación el Gobierno ha previsto una partida de 210 millones de euros.
¿Qué incluye el Bono Cultural Joven
El decreto aprobado por el Gobierno establece que el gasto se distribuya y diversifique entre tres sectores distintos, con importes máximos por cada uno:
- Un máximo de 200 euros a destinar en artes en vivo patrimonio cultural y artes audiovisuales: entradas y abonos para artes escénicas, música en directo, cine, museos, bibliotecas, exposiciones y festivales escénicos, literarios, musicales o audiovisuales.
- Un máximo de 100 euros para adquisiciones de productos culturales en soporte físico: libros; revistas, prensa, u otras publicaciones periódicas; videojuegos, partituras musicales, discos, CD, o películas en DVD o Blu-ray.
- Un máximo de 100 euros para consumo digital o en línea: suscripciones y alquileres a plataformas musicales, de lectura o audiolectura, o audiovisuales, compra de audiolibros, compra de ebooks, suscripción para descarga de archivos multimedia (los conocidos como podcasts), suscripciones a videojuegos en línea —entendemos que Xbox Game Pass y PS Plus incluidos—, suscripciones digitales a prensa, revistas u otras publicaciones periódicas. Dichas suscripciones estarán limitadas a un máximo de cuatro meses.
De esta forma, los aficionados del sector podrán dedicar parte del bono a la compra de videojuegos en tienda, así como a unirse a servicios de suscripción.
No será subvencionable la adquisición de productos de papelería; libros de texto curriculares, ya sean impresos o digitales; equipos, software, hardware y consumibles de informática y electrónica; material artístico; instrumentos musicales; espectáculos deportivos y taurinos; moda y gastronomía. El bono tampoco cubrirá la adquisición de productos que hayan sido calificados como X o pornográficos.
La gestión del programa se realizará a través de una plataforma tecnológica específica de las entidades colaboradoras que garantizará la accesibilidad universal. De momento no hay más detalles, aunque es de esperar que pronto sepamos más.
En la elaboración del texto, el Gobierno ha querido fijarse en la experiencia de otros países del entorno europeo como Francia o Italia, que fijan la edad de sus beneficiarios en los 18 años, al considerar que la mayoría de edad implica, además de la asunción de unos deberes y derechos, la posibilidad de inaugurar una autonomía en lo que respecta a sus decisiones en muchos ámbitos, también en el ámbito cultural.