La compra de Fox por parte de Disney no debería afectar a los derechos de SEGA sobre Alien.
Durante la jornada de ayer se conocía la quizá noticia más importante del mundo del entretenimiento en los últimos años: la adquisición de 21st Century Fox por Disney cifrada en 52.400 millones de dólares más la deuda de la empresa. Este acuerdo supone un auténtico bombazo cinematográfico, donde la compañía del ratón Mickey pasará a tener los derechos sobre franquicias como Avatar, Jungla de Cristal, Los Simpsons, Alien y X-Men. Esto último propicia el reencuentro de los mutantes con el resto del universo Marvel en la gran pantalla, ¿se verá también en Marvel vs. Capcom: Infinite?
Los fans de momento ya sueñan con ello, y en foros y redes sociales no son pocos quienes andan pidiendo una lucha encarnizada entre Lobezno (Wolverine) y Ryu en la propuesta de lucha de Capcom, así como realizando listas de qué personajes deberían incluirse en próximas actualizaciones de la producción. Obviamente ni Marvel ni la editora japonesa se han pronunciado de momento sobre tal posibilidad, teniendo en cuenta la cercanía de la compra, y hay que recordar que entre los argumentos dados en su momento para su no adición estuvo el ser personajes "quizás no recordados por los fans".
En el terreno de los videojuegos más allá de este deseo de los seguidores no hay excesivas implicaciones para la industria. No obstante Disney ha apostado por prestar sus licencias a grandes marcas del sector como EA (Star Wars), Los Vengadores (Square Enix), Spider-Man (Sony). Fox, por su parte, selló en 2006 un acuerdo con SEGA para permitir a ésta el desarrollo de videojuegos basados en el universo Alien, si bien se quedó con la franquicia Aliens vs. Predator. Mientras otros productos como Avatar o El planeta de los simios no han sido protagonistas de adaptaciones de gran renombre recientemente.