Un grupo de jugadores organiza peleas, cacerías de humanos e incluso certámenes de monólogos sobre el canibalismo.
Hay un nuevo peligro en Fallout 76 que puede convertir el juego en una pesadilla: un grupo organizado de aficionados dedicados a dar caza y comerse a otros jugadores. Aunque el canibalismo no es algo nuevo dentro de los juegos de la saga, podría ser la primera vez en la que se genera una cultura dentro del juego que gira entorno a esta práctica, de una manera casi ritual.
En una reciente entrevista, algunos jugadores confiesan cómo lograron superar sus barreras morales en una práctica que comienza a cumplir una función que ya no es la mera supervivencia. Lo que en un primer momento podría suponer una simple cuestión de comer para sobrevivir ha terminado siendo una mecánica de juego más para un grupo concreto de aficionados. EATT (Organización de los probadores de sabor de los Apalaches) es una asociación de jugadores que ha normalizado el comerse a otros compañeros de juego siempre que lo consideren oportuno.
EATT, inspirado en la familia White Glove Society de Fallout: New Vegas, ha ido creciendo en torno a la idea de que consumir carne humana es un ritual de elevación, ya que supone consumir la carne de aquella especie supuestamente en la cima de la cadena alimentaria. Durante un año este grupo ha ido sumando miembros que ya no solo practican el canibalismo de manera ritual, sino que organizan peleas a muerte, cacerías de humanos e incluso sesiones de monólogos humorísticos sobre el canibalismo. Aunque no es imprescindible practicar el canibalismo para formar parte de este grupo, resulta llamativo ver cómo estos jugadores se integran en EATT, y hasta qué punto confían en el comportamiento de sus camaradas, que pueden comerse a su personaje con la simple pulsación de un botón.
También resulta curioso cómo los miembros de EATT han tomado un tabú prácticamente reservado a personajes no jugadores y villanos de los juegos, y han hecho de él su propio papel, creando de manera espontánea todo un núcleo social dentro del título de Bethesda. Si bien su canibalismo digital no deja de ser parte del papel ficticio que todos los jugadores asumen en este juego de rol, no son pocos los aficionados que ven en EATT un elemento tóxico para el ecosistema del juego, y que no dudan en atacar a sus miembros.
Desde el lanzamiento de este juego hemos visto cómo algunos jugadores ofrecían a la comunidad de Fallout 76 diferentes retos, o simple diversión como una discoteca para vacas mutantes, pero EATT parece moverse a otro nivel, siendo uno de los grupos mejor organizados de la comunidad y ofreciendo una auténtica experiencia límite para los amantes del rol. Y lo hace además siguiendo el planteamiento postapocalíptico del juego, convirti´ndose uno de los más fieles a la idea original de Bethesda de llevar a la humanidad al límite.