La democratización del desarrollo de videojuegos y las políticas de la tienda de Valve tienen un lado oscuro muy desagradable
Las historias de éxito en Steam las habéis leído mil veces en prensa y las habéis visto otras tantas en vídeos. A todos nos gustan esas narraciones al estilo cenicienta en las que un juego aparece de la nada y consigue un éxito rotundo pese a desafiar la lógica de la industria del videojuego. Sin embargo, esa no es la realidad más habitual del desarrollo independiente ni de la tienda de Valve. Los datos dicen que el 40% de todos los juegos publicados en lo que va de 2025 no ha conseguido ni siquiera recuperar los 100 dólares que pagó para que la compañía de Gabe Newell les permitiese lanzar en su tienda. Aunque la frase es un poco tramposa, también es estadísticamente correcta: lo normal es que con lo que ganas desarrollando un 'indie' no te puedas comprar un triple a.
Steam también es un cementerio de juegos
La información la hemos conseguido gracias a Gamalytic, una web de análisis de mercado que lleva años estudiando la tienda de Valve y que, aunque con cierto margen de error, ofrece estimaciones que reflejan fielmente la realidad. Según sus datos, de los más de 13.200 juegos lanzados en lo que va de año, ha habido 8.400 que no han conseguido obtener mil dólares en ingresos. Eso significa que dos de cada tres publicaciones fracasan estrepitosamente. La cifra, además, ha ido aumentando con el paso del tiempo. En 2015 solo el 13% de los juegos tenía una facturación tan baja, en 2020 eran el 55% y ahora la cifra ha subido hasta los 66 puntos.
Los datos tienen cierto sentido en cuanto aplicamos matemáticas sencillas. Hace diez años se publicaron 2.389 juegos, hace cinco 8.607 y este vamos rumbo a superar los 15.000. De cumplirse las previsiones, solo 150 serán capaces de ingresar 50.000 dólares o más. En los escenarios más pesimistas, estar entre los más exitosos de Steam no justifica siquiera un nuevo desarrollo. Incluso suponiendo una sola persona trabajando durante un solo año, el salario bruto que se queda tras descontar la inversión en crear el juego y unas tasas de Steam que son más elevadas de lo que parece no es particularmente impresionante.
Es cierto que el número de usuarios de Steam ha aumentado de forma considerable a lo largo de los últimos años y, de hecho, la plataforma batió su récord de concurrentes hace menos de dos semanas. Esto genera cierto desahogo en los desarrolladores y hace que el porcentaje de grandes fracasos sea “solo” del 66%. Sin embargo, que el número de jugadores se haya duplicado en cinco años no significa que el de lanzamientos también pueda hacerlo. Lo que hemos visto son récords cada vez más bestiales para títulos lanzados recientemente mientras que aquellos que estaban olvidados seguían en el olvido. Según SteamDB, 18 de los 20 juegos con mayor pico histórico de usuarios se lanzaron a partir de 2020
Entrando a los motivos de que exista una tasa de fracaso tan elevada, una de las causas más evidentes es que Valve apenas modera el contenido publicado en Steam. La compañía solía ser selectiva con lo que permitía lanzar en su plataforma, pero ahora las restricciones se limitan a asuntos como la prohibición de juegos basados en tecnologías blockchain o aquellos que incluyen publicidad forzada. "Si eres un jugador, no deberíamos decidir qué tipo de contenido puedes comprar o no. Si eres un desarrollador, no deberíamos elegir qué tipo de contenido te está permitido crear. Esas decisiones deberían ser tuyas. Nuestro rol debe ser ofrecer sistemas y herramientas que apoyen esas elecciones que tomas por ti mismo, echándote una mano para que te sientas cómodo cuando lo haces", explicaba Valve en 2018.
Esta filosofía es romántica y ha permitido que lleguen lanzamientos que de otro modo quizá nunca hubieran tenido lugar, pero se ha convertido en un problema. La tienda de Valve se ha llenado de juegos que no interesan a nadie y títulos creados con el mínimo esfuerzo para ver si dan el pelotazo. Estos, además, compiten en visibilidad con obras modestas de desarrolladores que hacen un intento genuino por hacerse un hueco. Nadie va a bajar a la posición 600 de la lista de roguelikes —en lo que va de año se han publicado 693, en serio, hay que parar— para ver si descubre una joya oculta. No tener una buena estrategia de marketing y no optimizar para el algoritmo es una sentencia de muerte.
En los últimos cinco años se han publicado 74.595 juegos en Steam, lo que resulta en una media de 35 nuevos títulos al día. Es una cantidad inabarcable y, aunque el algoritmo muchas veces hace un buen trabajo visibilizando joyas ocultas, es fácil entender cómo un desarrollador novato puede abandonar sus esfuerzos de crear un juego de forma independiente dada la situación. Valve hace muchas cosas bien, pero tiene como asignatura pendiente refinar su tienda. Es cierto que no existe una solución fácil, pero la falta de control ha dado lugar a problemas de seguridad muy serios y a que iniciativas como Steam Next Fest sean mucho más difíciles de disfrutar.
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