Las previsiones de Netflix no estaban preparadas para el éxito de KPop Demon Hunters
Sin juguetes ni disfraces, están perdiendo una cantidad abismal de dinero
En un éxito como el de Las Guerreras K-Pop de Netflix las cifras del streaming pueden ser importantes, pero es en todo lo que ha hecho a posteriori con la llegada a cines o el merchandising donde realmente KPop Demon Hunters puede ser un filón. Ahora, con Halloween a la vuelta de la esquina, cada vez resulta más evidente que no han visto venir ni una ínfima parte del ruido que ha generado.
La clave está en que Netflix se ha topado con un cuello de botella al que no puede hacer frente. Como era de esperar, y como saben muy bien en la casa de streaming tras lo ocurrido en su día con La Casa de Papel, cualquier éxito que arrastre al número de personas que ha terminado cosechando Las Guerreras K-Pop puede ser una gallina de los huevos de oro con la llegada de Halloween y Navidad. Ha demostrado no estar preparada para ninguna de ellas.
Tal y como se recoge por los disfraces agotados del distribuidor oficial de Netflix, la demanda generada está a kilómetros de las previsiones iniciales de la compañía, lo que está llevando a la gente a recurrir a réplicas y tiendas no licenciadas para hacerse con el disfraz de Rumi, Mira y Zoey. Lo que a ojos de cualquier otra franquicia sería un día más en la oficina, en el caso de Las Guerreras K-Pop supone que van a dejar de ganar una cantidad abismal de dinero.
Pese a que la licencia de merchandising se compensa con todo lo que están vendiendo de la mano de tiendas como Zara o las figuras de Funko, en realidad el caso de los disfraces está lejos de ser el único drama al que se enfrenta el departamento financiero de Netflix: a los regalos de Navidad tampoco van a llegar a tiempo.
Cuentan que antes del estreno de la película las compañías jugueteras hicieron caso omiso a la posibilidad de licenciar Las Guerreras K-Pop por no ser una franquicia asentada, así que el éxito posterior y las difíciles negociaciones que llegaron después han provocado que, hasta hace sólo unos días, Netflix no había llegado a un acuerdo con Hasbro y Mattel para crear muñecos y juguetes.
Pese a que aún quedan un par de meses para los regalos de Navidad, desde Netflix ya han confirmado que los juguetes de Las Guerreras K-Pop no estarán a tiempo para que los repartan Papa Noel y los Reyes Magos, así que mientras Netflix se tira de los pelos por no haberse adelantado al éxito, las tiendas de terceros y las réplicas no licenciadas se están frotando las manos con todo lo que van a ganar.
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