El 50% de los hombres se quedará calvo antes de los 50 años
Un grupo organizado en Discord está buscando la cura para frenarlo a base de tokens
Según las estadísticas alrededor del 50% de los hombres presentan algún grado de alopecia que derivará en calvicie hacia los 50 años de edad. En edades más tempranas, hacia unos 25 años, el porcentaje decrece pero se mantiene en alrededor de un 25% y, en el de las mujeres de ambos grupos, se sitúa en cerca de un 30%. Sólo en 2024, el mercado farmacéutico de tratamientos de alopecia, crecimiento del pelo y transplantes se situó en 9.480 millones de dólares pero, a pesar de las cifras, hay cierto sector de la población que considera que no se está haciendo lo suficiente para frenar el problema.
Creen que, por el mero hecho de no ser una enfermedad de riesgo, los esfuerzos del mundo de la medicina no son lo suficientemente grandes y que, si quieren frenar la caída de su cabello, deben buscar la solución por su cuenta. Su respuesta ha sido HairDAO, una organización coordinada a través de Discord en la que se unen investigadores, pacientes y biohackers en busca de una cura clandestina para la calvicie.
Buscando la cura contra la calvicie a través de Discord
Creada por Andrew Verbinnen y Andrew Bakst, dos acaudalados fundadores de proyectos de inversión cripto que se unieron para dar forma a lo que se ha dado a conocer como una DeSci, una organización de ciencia descentralizada. La idea detrás de estos sistemas pasa por saltarse la dependencia de revistas científicas, empresas farmacéuticas y gobiernos reguladores para dar forma a una suerte de cooperativa científica en la que todos los miembros participen aportando su tiempo, su dinero y sus conocimientos en busca de un objetivo común.
En el caso de HairDAO, ese objetivo es encontrar la forma de frenar la alopecia sin tener que lidiar con los canales y financiación habitual. Una organización autónoma que, a través de Discord, introduce y debate las propuestas planteadas por los miembros, busca nuevos investigadores y pacientes, y motiva la participación de los integrantes a través de una moneda tokenizada propia que sirve como incentivo y recompensa.
Si colaboras con el proyecto, ya sea planteando y puliendo propuestas de estudio, sirviéndote de voluntario con muestras médicas que puedan ser analizadas, o realizando esos mismos análisis en laboratorios privados o el laboratorio propio que la organización tiene en Nueva York, recibes un pago en forma de token. En esa unión colaborativa, la idea es que las patentes y posibles beneficios que se extraigan del proyecto sean también repartidas entre sus miembros.
Cuando las pruebas experimentales creen haber encontrado una base sólida sobre la que apoyarse, entran en escena los estudios clínicos y profesionales académicos que buscan llevar la idea más allá, elevando las pruebas al siguiente nivel y patentando posibles soluciones que luego se venden en forma de productos capilares y cosméticos que siguen alimentando los precios de los token o se derivan hacia más investigaciones.
Cosmética, no medicina
Hasta aquí, la idea de un proyecto como el de HairDAO parece idílico, uniendo a profesionales, pacientes y aficionados en una búsqueda común que, pese a que la calvicie no entraña un riesgo para la población más allá del factor estético, cada vez preocupa más a unos jóvenes que ansían una cura definitiva para la alopecia. Sin embargo, la idea de un sistema sin regulación no está exenta de riesgos y polémicas.
Las intrahistorias sobre HairDAO hablan de tratamientos experimentales que mezclan compuestos aprobados con experimentos cuya eficacia no ha sido probada, sumando alternativas enfocadas a problemas de hormonas y medicinas orientadas a la hipertensión, el glaucoma o el cáncer que no cuentan con aprobación médica para otros usos e incluso pueden entrañar efectos secundarios potencialmente graves.
La idea de estudios realizados por usuarios anónimos de Discord de los que se desconoce su bagaje profesional no sólo plantea serias dudas sobre la metodología o hasta qué punto la falta de una auditoría externa mina la confianza puesta en sus soluciones, sino que también entraña un riesgo para la responsabilidad legal de posibles problemas generados.
Al evitar los márgenes legales de la medicina, los productos vendidos por la organización se agarran a un vacío legal regulatorio que les lleva a comercializar sus soluciones como productos cosméticos en vez de medicinas, lo que implica que los estrictos procesos que se realizan frente a un medicamento con todas las de la ley no siempre se aplican a sus soluciones.
Imagen | Ksaucier en Midjourney
En 3DJuegos | Sin darnos cuenta, la inmediatez de Discord se ha llevado por delante una parte mágica de los videojuegos y sus foros
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