El uso de trampas divide cada vez más a los usuarios del juego de BlueHole.
El conocido jugador de PUBG Michael "Shroud" Grzesier ha protagonizado recientemente una polémica debido a la emisión de una de sus partidas. En ella Shroud jugaba junto a un hacker, lo que generó un debate sobre si jugadores de semejante nivel deber confraternizar con usuarios tramposos, tan mal vistos por un amplio segmento de los aficionados.
El video de la jugada muestra al hacker utilizando diferentes recursos ilegales que facilitan enormemente sus acciones en el juego. Este jugador llega a admitir incluso que vende estos trucos para ganarse la vida antes de que le Shroud callara rápidamente. El vídeo original ha sido eliminado del canal en Twitch de Shroud, pero los aficionados han logrado realizar diferentes capturas del mismo.
Tal como indica Kotaku, hasta el momento los responsables del juego han mantenido una política firme a la hora de no tolerar este tipo de comportamientos, aunque fueran protagonizados por usuarios tan famosos como como Dr. Disrespect. El propio Brendan "PlayerUnknown" Greene afirmó: "En mi casa, o sigues las reglas o GTFO". El uso de trampas ha sido duramente penalizado y perseguido por las normas del juego, suponiendo incluso penas de prisión para los programadores, pero sigue siendo un tema muy candente entre los fans de PUBG.
Diferentes foros dedicados, como los de Reddit, están viviendo un intenso debate entre los jugadores que defienden que PlayerUnknown's Battlegrounds ha de mantenerse en las mejores condiciones para todos los aficionados, y aquellos usuarios que defienden que dado el estado actual del juego, y que la desarrolladora BlueHole no logra detener a los tramposos, los usuarios tampoco tienen la obligación de obedecer las reglas impuestas por la misma.