Los autores de Alan Wake trabajan para que el original sea el mejor videojuego posible.
Muchas cosas han cambiado en Remedy Entertainment a la hora de afrontar el desarrollo de Control, su prometedora nueva aventura de acción, con el fin de "tener más control" sobre la compañía y su futuro. "Realmente, quiero decir, el nombre del juego está motivado por esta cuestión y busca darnos, como compañía, la oportunidad de decidir qué pasará cuando el juego salga a la venta", ha declarado el director de comunicación del estudio, Thomas Puha.
Recientemente en 3DJuegos tuvimos la oportunidad de charlar con Remedy Entertainment y ya entonces profundizaron en esta cuestión, recordando los años de duro trabajo que hasta la fecha habían dedicado a crear cada uno de sus videojuegos. "Quantum Break se hizo en seis años y puedes terminarlo en dos tardes, Control es lo opuesto", llegaron a afirmar.
Esto no significa que no hayan puesto mimo en el diseño de este nuevo universo de ficción. "Siempre tratamos de construir nuevas franquicias", y Control no es una excepción. "Invertimos todo este tiempo creando el mundo y lo que le rodea, y cuando haces todo esto para un único videojuego, realmente es mucho trabajo. Como no tenemos nada en contra de las secuelas, definitivamente Control es algo en lo que queremos volver a trabajar en el futuro", añade Puha.
Antes de ello, claro, el equipo tras la serie Max Payne quiere lograr que el "primer videojuego sea tan bueno como sea posible" para crear una base que sustente el futuro de la franquicia. "Así que estamos centrados en ello". Remedy sabe que en el pasado ha cometido errores, "pero al menos ahora somos nosotros los que los cometemos, y estamos esforzándonos para garantizar que podemos hacer mucho más por el universo Control. Esa es nuestra esperanza, como también lo fue con Alan Wake". Precisamente, el equipo de desarrollo ha vuelto a recordar que en su día trabajó en Alan Wake 2 pero simplemente no funcionó.