Las desarrolladoras sorprenden a los aficionados con un catálogo salpicado de títulos muy alejados de la imagen familiar de Nintendo.
Nintendo siempre ha sido una desarrolladora con fuerte personalidad, que ha sabido encontrar en sus simpáticos personajes y sus mecánicas divertidas e inclusivas, una amigable identidad inconfundible de desarrollo. Un estilo que durante varias décadas ha mantenido a esta empresa como una pieza clave en la industria.
A lo largo de los años, la popularidad de sus plataformas ha hecho que todo tipo de desarrolladoras vieran en ellas el mejor escaparate para sus juegos, además de una evidente y rentable fuente de ingresos. Esto ha hecho que Nintendo haya pasado por épocas más "aperturistas" que otras, receptiva a títulos muy alejados de su propio estilo. Años en los que juegos como Super Mario World o Donkey Kong Country convivieron en las estanterías de la tiendas con títulos como Mortal Kombat, aunque fuera con una versión tímidamente censurada.
El éxito de su nueva consola, Nintendo Switch, ha logrado que multitud de desarrolladoras se interesen en esta consola híbrida, una máquina en la que Nintendo está completamente volcada. Y que además cuenta con una sorprendente potencia técnica capaz de ejecutar con un aspecto magnífico, incluso en su modo portátil, juegos de última generación como Doom.
Este interés de algunas compañías y la potencia de la máquina ha hecho que encontremos en el catálogo de Switch una variada lista de juegos sorprendentes, tanto por requisitos técnicos como por temática. Seleccionamos 6 juegos que nunca pensamos ver en Nintendo Switch.
Assassin's Creed Odyssey Cloud Version - A la emoción de ver Assassin's Creed funcionando en una consola de Nintendo hay que sumar el interés de que se trate de la nueva entrega de la serie. Que además pueda jugarse gracias a la nube es la guinda de este pastel. Lástima que de momento solo puedan disfrutarlo los nipones.
Doom - La llegada de este juego a Switch no solo sorprende por su violenta propuesta marciana, llena de demonios y charcos de sangre, si no por exprimir las prestaciones de esta consola con un "port" que, aunque no resulta tan espectacular como en otras plataformas, no deja de ser impresionante.
Hellblade: Senua's Sacrifice - El que fuera uno de los juegos más sorprendentes e interesantes de 2017 se anunció recientemente para Switch. Una llegada inesperada, pero bien recibida, para una oscura aventura celta que se adentra en los efectos de la psicosis de una joven traumatizada por la masacre de su clan.
Mortal Kombat 11 - La próxima cita con el torneo de artes marciales más sangriento también tendrá una versión para Switch que llegará un mes tarde que al resto de plataformas, pero con la misma contundencia a la que la saga nos tiene acostumbrados, tras varios años de ausencia en las consolas de Nintendo.
The Elder Scrolls V: Skyrim - Special Edition - Ver una nueva versión de Skyrim ya no es algo sorprendente, pero su llegada a Switch supone poder disfrutar de este clásico de Bethesda en una portátil, algo que muchos aficionados agradecen y que no deja de ser ser todo un hito técnico, dado que fue uno de los mayores juegos de la anterior generación.
Wolfenstein 2: The New Colossus - La última gran batalla de Blazkowicz no es precisamente un título comedido. "Terror Billy" ha protagonizado algunas de las escenas más brutales que han dejado los videojuegos durante los últimos años, de ahí que resulte extraño guardar el cartucho de este juego junto al de Pokémon Let's Go.
