Los desechos se mandan a cientos de metros de profundidad y se sellan con cemento
Aunque son de granjas y fábricas ajenas a Google, en realidad les beneficia
Que la enorme maquinaria de Google cuenta con negocios muy extraños en su inmenso portfolio no es algo que nos sorprenda ya los más mínimo. Que esté pagando por inyectar caca de vaca en el suelo, sin embargo, plantea no pocas dudas sobre hasta qué punto aún somos capaces de sorprendernos. Superado el shock inicial, cabe destacar que la idea tiene sentido.
La inyección a grandes profundidades de estiércol de vaca, desechos de depuradora o residuos de fábricas de papel, corre a cargo de la empresa Vaulted Deep, que tras hacer lo propio en Los Ángeles ahora está enterrando materiales como los citados a 300 metros bajo tierra en la zona de Kansas. Su intención es que, haciéndolo, consigan frenar sus emisiones. Justo ahí es donde entra Google y su interesada participación en la tarea.
El interés de Google en todo esto
El trabajo de Vaulted Deep pasa por reunir esos materiales de granjas, depuradoras y fábricas cercanas para procesarlos y convertirlos en una pasta más fácil de manipular. Tras ello, buscan zonas subterráneas profundas en las que haya roca impermeable y, valiéndose de máquinas que bombean la citada pasta, rellenan todo lo posible el subsuelo antes de sellarlo con cemento.
La idea es que, de esta forma, todo el metano y CO2 que iban a producir esos elementos, capaces de contaminar y apestar el aire de quienes viven cerca de esas zonas, se quede en el subsuelo durante miles de años mientras su materia orgánica alimenta las profundidades. De esta forma, esos lugares especiales aptos para este tipo de tratamientos evitan que los desechos terminen contaminando el agua, incinerados y expandiendo su olor y contaminación por el aire, o utilizados como abonos que han dejado de ser una opción por los problemas que comportan su uso.
¿Qué pinta Google en todo esto? Su estrategia es un poco la de "lo comido por lo servido". Como tienen que lidiar con compromisos regulatorios sobre su huella de carbono, especialmente ahora que los centros de datos de la IA se están convirtiendo en un problema medioambiental, invertir en empresas como esta para "comprar y tratar" los residuos de otros les ayuda a mostrar una cara más verde.
Dicho de otro modo, pueden plantear que aunque ellos están contaminando por un lado, en realidad hacen lo que pueden e incluso ayudan a otros a gestionar sus residuos para compensar los problemas que puedan causar. De esta forma las comunidades cerca de sus centros estarán más agradecidos, los gobiernos mirarán con buenos ojos cómo están ayudando a cuidar del planeta, y el resto del mundo no tendremos que lidiar con los olores y contaminación de ese tipo de desechos.
En 3DJuegos | Google multiplicó su productividad con la regla del 80%. Mark Zuckerberg reconoce que también ha caído en ella
Ver todos los comentarios en https://www.3djuegos.com
VER 0 Comentario