Los jugadores verán cómo afecta a su entorno y vivirán sus últimas reflexiones.
Dontnod Entertainment continúa el trabajo explicativo en torno a su ambiciosa propuesta de acción y aventura emplazada en una Londres de comienzo del siglo pasado asolada por la gripe española. Como es sabido, Vampyr cuenta como protagonista a un vampiro capaz de alimentarse de los habitantes de la ciudad. Pero, ¿a qué precio? Sus responsables lo comentan más a fondo en un diario de desarrollo.
"En Vampyr no ganas experiencia al matar enemigos, sino al sacrificar a los ciudadanos y beber su sangre. Pero esto tiene implicaciones. Se te recompensará con mayor poder pero cuando arrebatas una vida, esta afectará a la historia y su entorno. Cada vez que lo hagas, oirás los pensamientos de la persona, puede que varios si has matados también sus conocidos. No sólo recibes experiencia como recompensa, también te quedas con las reflexiones de un moribundo", expone Stephane Beauverger, director narrativo.
Así, los usuarios deben vivir con las consecuencias de sus actos tanto dentro de sí como viendo cómo es el luto de los amigos y familiares de la víctima. Por otra parte el videojuego, a lanzar esta próxima primavera, busca dotar a cada uno de estos habitantes de su propia identidad para hacer de todo esta ciudad y su gente algo más real, con representación de todas las capas sociales.