Javikillazombi / 20 de abril de 2019 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

7 Interesante

Sustancia mejora, pero sigue sin destacar
Supera en todos los aspectos a la entrega en China, que  era muy básica e insulsa, aunque esta peca de los mismos errores.
El apartado gráfico y la profundidad en los niveles  ha mejorado sustancialmente y se han añadido varias mecánicas nuevas como por ejemplo unos chakrams que rebotan (se usan pero un par de veces) o hacer de francotirador. Una cosa que ha empeorado es que algunos enemigos no pueden ser asesinados si no les tiras una bomba de humo, cosa que que arruina la experiencia sobretodo si aparecen "en masa".
De hecho le pongo mejor nota al juego porque los niveles estan muy logrados la mayoría, pero la historia es incluso peor, me recuerda al Assasins Creed black flag.

Peddro19 / 26 de febrero de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

6,5 Discreto

Una reseña más - Assassin's Creed Chronicles: India.
Assassin's Creed es una de las sagas de videojuegos con mayor renombre en la actualidad, y no es para menos. La franquicia creada y desarrollada por Ubisoft siempre trajo al mercado propuestas que desde lo conceptual me parecen más que interesantes, con mucho potencial y que suelen innovar en una industria bastante repetitiva, teniendo en cuenta que suelen basarse en una misma temática argumental y jugable. Sin embargo, sí es verdad que también ha sido blanco de poderosas críticas por parte de los usuarios, ya que estamos ante un asqueroso ejemplo de cómo explotar un producto de éxito pensando única y exclusivamente en la ganancia que este pueda dejar a la compañía, olvidándose de la calidad que alguna vez tuvo. Calidad que por cierto, con el paso del tiempo y de los representantes de una IP tan numerosa, ha ido empeorando exponencialmente (estamos hablando de un total de 36 juegos desde 2007, teniendo en cuenta consolas de sobremesa, portátiles, PC y dispositivos móviles).
Lógicamente, no todos los títulos de Assassin's Creed corresponden a su saga principal, sino que se han ido lanzando spin offs de la serie, algunos que ni siquiera están desarrollados por Ubisoft, para no perder la costumbre de seguir explotando la gallina de los huevos de oro por parte de la compañía francesa.
Entre esas subseries se encuentra Assassin's Creed: Chronicles, llevada a cabo por Climax Studios, cuya trilogía se compone de videojuegos en 2.5D ambientados en China, India y Russia respectivamente. Susodicha serie tuvo sus inicios en el año 2015, haciendo su última aparición en el mercado sobre 2016. Los anteriormente mencionados videojuegos destacaron por su  temática innovadora dentro de la franquicia, y sobre todo por un diseño artístico de ensueño. Sin embargo, en el resto de apartados cuentan con clarísimas limitaciones, lo que impidió que Climax Studios obtenga mayores ganancias con ellos. Su casi inadvertido paso por la industria también se debe a ser una trilogía sumamente continuista entre las obras que la conforman, pecado de toda la IP en general.
El videojuego que analizaremos a continuación es Assassin's Creed: Chronicles India, una obra en 2.5D que se desarrolla en la India de 1841, con un dibujado de entornos y apartado gráfico espectaculares. El principal objetivo es ir derribando o evitando enemigos con un combate y sistema de movimientos del personaje meramente abocados al sigilo, habiendo también secciones de plataformas.
Comenzaremos como es costumbre en mis análisis hablando del apartado técnico, para seguir con la historia, luego con la jugabilidad, cerrando con algún que otro dato de color y una conclusión acerca de lo que el producto en general me pareció.

Gráficamente estamos hablando de un trabajo excelente por parte de Climax Studios, en todos los apartados.
El motor empleado para este Assassin's Creed es el Unreal Engine, puesto en acción con el fin de lograr imágenes tridimensionales manteniendo la base del 2D. El resultado es más que satisfactorio desde lo técnico, ya que se observan físicas fluidas que si bien en ocasiones obstruyen el funcionamiento de la jugabilidad, estéticamente cumplen sobradamente su propósito.
Las texturas de este título están pulidas al detalle, cada objeto del escenario está muy bien definido, además de que mantiene una profundidad que añade un punto importante al conjunto.
Es verdad que al estar hablando de una obra que limita su aspecto visual a un mismo plano, el hecho de contar con un buen texturizado no es tan destacable. Sin embargo, Climax Studios ha logrado un resultado en lo meramente gráfico que está en un nivel realmente brillante, ya que además por todos lados se observan detalles visuales que tienen algún sentido con el contexto de la India de aquel entonces, característica etnográfica que define a la franquicia.
Todo esto tendría menos mérito si no estuviésemos ante un diseño artístico que por sí solo nos incita a jugar a este Chronicles India, y eleva al cuadrado todas las virtudes estéticas que pueda tener.
Poseedor de una paleta de colores muy variada y brillante, además de diversos entornos que nos da gusto recorrer, el dibujado es magnífico. Cierto es que el hecho de estar en India ayuda mucho al lucimiento de este apartado, ya que el título nos sitúa en una tierra cuya arquitectura para los occidentales es cuanto menos interesante. Además, los diferentes biomas están recreados de manera muy llamativa, al igual que los edificios emblemáticos que componen a ese país.
Por supuesto, estas características colaboran a la inmersión que ofrece este Chronicles India, aunque la misma, teniendo en cuenta que intenta transmitirse elementalmente desde el sistema de juego, se encuentra algo limitada ya que no es el principal objetivo que el título tiene para con el jugador.
Así, la ambientación y recreación de la India desde lo visual es simplemente magnífica, y lo mejor que el trabajo de Climax Studios tiene para ofrecer desde lo técnico hasta lo artístico, en una locación muy bien decidida.
Desde lo auditivo, el videojuego cuenta con una banda sonora que acompaña bien los momentos que se viven durante la experiencia, alternando entre canciones para las vivencias de mayor tensión, circunstancias de combate u otras donde queremos pasar inadvertidos, siendo este último el planteamiento primordial de la obra. Además, la música que oiremos a lo largo de los niveles es, justamente, proveniente de la India, lo que se nos aclara al comienzo del videojuego. Esto suma bastante a la aventura aunque no lo parezca, siendo una virtud propia de la IP.
En cuanto a efectos de sonido realmente no hay mucho que decir porque el título no los necesita, y por ende no los pone en práctica. Tampoco me estoy refiriendo a este apartado como algo criticable ya que el videojuego emite los sonidos justos para informar al jugador de lo que está ocurriendo, cosa que Chronicles India logra sin demasiado brillo, pero tampoco decepcionando.
El apartado técnico de este Assassin's Creed es bueno, debido a que cuando nos referimos a su parte visual es inevitable hablar de un esplendoroso sobresaliente, pero en cuanto a lo que a sonido se refiere es un producto más sencillo.
Para cerrar con este aspecto aclaro que el trabajo hecho por los programadores de Climax Studios se mueve a 60fps, sin ralentizaciones, ni molestos bugs.

La historia de Assassin's Creed: Chronicles India es aburrida y pierde interés fácilmente, por lo que doy por sentado que hablaremos de un aspecto bajo del título.
Primero que nada cabe destacar que estamos ante un protagonista de peso en la saga, Arbaaz Mir, que conocerán los más acérrimos a la misma debido a que ha aparecido en los cómics de la franquicia anteriormente, como Brahman, cuyos hechos sirven para dar pie a la trama. El argumento se dedica a continuar los hechos de esta novela gráfica, aunque para entenderlo no hará falta en lo absoluto haber leído nada previamente.
Resulta que como dije hace un rato en el análisis somos Arbaaz Mir, miembro de la hermandad de asesinos durante el siglo XIX. Nos encontramos en la India sobre el año 1841 en Amritsar, en el contexto de una guerra entre el imperio de Sikh y la East India Company, ambas partes ficticias como la trama en general.
El objetivo del protagonista en esta delicada situación es recuperar un valioso objeto, pieza importante del Fruto del Edén, perteneciente a la hermandad pero que fue arrebatado de sus manos por los templarios justo después de que estos llegaran al país. Susodicho artilugio de gran poder es denominado Koh-i-Noor.
Arbaaz durante la misión también debe proteger a su mentor, Hamid, personaje que le es de gran ayuda durante la historia y a su amante, la princesa Pyara Kaur, con la que luego conforma una especie de triángulo amoroso.
Hablando del elenco de personajes en sí el mismo es un poco acotado, aunque los roles de héroe y villano están bien marcados. El personaje más interesante es el protagonista, aunque pierde notoriedad en una trama bastante sosa. Además, él, al igual que casi todos los personajes que conforman el argumento no presentan una evolución durante el desarrollo del mismo.
La narrativa se presenta en cinemáticas con una secuencia de dibujos de muy buen gusto y personajes interactuando entre sí en lo que serían las diferentes viñetas de lo que supuestamente hace alusión a un cómic, pero de igual manera la historia se hace densa e irrelevante en muy poco tiempo, careciendo por completo de lo necesario para atrapar al jugador desde un comienzo. De hecho, si bien Chronicles India está muy bien ambientado y los escenarios por si solos nos dan información de lo que está pasando, la trama bajo mi punto de vista suele ser lo único del videojuego que aburre.
Por si no nos enteramos de nada, tendremos acceso a un manual que nos resumirá la historia de cada personaje que se vaya topando con nosotros durante la aventura, sirviendo de alternativa para quien no quiera ver las C.G.I del título.

La jugabilidad es un aspecto que, como siempre digo, para mí es el más importante en un videojuego. En este caso es el factor que hace de Chronicles India sea un título entretenido, que a su vez tiene muchas cosas por mejorar.
Estamos ante una obra en 2.5D, lo que quiere decir que combina diferentes perspectivas en el 2D de toda la vida, haciéndolo casi 3D. Con ello, nos referimos a la característica que hace distinguible a esta sub-serie de Assassin's Creed.
El videojuego está claramente orientado al sigilo. Básicamente se trata de ir avanzando por el nivel hasta que nos encontremos tal cantidad de enemigos que, por supuesto, en un primer momento no nos ven. En la pantalla se muestra el rango de visión de cada uno, algunos con la capacidad de interceptarnos más fácilmente, y deberemos memorizar sus patrones de movimiento si queremos pasar inadvertidos. Lógicamente deberemos hacerlo manteniéndonos al margen de la señal que indica que un enemigo está mirando hacia tal o cual lugar, cosa que es de gran ayuda para diagramar un plan.
Además, el videojuego tiene dos tipos de niveles que se rigen con sistemas de puntuación distintos. Al comenzar cualquiera de ellos se nos informará que, según la cantidad de puntos que obtengamos al final de la misión, desbloquearemos tal o cual mejora. Mientras mayor sea el puntaje, mejor será la recompensa.
La más fácil de estas modalidades es la de contrarreloj, donde tendremos que realizar una pantalla lo más rápido posible, estando disponible la puntuación de oro, plata y bronce según nuestra velocidad. Estas secciones suelen tener muy poco de combate y sigilo, estando claramente mucho más abocadas a las plataformas, lo que en mi opinión las vuelve aburridas.
Pasando a la otra modalidad, he de decir que es mucho más entretenida y no existe un tiempo pactado de realización, cosa que agradezco. La cantidad de puntos que obtengamos aquí irá en función de nuestro desempeño contra los enemigos, siendo el sigilo la mejor alternativa para conseguir una buena puntuación.
Para lograrlo, tendremos la posibilidad de pasar por zonas hostiles sin matar a nadie, dejando a los guardias inconscientes, o asesinándolos de manera sigilosa.
Cuando superemos una parte del nivel que haya estado poblada de rivales, independientemente de que haya habido mayor o menor cantidad de los mismos, el videojuego puntuará con rangos nuestro desempeño en esa circunstancia. Hay tres clases de rangos, cada uno puede sacarse en oro, plata, o bronce según nos hayan detectado o no. Los mismos son:
Oculto: Se nos otorga cuando superamos a los templarios sin matar a nadie.
Silenciador: Se nos otorga cuando superamos a los templarios dejándolos inconscientes.
Asesino: Se otorga cuando superamos a los templarios asesinándolos.
Al final del nivel nos harán un conteo de cuantos rangos de cada uno conseguimos, lo cual incrementará nuestra puntuación en mayor o menor medida, dependiendo si logramos muchos "oros", etcétera. Cabe destacar que el rango "oculto" es el que más suma.
Con estas formas de obtener un mayor puntaje en ambas modalidades de misiones, adquiriremos mejoras que luego Arbaaz podrá utilizar. Aun así habrá algunas que desbloquearemos por el simple hecho de pasar de nivel.
Hablando ahora del diseño de pantallas de este Chronicles India, el mismo es más que lineal y si bien esconde algunos coleccionables, los mismos están a la vista y no es para nada complicado obtenerlos.
Además, el título está claramente pensado de la A a la Z para que nos movamos por sus recovecos de manera sigilosa, haciendo uso del parkour y agilidad de los Assassin's que son marca registrada de la franquicia. Con este sistema de movilidad resolveremos también las secciones de plataformas, que si bien conceptualmente son una buena idea, puestas en práctica resultan un trámite. Esto se debe a que, como en toda la saga de Assassin's Creed, el protagonista realiza saltos de manera automática siendo que nosotros únicamente debemos apretar el botón correspondiente. Con esto, el título logra que el plataformeo pierda toda su emoción debido a que justamente, se basa en apretar no más de dos teclas.
Por su parte las misiones no son muy largas, estamos hablando de una campaña conformada por diez niveles, todos completamente rejugables en busca de una mejor puntuación, que no va más allá de las cinco o seis horas hasta ver los créditos.
Ahora hablemos del sigilo, mecánica principal del título. Para realizarlo, ya dije que cada enemigo tiene un rango de visión que se muestra en pantalla y del cual deberemos mantenernos al margen para no ser vistos, además de un patrón de movimientos designado con el fin de abarcar mayor parte del terreno y hacernos las cosas más difíciles. Es bueno el hecho de que haya muchos tipos de guardias que se diferencien entre sí por diversas habilidades que tendremos que tener en cuenta para escapar de ellos o enfrentarlos, cosa que añade variedad y profundidad a estas secciones.
Para ocultarnos nos podremos escabullir en diferentes escondites, como puede ser entre los arbustos y demás. Si queremos distraer a los enemigos tenemos una serie de artilugios que servirán para desviar su atención y aprovechar la circunstancia para escaparnos sin hacerles nada, incapacitarlos o asesinarlos, cosa que haremos de manera silenciosa acercándonos a casi cualquiera de ellos sin que se den cuenta. A su vez contamos con, por ejemplo, bombas de humo que impiden la visión al rival y son una herramienta de gran utilidad desde cualquier punto de vista.
Aun así se echan en falta más mecánicas que hagan del sigilo un estilo de juego de mayor profundidad y variedad, pudiendo afrontar una misma situación con un amplio catálogo de posibilidades, o por lo menos con uno moderado, ya que el de Chronicles India es más bien acotado. Sin embargo, sigue siendo bastante entretenido y la sensación de infiltración está bien lograda, más allá de que la IA sea más bien pobre.
Lamentablemente lo que empeora notablemente la jugabilidad es el combate y la respuesta de los controles.
Empecemos por el combate... Primero que nada cabe destacar que con combate me refiero a esos momentos en los que los enemigos ya nos localizaron y obviamente tocará hacerles frente en un enfrentamiento directo. Todo lo referente a este tema es paupérrimo en el trabajo de Climax Studios.
El videojuego presenta un inútil tutorial acerca de cómo luchar cuerpo a cuerpo que puesto en práctica no sirve de nada. Esto se debe a que los controles no responden bien, muchas veces no queda claro qué es lo que nuestro personaje está haciendo exactamente, además de que todas las mecánicas del mismo fallan estrepitosamente, teniendo en cuenta que están mal implementadas y diseñadas. No se puede realizar el más miserable combo y el hecho de esquivar dos disparos seguidos es prácticamente imposible, porque para ello hay ciertas señales que el título en ocasiones se saltea.
Encima, los movimientos de Arbaaz son muy lentos y eso es molesto hasta decir "basta", cosa que contrasta con la versatilidad del personaje a la hora de desplazarse.
El combate directo es por mucho el peor apartado de la obra, y algo que la mayoría querrá evitar a toda costa.
Algo que añade profundidad a la jugabilidad en general es lo denominado "Carga de Helix", que nos servirá para darnos una especie de "power up" en los combates que esta vez resulta de gran utilidad, además de que será de ayuda en los momentos de sigilo. La misma funciona como una especie de súper poder que iremos recargando en una barra, la cual se irá agotando conforme hagamos uso de esta habilidad.
Por último, también quería aclarar que contamos con una vista de águila que nos permite ver qué objeto lleva cada enemigo, el cual podremos arrebatar una vez estén inconscientes o muertos.
En conclusión y hablando de este aspecto, el sistema de juego de susodicho Assassin's Creed es lo que lo hace un título entretenido, ciertamente divertido y disfrutable, pero sin embargo su limitada variedad de opciones que le aporten una mayor profundidad nos dejan con una sensación de insuficiencia.
También es imposible obviar que la monotonía de las secciones de plataformas, más el paupérrimo combate y la cuestionable respuesta de los controles en ocasiones, empeoran drásticamente una jugabilidad que aun así, cumple su objetivo de mantenernos pegados a la pantalla pasando un buen rato.

Con respecto a algunos datos de color y extras, tengo por aclarar que este videojuego trae consigo una "Sala de desafíos", donde encontraremos tres clases de retos por superar:
Recoger: se trata de recoger una determinada cantidad de objetos dispuestos en el escenario en un tiempo límite.
Contratos: En una pantalla hay muchos guardias, debemos identificar con la vista de águila al que lleva el contrato y quitárselo de las manos, siendo al igual que el resto una prueba a contrarreloj.
Asesinato: Simplemente debemos asesinar a todos los enemigos en pantalla.
Cada uno de estos desafíos tiene dos niveles por completar, y si cumplimos algunos requisito extra a la hora de realizarlos obtendremos una mayor cantidad de puntos. Estamos ante un añadido entretenido, pero bastante sencillo y que no aporta mucha más vida al conjunto.
Una vez completada la campaña, el videojuego nos da acceso a la típica partida plus, con la que podremos rejugar la aventura teniendo las mejoras que habíamos desbloqueado la pasada anterior, esta vez desde un comienzo.

En conclusión, el trabajo de Climax Studios es una propuesta interesante cuya puesta en práctica, sobre todo desde el apartado jugable, no está bien explotada. Además, sigue siendo muy continuista con la anterior entrega, Chronicles China, por lo que tampoco incluye mecánicas que representen un soplo de aire fresco para la sub-serie.
Gráficamente estamos hablando de un título impecable desde el empleo del motor gráfico, hasta un diseño artístico exquisito que se potencian para recrear a la India en escenarios sumamente variados y pintorescos. El apartado sonoro no brilla pero tampoco decepciona, por lo que el aspecto técnico del videojuego a nivel global me parece de calidad.
Sin embargo, la obra comienza a derrapar cuando se presenta una historia que aburre desde un comienzo con personajes poco llamativos. Difícilmente se le pueda dar una atención natural a la narrativa aunque las cinemáticas sean bonitas y de buen gusto, pero con diálogos sosos.
Jugablemente el título logra divertir al jugador pero con muchos "peros" por delante, ya que si bien estamos ante un sigilo logrado con éxito, se encuentra bastante limitado. Además, el combate es un desastre por donde se lo mire, el plataformeo prácticamente no tiene gracia y el protagonista no siempre responde como nos gustaría. Esto lamentablemente
Assassin's Creed: Chronicles India es un título muy bonito y medianamente entretenido, pero cierto es también que muchísimos detalles arruinan visiblemente un conjunto con potencial.