La nueva plataforma está en beta cerrada para iOS
Hay un chiste recurrente que muchos usuarios de Tiktok han leído, especialmente durante los comienzos de la popularidad de la plataforma allá por 2018: "esto habría hecho números en Vine". Para muchos, el éxito de Tiktok capitalizaba en el funesto destino de la que había sido la plataforma favorita de internet de videos verticales, cuyo cierre se anunció en 2016.
Los sueños de todos aquellos que juraban y perjuraban que no había nada mejor que Vine se han cumplido, porque Jack Dorsey ha anunciado su vuelta... más o menos. El fundador de Twitter ya quiso devolver su plataforma a su vieja gloria con Blueskay el año pasado, y ahora también quiere hacer lo mismo con Vine en un reboot que llamará diVine.
Volviendo a 2013
diVine no es exactamente Vine, pero desde luego es lo más cercano que puede existir. En su lanzamiento (actualmente está en fase de beta cerrada) contará con más de 150.000 vídeos de archivo pertenecientes a 60.000 de los creadores más populares que fueron guardados antes del cierre. Además de las altas posibilidades de que tu Vine favorito esté ahí, la intención es continuar donde lo dejaron, permitiendo a usuarios crear cuentas y volver a subir loops de hasta seis segundos.
"Creo que hay nostalgia por los comienzos de la Web 2.0, por la era del blog, la que nos dio el podcasting, en la que construías comunidades en vez de solamente jugar para el algoritmo". Decía Rabble, uno de sus ingenieros, en una entrevista para TechCrunch. La apuesta por volver a aquella era es total, con feeds solo poblados de creadores que seguimos y un firme rechazo al contenido generado por IA, que será marcado y eliminado de la plataforma.
El movimiento llega en un momento en el que TikTok sigue reclamando el trono de las redes sociales, siendo la app más descargada el pasado 2024 y habiendo en los últimos años reconfigurado por completo el panorama de las redes. Hoy, la gran mayoría de plataformas han querido imitar su feed vertical, y ha inspirado otros fenómenos como el de los microdramas.
¿Pero puede Vine volver a su vieja gloria? Es una apuesta complicada, y está por ver cuáles son las expectativas de sus fundadores con ella. A pesar de su calado cultural Vine tuvo una trayectoria comercial complicada, no sabiendo cómo monetizarse ni cómo compensar a los creadores, que acabaron migrando a apps de la competencia como Instagram. Llegó un punto en el que la app en sí misma no era especialmente popular, con la mayoría de usuarios prefiriendo ver el contenido en otros lugares como en recopilaciones de Youtube.
Imágenes: Vine, diVine
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