Metal Gear Solid 5
PS4Metal Gear Solid levantó los cimientos sobre los que se erige el género de la infiltración. Ahora Kojima redefine el género que él mismo auspició metiéndolo con éxito dentro de una estructura de mundo abierto.
Metal Gear Solid levantó los cimientos sobre los que se erige el género de la infiltración. Ahora Kojima redefine el género que él mismo auspició metiéndolo con éxito dentro de una estructura de mundo abierto.
Elden Ring es uno de esos escasos juegos que lideran la industria ejemplificando con su diseño tanto de mundo abierto como de mazmorras trabajadas, un contenido incesante que podría llenar varios juegos y DLCs y una duración de aproximadamente 100 horas con mucha intensidad en cada una de ellas.
Red Dead Redemption 2 es un videojuego absolutamente asombroso en todos los sentidos. Hay pocos reproches que hacerle a una aventura que nos deja un héroe para el recuerdo, Arthur Morgan, y uno de los grupos mejor escritos y más apasionantes de descubrir: la banda de Dutch van der Linde.
Miyazaki demuestra que tiene un estilo único a la hora de crear sus mundos. Bloodborne apuesta por la renovación de la saga Souls, con la que lo único que no comparte es el nombre. Si bien ya no cala tan hondo la novedad por tener tres juegos a nuestras espaldas, consigue la excelencia a base de un sistema de combate único, muy visceral y más eficaz que lo visto anteriormente.
The Last of Us llega a PS4 con el pack más completo, incluyendo campaña y contenidos descargables, dentro de una remasterización que brilla por pulir las pequeñas imperfecciones técnicas del original, ofreciéndonos alta resolución a 1080p y la fluidez de los 60 frames por segundo.
Cada nueva expansión de Final Fantasy XIV Online nos ha hecho apreciar más y más la enorme calidad que atesora este MMORPG de Square Enix, que ahora con Shadowbringers alcanza un grado de excelencia supremo. Su portentosa historia, sumado a lo épico de su acción y el fantástico diseño de misiones y mazmorras lo convierten en la mejor aventura de rol online de la actualidad.
Sin reinventar la rueda ni ofrecer unas novedades monstruosas, Fallout 4 se dedica a mejorar y agrandar lo que vimos en su ya de por sí estupendo predecesor. El regreso al mundo post-apocalíptico que ofrece es una verdadera gozada, y la incorporación de los asentamientos y de los talleres hace de la profundidad tradicional de la serie algo todavía más inabarcable.
Uncharted 4 es una despedida a la altura de lo que un personaje tan icónico como Nathan Drake requería. Pocos peros se le pueden poner a una obra de sus dimensiones, cargada de contenidos en modo campaña y multijugador, y acreedora de una historia que nos mantiene pegados a la pantalla.
Una obra maestra. Sin más. El equipo de Matt Make Games ha dado vida a una aventura de plataformas 2D simplemente maravillosa. Su trepidante acción, su increíble diseño de niveles, ¡lo adictivo que resulta! son solo una pequeña parte de Celeste. Con una historia muy personal, que va directa al corazón, este videojuego de estilo retro se va a convertir, sin dudarlo, en uno de los grandes de 2018. ¡Un imprescindible!
Esta nueva entrega de la franquicia NBA 2K nos ha dejado sendas novedades muy llamativas, como la nueva modalidad El Barrio que seguramente será imitada por otros títulos deportivos en los próximos años. Un videojuego todavía más completo, dinámico, realista y atractivo que el que disfrutamos hace justo un año.
Santa Monica ha conseguido modernizar, expandir y rescatar todo lo que hizo grande a un God of War, mezclando un gran combate, más técnico y refinado, con una sensibilidad narrativa que enriquece la saga. El viaje de Kratos y Atreus por la mitología nórdica es uno lleno de sorpresas, zonas amplias, abiertas e interconectadas, secretos, misiones secundarias y muchas actividades a descubrir.
Una vez más 2K Sports nos deleita con un juego de basket sobresaliente en todos sus apartados. Al tratarse de una saga anual es complicado encontrar cambios y mejoras drásticos (aunque alguna novedad menor sí que presenta), pero es cierto que su fórmula básica se ha pulido más todavía, se han limado asperezas jugables (como todo lo relacionado con las microtransacciones) y técnicamente es un verdadero espectáculo.
Dark Souls III es el último esfuerzo de una fórmula refinada hasta el máximo posible. Uno de los juegos más trabajados e importantes de lo que va de año, que marcará un antes y un después en la historia de un tipo de videojuego. Si eres amante de la saga, no hace falta decir más. FromSoftware ha vuelto a crear una obra para el recuerdo, que no olvidaremos ni siendo huecos.
Persona 5 nos ofrece una de las experiencias del género más únicas que hemos visto hasta la fecha. Su mezcla de combates por turnos profundos, donde se han pulido y ampliado las mecánicas gratamente con la gestión de los días del curso escolar se unen a una historia que aborda la psique humana como pocos juegos se han atrevido.
Absorbente, hermoso y, sobre todo, muy inteligente. Con pocas palabras y mucha habilidad, el nuevo juego del creador de Braid nos explica de una forma muy sencilla y accesibles sus mecánicas jugables, y los eleva hasta extremos endiablados de dificultad sin frustrarnos.
El aspecto gráfico, la dirección artística, la banda sonora de Martin Stig Andersen… Todo funciona como un reloj suizo para hacer de Inside un videojuego que entra por los sentidos. No obstante, va un paso más allá, y no es sólo una cosa bonita, sino que la nueva obra de los creadores de Limbo es también una maravilla jugable.
Persona 5 Royal se sienta en su trono como uno de los mejores juegos de esta generación. Una aventura ambiciosa que va mucho más allá de lo esperado en cualquiera de sus aspectos, con innumerables mejoras sobre una base que ya era sobresaliente, a las que se le suman una montaña de añadidos, tanto en historia como en mecánicas, para elevar aún más su propuesta.
Devil May Cry 5 es el videojuego que la saga necesitaba para volver a la actualidad tras una década de ausencia. Capcom regala a los nostálgicos de su glorioso pasado la mejor noticia imaginable: vuelven a estar en plena forma. Lo demuestran con uno de los Hack and Slash mejores, más complejos y más espectaculares de esta generación.
Blood and Wine es una expansión de ensueño. No sólo continúa la fórmula que lo impulsó a convertirse en uno de los juegos del año 2015, sino que la lleva más allá, expandiendo sus características y desarrollando un compendio de historias y de personajes que calan hondo, como los ya conocidos. Así merece la pena que los juegos se continúen más allá del disco.
Hay tantas cosas geniales por descubrir, tantas buenas historias que vivir en Thimbleweed Park, que ningún aficionado a las aventuras gráficas debería perderse este videojuego. Es una obra humilde, pequeña, que sin embargo está llamada a hacer historia.
Sin novedades más allá de las pertinentes mejoras gráficas, Journey en PlayStation 4 continúa siendo la gran obra maestra que nos cautivó en el año 2012. Hablamos de un sorprendente viaje a los confines de la imaginación, un periplo breve pero de una intensidad audiovisual irrepetible. Si no lo disfrutaste en PS3, ni lo dudes. Pocos videojuegos te emocionarán del modo en el que lo hace Journey.
Black Flag es una inmejorable aventura de piratas, que no pierde la esencia de la serie de Ubisoft pero que logra aportar suficientes novedades como para seguir siendo fresco también en la próxima generación.
Rockstar demuestra otra vez que no hace las cosas como los demás con una versión next-gen de su genial GTA V.
Sekiro: Shadows Die Twice es otra muestra más de la excelencia de FromSoftware, que huye de su clásica mecánica del hit and run para colocarte frente al enemigo sin posibilidad de huida. Ante la defensa de Dark y Demon's Souls, y la evasión de Bloodborne, Sekiro combina la defensa y el ataque en un baile de espadas como pocas o ninguna vez se ha visto en un videojuego.
The Witcher III no es perfecto, pero es uno de los RPGs más fastuosos y recomendables de los últimos tiempos. El ansiado salto al mundo abierto ha sentado muy bien a la franquicia y los problemas tienen que ver con un control impreciso, un combate algo plano o problemas técnicos ingentes...