Phil Spencer: "La representación no es sólo buen sentido común, es buen sentido profesional".
El jefe de la división Xbox de Microsoft, Phil Spencer, aprovechó la celebración del evento DICE para hablar con numerosos estudios y editores sobre la importancia de purgar la industria del videojuego de toxicidad y discriminación, tanto en el ambiente de trabajo como en las propias obras.
Comenzó reconociendo errores de su propia empresa públicamente, como cuando Microsoft llevó mujeres ligeras de ropa como bailarinas a la GDC 2016 o el discreto recibimiento de Xbox One en sus primeros años. "Necesitábamos un reinicio", recoge el portal Polygon. "La moral estaba baja. Seguíamos perdiéndonos las principales tendencias". Según añadió Spencer, la compañía se tomó un respiro en todos los aspectos para "replantear y reconstruir nuestra filosofía".
El directivo enfocó este replanteamiento en un entorno más abierto, amable e inclusivo. "Debemos ser aprendices activos, educarnos a nosotros mismos, leer y entender la mentalidad de todo el mundo", continuaba. "No nos quedamos con ningún socio o empleado que ofendiera a los demás. Comunicamos que nos posicionábamos a favor de la inclusividad. Me prometí hacerlo mejor".
Su discurso pasaba por la recomendación de mejorar las costumbres de todos los estudios, y sus ambientes de trabajo. "La conducta tóxica no sólo afecta a una persona, daña a toda la industria. Debemos preguntarnos, ‘¿estoy creando mundos en los que todos podamos emocionarnos y conseguir más?’ La cultura es la herramienta que nos permite alcanzar el verdadero potencial y el poder de los videojuegos. Ahora es el momento de dar con la tecla. Es nuestra responsabilidad el hacer juegos para todos. La representación no es sólo buen sentido común, es buen sentido de negocio".