Eso sí, la consola realizaría una comprobación periódica en línea para verificar la autenticidad del disco y la propiedad del juego.
La cuestión de la segunda mano sigue siendo uno de los asuntos más candentes de la nueva Xbox One, y curiosamente Microsoft sigue sin aclarar este aspecto a pesar de la preocupación existente entre la comunidad de jugadores.
Fuentes familiares con la materia, han informado al medio norteamericano Polygon que Xbox One no requiere de un pago para disfrutar de títulos de segunda mano como habían asegurado las últimas informaciones. En su lugar, la consola realizaría una comprobación periódica en línea para verificar la autenticidad del disco y la propiedad del juego.
Siempre según estas fuentes, las ventas de juegos de segunda mano continuarían en la nueva consola. La propiedad de un juego quedará determinada por un código de encriptación en el disco. Una vez que el título haya sido vendido y activado en otra consola, el acceso al contenido instalado en la consola del anterior propietario se revocaría, y se transferiría al nuevo dueño.
En las últimas horas, Major Nelson de Microsoft, ha aclarado que "Xbox One está diseñada para apoyar el comercio y la venta de segunda mano. Las informaciones aparecidas relativas a nuestras políticas de venta y reventa de juegos no son precisas y están incompletas. Ofreceremos más información en un futuro cercano".
Recientes informaciones aseguraban que al vender un juego en una tienda, ésta debería conectarse a la red de Microsoft para avisar de dicha venta y hacer la transferencia al nuevo usuario. Este proceso podría suponer al usuario una media de 40 euros, con una cantidad que se repartiría entre Microsoft, la desarrolladora y la propia tienda.