Castlevaniacurse / 11 de octubre de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Labrándote una nueva vida.
Stardew Valley es un videojuego de simulación de granja desarrollado por una única persona llamada Eric Barone, cosa muy meritoria por su parte, y estrenado a finales del año 2016, tras convertirse en uno de los mejores lanzamientos del año y triunfar en PC.

En Stardew Valley, el jugador toma el rol de un personaje que se encuentra atrapado en un trabajo de oficina, para escapar de él se va a vivir a la granja de su abuelo, la cual se encuentra en ruinas. Como el protagonista deberemos realizar acciones tales como cultivar, regar los cultivos, ir a la mina, pescar, recolectar, entre una cantidad impresionante de acciones que podremos realizar y que harán de este título uno en el que siempre habrá cosas que hacer. Nuestro personaje contará con una barra de salud y energía, esta última irá consumiendose con cada una de las acciones que vayamos realizando por lo que deberá ser gestionada con cautela. El juego también cuenta con un carácter social al poder relacionarse con los vecinos del lugar e incluso pudiéndose casar con algunos de los personajes solteros del juego. Nuestra amistad con nuuestros vecinos aumentará a medida que les agamos regalos, pero teniendo cuidado porque cada personaje tiene sus propios gustos.
Stardew Valley además cuenta con un sistema de estaciones que nos hará planificar nuestras tareas en ese periodo de tiempo que dura unos 28 días en tiempo del juego.
En cuanto a duración se refiere, el juego puede durarnos más de 100 horas gracias a su extenso contenido.

El título cuenta con muy buenos efectos de sonido, así como de temas que orquestan de forma muy adecuada cada momento y lugar en el que nos encontremos (mención especial al tema de verano). 

Gráficamente el juego es más que correcto, nos presenta un "pixel art" a un muy buen nivel, con muchos detalles y colores muy vivos, consiguiendo crear estampas hermosas y meternos de lleno en la experiencia que estamos viviendo.

En resumidas cuentas, estamos ante uno de los mejores videojuegos de los últimos años, un juego que nos permite jugar a nuestro ritmo y en el que podremos relajarnos y vivir una vida en la naturaleza en la que nos olvidaremos de nuestros problemas diarios y que por ello y lo entretenido que es, se nos pasará el tiempo volando. A todo ello le sumaremos que es más que notable en términos gráficos y sonoros y que gracias a su contenido puede ser un juego casi infinito (pues no tiene un final propiamente dicho). Compra 100% recomendada.

 Y tú, ¿ te atreves a vivir una nueva vida en Stardew Valley?

Peddro19 / 18 de marzo de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Una reseña más - Stardew Valley.
Voy a empezar este análisis con una frase que defina sintética y claramente lo que pienso acerca de este videojuego: Stardew Valley es, además de un título que merece muchísima más notoriedad de la que ya tiene, uno de los mejores productos que la industria ha visto en décadas. Con esto también quiero decir que estamos ante uno de los mejores videojuegos del mundo, desde el día en el que se puso a la venta hasta hoy, poco más de dos años más tarde.
Te voy a explicar por qué me parece que, independientemente de la plataforma que poseas, esta es una opción que deberías tener en carpeta. En cambio, si no conocías Stardew Valley, te recomiendo que empieces a buscar información en Google debido a que podrías estar ante un videojuego completamente de tu agrado.
Después de una breve sub-introducción para dejar en claro que estamos ante un título que derrama una envidiable calidad jugable, procedo a realizar el análisis de manera común y corriente. 

Stardew Valley es un título independiente lanzado a la venta en el año 2016, y desde entonces ha logrado vender 3.500.000 de ejemplares en todo el mundo, habiéndose lanzado originalmente para PC, y luego convirtiéndose en todo un multiplataformas haciendo su aparición en PlayStation 4 y Xbox One simultáneamente, y hace poco tiempo en Nintendo Switch, siendo este último un sistema ideal para disfrutar de esta obra maravillosa de la industria de los videojuegos. 
Este título cuenta con una peculiaridad en cuanto a su desarrollo que bajo mi juicio lo hace aún más entrañable de lo que su misma atmósfera desprende, y es que su creador, Eric Barone, es literalmente el único desarrollador de una obra tan ambiciosa como inmensa. Con esto me refiero a que él solo y según sus propias palabras, dedicó más de siete y frecuentemente diez horas al día durante cuatro años al objetivo de realizar un trabajo claramente inspirado en la saga Harvest Moon, pero que mejorase la hasta entonces última entrega de la misma denominada "Back to Nature", que dicho sea de paso para Barone no había estado a la altura de lo que la prestigiosa IP de Nintendo representaba en el amplio catálogo de lanzamientos exclusivos perteneciente a la compañía nipona. 
El hecho de ser el único programador implicado en el proyecto ya de por sí es impresionante, pero lo es todavía más cuando una vez en el juego vemos la absurda cantidad de líneas de texto que hay pertenecientes a los varios personajes con tramas individuales que existen, además de una variedad y diversidad de contenido que resulta, inclusive, violenta. Además, Barone también creó desde cero cada nota musical así como cada pixel que componen los apartados sonoros y visuales de Stardew Valley, respectivamente. Este trabajo titánico terminó por ponerse a la venta bajo la firma de la empresa ConcernedApe, distribuido posteriormente por Chucklefish Games, sin que antes su responsable lo haya descartado y rehecho en varias ocasiones. 
Podríamos seguir hablando largo rato de esta maravillosa, pequeña y gigante obra maestra por mucho más tiempo, mencionando detalles como que en un comienzo Barone creyó no haber tanto público para la clase de proyecto que estaba realizando, pero luego se dio cuenta de que tenía una gran cantidad de potenciales compradores, cosa que comprobó una vez anunciado Stardew Valley, momento en el que atrajo la atención de una buena parte de usuarios de Steam.
Resumiendo: Stardew Valley es un videojuego independiente perteneciente al género de rol y simulación de lo que sería una vida campestre, pero elevando cada posibilidad a su máximo exponente con el fin de sacarle el mejor beneficio para el jugador. 
Comenzaré el análisis hablando en primera instancia de su aspecto técnico, siguiendo con la historia, para luego profundizar en una jugabilidad demasiado extensa como para poder explicarla al completo y con lujo de detalle, cerrando con una conclusión y demás datos de color que hacen al título. 
Cabe destacar que en la fecha en la que redacto este texto, 12/3/2018, Stardew Valley no posee un modo multijugador aunque su inclusión sea muy próxima. 

En cuanto al aspecto técnico, Stardew Valley no cuenta con ningún motor gráfico en específico sino que es movilizado por las habilidades informáticas de Eric Barone para programar un videojuego.
El mismo ha logrado un pixel art maravilloso provisto de un diseño artístico precioso, sumado a una amplia paleta de colores que logran una atmósfera más que carismática, la cual consigue que la mera visualización del título se convierta algo agradable.
Por su parte, si bien estamos hablando de un diseño de objetos y personajes bastante sencillo desde lo gráfico, las texturas se encuentran bien definidas y trabajadas, inclusive aquellas que en ningún momento toman gran protagonista en el escenario. 
Lamentablemente, su naturaleza simplista y el hecho de estar un peldaño por debajo de otras obras del mismo estilo le juegan una ligera mala pasada que aun así, no entorpece en demasía el conjunto.
Por su parte, nos encontramos ante un diseño artístico de muy buen gusto que trasmite la tranquilidad con la que el jugador debe encarar el videojuego. Toda la pequeña extensión de un mapa bien provisto de actividades por hacer encuentra varios biomas bien distinguidos, cosa que añade variedad y profundidad a Pueblo Pelícano que, en cuanto lo vamos descubriendo, vamos encontrando nuevas locaciones que se diferencian lo suficiente de las demás como para no sentir que Stardew Valley, repito, desde lo particularmente estético, tiene un diseño de escenarios monótono sino dinámico, habiendo también mañana, tarde y noche durante un mismo día, siendo este un detalle influyente en el gameplay, del cual hablaré luego.
A nivel auditivo, Stardew Valley cuenta con una banda sonora cuya diversidad de temas es más bien acotada, pero sin embargo muy rendidora. Cabe destacar que los mismos varían según la estación en la que nos encontramos y, además de acompañar satisfactoriamente la experiencia del jugador, se relacionan con el resto del conjunto global que conforma a Stardew Valley de manera orgánica.
Los efectos de sonido son muy básicos, y es de importancia destacar que ningún personaje cuenta con una voz propia, sino que toda la información que recibamos será en forma de interesantes textos.
Stardew Valley a nivel de rendimiento también consigue un buen resultado, moviéndose a una tasa de frames obviamente muy estable. Cuenta con bugs sumamente específicos con los que difícilmente nos encontremos durante nuestra interminable aventura, pero el equipo desarrollador constantemente está trabajando en solventar dichas imperfecciones, cosa que podremos comprobar en la página oficial del título donde a su vez estará la wiki del mismo. 

La trama de Stardew Valley apenas comienza parece ser bastante simple, sin embargo toma una profundidad y contenido bastante importante, cuya trascendencia en la experiencia decide el jugador. 
Nos encontramos ante una historia que, tratándose de un videojuego, a algunos puede resultarle particular. Resulta que conforme vamos "avanzando" (concepto que, argumentalmente hablando, se desarrolla una vez empezamos a interactuar con los diferentes habitantes de Pueblo Pelícano) iremos conociendo la historia que cada uno de estos vecinos tiene para contarnos, cosa que lograremos mediante el diálogo y el aumento de la amistad con cada uno en particular. 
Con esto me refiero a que Stardew Valley no tiene una historia principal que gire alrededor del personaje protagónico, sino que se trata de las diferentes relaciones que el avatar del jugador vaya entablando con una amplia variedad de NPCs, poseedores de una personalidad definida y de objetivos por cumplir, metas que conseguirán con nuestra ayuda. Entonces, en tanto y en cuanto vayamos dando una mano a estos personajes iremos obteniendo más beneficios que inclusive harán que el mismo pueblo vaya evolucionando, otorgándonos ventajas, y un mayor número de posibilidades. También cabe destacar que si bien podemos hacer amigos, existe la posibilidad de cansarnos con una persona de sexo femenino o masculino, para luego tener hijos.
Permítanme hacer un pequeño paréntesis para hablar de la narrativa, que se desempeña exclusivamente mediante textos, sin haber cinemáticas como tales de por medio.
La historia de Stardew Valley se desarrolla a gusto exclusivamente del jugador, el cual manejará los tiempos de la misma. 
Sin embargo, el título apenas comienza nos pone en contexto de lo que ocurre y nos cuenta las desventuras de un trabajador (nosotros) de la multinacional JoJa que se cansó de la vida en la ciudad y decidió abrir el regalo que su abuelo le hizo antes de morir, que se lo había preparado exactamente para dicho momento. En la carta se encontraban los derechos de su antigua granja que ahora nos pertenece, situada justamente en Stardew Valley. 
Así el videojuego nos suelta libremente en las viejas y descuidadas tierras del abuelo, dándonos rienda suelta para hacer literalmente lo que queramos en cuanto queramos hacerlo, debido a que podemos dedicarnos exclusivamente a cuidar la granja u obviarla completamente y enfocarnos en hacer amigos. No hay apuro de absolutamente nada, siendo esta una enorme ventaja que Stardew Valley aprovecha muy bien en cada uno de sus apartados. 

Hablando de la jugabilidad, claramente estamos ante un título que pone ante el jugador una cantidad apabullante de opciones que inclusive puede resultar violenta, prácticamente imposible de explicar al detalle y por completo, como mencioné al principio del análisis.
Bien, estamos refiriéndonos a un título de rol abocado "principalmente" a la gestión de una granja que será nombrada por nosotros mismos al igual que nuestro personaje, el cual podremos modificar como queramos una vez empezado el título y llegando nuevamente a esa posibilidad haciendo algunas misiones. Para customizar al protagonista tendremos una buena cantidad de opciones, aunque este es un punto que no tiene demasiada trascendencia ya que el pixel art de Stardew Valley no es que precisamente haga lucir el aspecto del avatar.
En la primer pantalla que veremos una vez corramos el título en nuestra consola habrá una cantidad de granjas que elegir, cuyas características variarán en función de favorecer nuestras preferencias. Existe la granja estándar que fomenta la agricultura, la granja fluvial que fomenta la pesca, la granja salvaje que fomenta el combate, la granja minera que fomenta la minería, y la granja forestal que fomenta la recolección. Cada uno de estos conceptos en particular es una posibilidad de jugar a Stardew Valley, aunque obviamente el hecho de, por ejemplo, tener una granja estándar nos permitirá realizar cualquiera de las otras actividades que explicaré a continuación.
Comenzaremos con una granja llena de árboles, piedras y demás que podremos ir limpiando para así conseguir recursos, debido a que cuando por ejemplo talemos un árbol con un hacha este soltará madera, y si picamos una roca la misma nos dará piedra. Todos los objetos que obtengamos se irán acumulando en un inventario expandible, el cual de por sí viene con las herramientas predeterminadas, aunque también podemos guardar lo que sea en un cofre que craftearemos, siendo esta última una interesante mecánica.
Al principio será un lío ordenar de manera provisoria el desastre inicial de nuestro nuevo terreno y empezar a plantar los primeros cultivos, por eso Stardew Valley es un videojuego que necesita tiempo y vos le vas a dar más del que deberías, porque es un agujero negro que, una vez dentro, es imposible de escapar. Aun así, la obra del genial Eric Barone no impone ninguna meta, ya que como dije antes, el ritmo de la experiencia en cada uno de sus apartados es controlado totalmente por el jugador. De todas formas, supongo que se entiende que el título está abocado principalmente a la gestión de la granja, pudiéndola moldear a nuestro gusto y convertirla en algo tan productivo como bonito. 
Para convertirnos en un granjero deluxe, ideal de casi todos los jugadores de Stardew Valley, estará la opción de cosechar diferentes semillas, las cuales se pueden comprar en la tienda del pueblo.
Aquí es importante saber que dentro del videojuego irán corriendo los días, las estaciones, y los años. Un año se compone de las cuatro estaciones naturales, y cada una de ellas se divide en veintiocho días, que tienen ciclos de mañana, tarde y noche. 
Los años no tienen un límite y su transcurso no representa cambios sustanciales en la obra, pero el hecho de pasar de, por ejemplo, de primavera a verano sí será una cuestión a tener en cuenta. Esto se debe a que hay cultivos y objetos propios de cada estación, lo cual quiere decir que los cultivos que aún no han madurado lo suficiente el último día del otoño, en el primer día del invierno se marchitarán y no servirán para nada, ya que tienen varios usos.
Pequeño paréntesis para mencionar que el invierno es la única estación donde no crece ninguna semilla, excepto si tenemos un invernadero, cosa que resulta más que una maravilla.
Bueno, volviendo al tema, de todas formas cabe destacar que esta situación (la de echar a perder cosechas) es completamente evitable jugando con un mínimo de cabeza, aunque generalmente representa un fallo común entre jugadores novatos. 
Retomando, antes de comprar una semilla podremos ver en qué fruto o vegetal germinará, además de cuánto tardará en hacerlo. Hay semillas que tardan cuatro días, otras diez y seis, otras una estación entera. Además, hay algunas que una vez cosechadas siguen otorgando su producto con el correr de algunos días.
Cuando tengamos las semillas que queramos deberemos plantarlas en nuestra granja, pero para eso antes deberemos arar tierra, luego colocar el cultivo, y luego regarlo cada día hasta que por fin madure. En caso de que llueva, lógicamente no hará falta regar nada.
Inclusive podremos plantar árboles, poseedores de semillas cuyo crecimiento es diferente al del resto de frutos o vegetales, pero que nos otorgan diversos productos especiales si les colocamos una resinera, siendo este otro objeto crafteable.
Los cultivos tienen bastantes utilidades y por eso deberemos elegirlos según el/los que creamos más convenientes para nuestro propósito, el cual puede ir desde consumirlos con el fin de recuperar energía hasta usarlos en diversas y muy variadas recetas de cocina, pasando también por el hecho de simplemente venderlos o convertirlos en un jugo.
Todo este sistema de cultivo resulta muy positivo para el conjunto, debido a que tiene una gran cantidad de opciones y detalles a tener en cuenta, con lo cual hará falta jugar a Stardew Valley sin dejar cabos sueltos, cosa a la que nos acostumbraremos y que en determinado momento conseguiremos de manera metódica. 
Otra de las actividades del título es la pesca, que también tiene varios ítems que son de interesante desarrollo. 
En primer lugar cabe destacar que la finalidad primordial de esta mecánica es capturar peces que luego podremos consumir crudos, venderlos, o nuevamente, utilizarlos en la confección de recetas gastronómicas. La rentabilidad pasa más que nada por esta última utilidad, aunque aun así resulta una acción bien implementada dentro del título. 
Para llevarla a cabo deberemos obtener una caña de pescar que luego podremos ir cambiando, para por fin dirigirnos a la playa o a la orilla de un río con el fin de llevar a cabo la pesca, que tiene un sistema bastante sencillo de realizar. 
Hay varios tipos de peces, y según cuáles sean serán más o menos difíciles de pescar, aunque lógicamente nos traerán más beneficios una vez consigamos obtenerlos. Con el fin de pescarlos más fácilmente podremos hacer uso de diversos objetos que nos facilitarán la tarea de maneras diferentes, permitiéndonos por ejemplo craftear una trampa para cangrejos que nos será de utilidad para capturar exponentes de esta especie, que es una de las más valiosas dentro del título. 
Además, mientras pesquemos también podremos capturar cofres del tesoro o basura situada en el océano. En el caso de los cofres, los mismos pueden contener objetos comunes como el carbón u otros más raros que podremos donar en el museo. 
El museo es de utilidad para donar dichos artilugios con lo cual nos veremos recompensados, además de ser el lugar donde podremos leer las citas de texto que encontremos mientras llevemos a cabo una tarea ligada a la recolección. 
Siendo este último párrafo el nexo que utilizaré para hablar de la recolección, creo que estamos ante la actividad que ofrece una menor variedad de opciones pero que aun así resulta útil, aunque desde lo económico sea poco rentable. 
Resulta que conforme nos movamos por la extensión del mapa iremos viendo frutos dispersos que se nos permitirá recoger y luego usar para lo que queramos. Hay zonas en las que los artilugios serán más abundantes y de una temática más peculiar, siendo también los más valiosos, ya que no solo recolectaremos comestibles, sino también productos de minería y demás, cuya ubicación es completamente aleatoria. 
Habrá objetos propios de cada estación, así como también otros que podrán farmearse en cualquiera de ellas. Los mismos en su mayoría sirven en la elaboración de comidas, y tienen propiedades que irán variando según el fruto en cuestión. Si obtenemos, por ejemplo, un mineral, este será útil para vender, para donar al museo, o para la confección de otros materiales relacionados con el crafteo.
Hay una cantidad ingente de objetos disponibles, algunos de los más recónditos y bizarros posibles, cosa que añade un factor sorpresa a la recolección. Esta a su vez se ve beneficiada por el hecho de ser una metodología que nos aporta de manera sencilla prácticos productos.
Con respecto a la minería y combate, estamos hablando de dos prácticas que en general tienen una gran relación. 
Los productos mineros se obtienen, en su gran mayoría, dentro de Las Minas. Las Minas ocupan un pequeño espacio en el mapa y son un conjunto de ciento veinte cavernas, que en este caso se denominan "niveles", donde nuestro personaje deberá ir bajando para encontrar minerales de mayor valor que después tendrán un buen número de utilidades. Entre estos se encuentran el cobre, la plata y el oro (y un gigante "etcétera"), que al conseguirlos en forma de menas y luego mezclar cinco menas con un trozo de carbón en un horno que previamente habremos crafteado, obtendremos un lingote del mineral correspondiente, el cual nuevamente renueva sus posibilidad de crear otros objetos. Con estos lingotes también podremos mejorar solo algunas de nuestras herramientas (pico, hacha, regadera y azada) llevando los materiales y el dinero necesario al herrero, que se encargará de hacer el trabajo. El máximo nivel de mejora es el iridio, que a su vez es el producto minero más valioso, y uno de los más difíciles de conseguir. 
Volviendo al tema de Las Minas, en estas encontraremos enemigos que irán incrementando en fortaleza y variedad conforme aumente nuestro descenso por los niveles. Algunos también soltarán objetos propios, y para combatirlos recibiremos una espada bastante sencilla. Para cambiar de arma podremos ir al Gremio de Aventureros donde existirá la posibilidad de comprar diferentes espadas, botas que sirven como "armadura", e inclusive anillos que al portarlos nos darán una característica en especial. Los anillos también son crafteables. En este gremio también habrá una serie de objetivos (por ejemplo, matar a cien monstruos) que al completarlos recibiremos una recompensa. 
Si no queremos invertir dinero en un mejor armamento, podremos esperar a bajar lo suficiente en Las Minas donde en ciertos niveles se nos otorgará un arma más potente a la que tenemos. 
Cabe destacar también que, en Las Minas, cada cinco niveles que bajemos habrá una especie de punto de control. Así, si bajamos desde el nivel cero al diez podremos volver cuando queramos a los niveles cinco o diez, lo cual en este caso resulta muy útil. 
Sin embargo, estas no son las únicas minas que existen en el videojuego. Una vez lleguemos al nivel ciento veinte de las primeras minas obtendremos una llave especial que nos abrirá las puertas a las minas de la Caverna Calavera, ubicada en el desierto, locación a la que tendremos acceso ayudando a uno de los personajes del pueblo y donde los niveles son prácticamente infinitos, además de más complicados y con mayores posibilidades de conseguir objetos más valiosos. Encima de todo, no existen los checkpoints que comenté anteriormente. 
En general hay un buen número de enemigos, cada uno con su mecánica, y aunque el combate es sumamente simple, no por eso pierde su gracia. Si nos adentramos en zonas muy complicadas podremos craftear bombas y mini bombas que nos facilitarán la pelea, además de que funcionan para destruir piedras más rápidamente. Las minas lógicamente están llenas de piedras que deberemos apartar de nuestro camino para obtener recursos preciosos, y también con la finalidad de bajar de nivel.
Una vez explicadas de la forma más abarcativa posible las principales actividades de Stardew Valley (agricultura, pesca, recolección, minería y combate), ahora hablaré de los factores que giran a su alrededor.
En el caso de la agricultura, pesca y recolección, los productos obtenidos de cada uno pueden ser de nivel normal, plata, oro, o iridio, en algunos casos. Así, por ejemplo, una calabaza (cultivo de otoño) puede ser obtenible en normal, plata u oro. 
Casi siempre esto es completamente azaroso, pero realmente no es para nada complicado pescar un pez de oro, recolectar una fruta, o cosechar un cultivo. En el caso de los cultivos podemos poner fertilizadores crafteables o comprables, unos mejores que otros, lo cual aumentará las posibilidades de que una semilla una vez madura y lista para cosechar tenga un mejor nivel.
Según el nivel varían las cualidades de aquello que hayamos obtenido. Entonces, un fruto de nivel oro va a tener mejores propiedades y se venderá mejor que otro que es normal o de nivel plata, cosa que también es aplicable al caso de los peces o, nuevamente, de los cultivos. 
En el caso de los materiales preciosos, estos no tienen dicha característica, por lo que sus prestaciones serán siempre las mismas. 
Todas estas prácticas tienen dos factores condicionadores, que explicaré a continuación.
En primer lugar, apenas comience un día en Stardew Valley (6:00hs), nuestro personaje tendrá una barra de energía que se irá agotando conforme realicemos la más mínima acción ligada a los principios básicos de cualquier metodología desarrollada en este análisis. Se irá consumiendo en cómodas cuotas, pero si nos pasamos el día talando árboles, picando piedras, o regando, es muy probable que al mediodía nuestro avatar esté por gastar completamente sus fuerzas y debamos dormir. La energía, al igual que la salud, puede recuperarse consumiendo cualquier comida con propiedades benevolentes, aunque lógicamente algunas nos darán un envión mucho más potente que otras.
El tema de la administración de energía resulta complicado al comienzo de la aventura, pero luego iremos haciendo lo necesario para terminar las 24hs (trece minutos reales) cómodamente. 
Si nos agotamos por completo caeremos en donde estemos independientemente de la hora que sea, y si fue dentro de la granja nos recogerá un médico que nos cobrará por los servicios, enviándonos a la cama. En cambio, si pasó fuera de ésta, ocurrirá lo mismo y además nos pueden robar recursos que traigamos en nuestro inventario. La situación se repite si morimos en las minas, o si son las 2:00hs y todavía no hemos ido a dormir, momento en el que el protagonista caerá muerto de sueño.
También está el factor de la suerte. Podemos saber la fortuna que tengamos cada día encendiendo la televisión, y consultando el programa de la pitonisa. Dependiendo de lo que nos diga se nos hará más o menos fácil pescar, encontrar objetos de gran valor en las minas, etcétera. Cabe aclarar que el hecho de tener mala suerte no nos impedirá por completo el hecho de disfrutar de la pesca o de la minería, en lo absoluto, de hecho se siente como una especie de dificultad dinámica no abusiva, que aporta profundidad al conjunto. 
En este artefacto tecnológico también estará el canal del pronóstico, en donde se nos informará qué clima se presentará al día siguiente, además de una emisión circunstancial que nos permitirá descubrir nuevas recetas de cocina, etcétera. 
Todos estos datos pueden ser consultados por el jugador cuantas veces quiera.
Otro apartado que se relaciona con estas actividades es el de subir de nivel. Podremos subir de nivel en, valga la redundancia, agricultura, pesca, combate, minería y recolección. Para lograrlo solo nos bastará con practicarlas lo suficiente, habiendo un máximo de diez niveles para cada una. Cada cinco niveles, el videojuego nos dará a elegir en qué área de la actividad que hayamos logrado aumentar queremos especializarnos, poniéndonos dos opciones marcadamente diferentes, y permitiéndonos seleccionar aquella que se adapte mejor a nuestro estilo.
Además, otras de las ventajas de subir de nivel alguna de estas áreas es que desbloquearemos con ello más objetos que craftear, habiendo una cantidad ingente de los mismos, los cuales a su vez suelen resultar muy útiles. 
Hablando un poco más del sistema de crafteo, estamos ante una mecánica simple pero que aporta muchísima profundidad a la jugabilidad, resultando imprescindible para el progreso de la granja.
Para craftear un objeto deberemos reunir los recursos necesarios que generalmente son accesibles, para luego usarlos y confeccionar el artilugio deseado. Además de, como ya dije antes, haber una enorme cantidad de objetos que se ven muy diferenciados entre sí desde sus diversas e interesantes utilidades, también cabe destacar que un mismo objeto puede tener varios niveles de calidad, cosa que implicará materiales de elaboración previos de mayor valor, y un mejor rendimiento del resultado final. Ejemplos de estos casos son los aspersores, herramientas de gran utilidad que existen en tres tipos de las mismas, y cada uno puede regar un número más amplio de cultivos a su alrededor que el anterior. Una buena dispersión de aspersores en el espacio nos podría ahorrar para siempre el hecho de regar, otro de los detalles que nos muestran que Stardew Valley es un título que requiere cierta planificación para lograr explotar las prestaciones de nuestras posibilidades al máximo.
Además, también podremos crear barriles donde luego poner frutas para obtener jugos, colmenas que al cabo de algunos días generarán miel que tiene muchísimos usos, envasadoras para crear más jugos, máquinas recicladoras, queseras, mayoneseras, y demás. Inclusive podremos craftear objetos de decoración o combate, como lo son caminos de piedra/madera/cristal/ de diferentes tipos para añadir un toque estético a la granja, o por el otro lado bombas o anillos con los que hacer frente a los monstruos en las minas, aunque esto ya haya sido explicado. 
La cuestión es que el crafteo en Stardew Valley tiene un sistema sencillo de entender, que a su vez posee una cantidad de posibilidades inimaginables sin que ninguna se sienta desaprovechada, mal implementada o innecesaria. Esta última apreciación habla de un diseño de videojuegos exquisito y cuidadísimo.
Bien, en este videojuego también tenemos unas actividades secundarias que muchas veces toma un rol protagónico, aunque su existencia en nuestra experiencia es aún más opcional que las anteriormente mencionadas: la ganadería.
Para tener animales en nuestra porción de terreno deberemos construir un establo y/o un corral, cosa que lograremos llevando los materiales y dinero necesario al albañil mujer del pueblo. Ambas edificaciones pueden contener distinto tipo de animales, aunque las dos también pueden mejorarse a establo/corral "grande", y luego "de lujo". Cada mejora que apliquemos requerirá de nuevos materiales y un mayor monto de dinero, que a cambio nos permitirá colocar más y diferentes especies de animales. 
Tenemos vacas y cabras que producen leche, que al depositarla en una quesera nos otorgará queso de vaca o cabra, cerdos que desentierran trufas, que al dejarlas en una aceitera nos dará aceite de trufa, gallinas y patos que colocan huevos, útiles para obtener mayonesas de gallina o pato gracias a una mayonesera, y ovejas y conejos cuya lana virgen puede emplearse en crear tela mediante un telar.
Todos estos objetos son buenos productos para vender, consumir, elaborar, etcétera. Así, la ganadería se convierte en una inversión algo costosa pero 100% segura.
Los animales por su parte exigen cuidados especiales. Sacarlos a comer hierba durante el día, acariciarlos, mantenerlos calientes durante el invierno con un radiador, son algunas de las cosas que harán que nuestra amistad con el animal incremente, al igual que su estado de ánimo. La amistad se ve representada en una cierta cantidad de corazones, que de ser alta hará que el animal nos otorgue un producto de mejor calidad. 
Aquí también podemos hablar de los silos, otra edificación construible que juega un papel importante en esta actividad, ya que son los encargados de almacenar heno y dejarlo automáticamente en el establo y/o corral. El heno no es de preferencia animal debido a que ese puesto es ocupado por la hierba, pero sí funciona de alimento en días de lluvia o estaciones friolentas donde estos seres no salen a ver la luz del día.
Otras estructuras que podemos construir siguiendo el mismo método, además de establos y corrales, son molinos, aljibes, cabañas vacías para decorar ya que hay una cantidad absurda de objetos de decoración, tanto de interiores como de exteriores, que nuevamente aportan una terrible suma de horas al título únicamente abocadas a la personalización estética de cualquier parcela de terreno que nos corresponda, también es posible crear una cuadra para tener un caballo con el cual nos desplazaremos más rápidamente, que a su vez no dispondrá de ninguno de los cuidados anteriormente mencionados, entre un largo etcétera de más edificios cuya existencia es completamente justificada y está lejísimos de sentirse como mero relleno a la experiencia. 
Con esta persona también existirá la posibilidad de mejorar la casa, que solamente consiste en expandirla añadiendo nuevas habitaciones como lo son una cocina, una sala de juegos, una bodega y demás. Luego, el jugador puede colocar los objetos a su gustos como ya mencioné hace un par de renglones, siendo para mí un añadido interesantísimo de este maravilloso Stardew Valley. 
Ahora voy a hablar un poco del pueblo, exceptuando el tema de la relación con los personajes que lo componen debido a que ya ha sido tocado.
El pueblo es una parte importante de Stardew Valley ya que aquí podremos comprar prácticamente todos los productos que necesitemos, además de ser el lugar donde tendremos un tablón de anuncios donde vamos a ver el calendario para corroborar los cumpleaños de las inteligencias artificiales, y las fechas festivas en pueblo Pelícano. Los festivales son eventos específicos donde la pequeña ciudad se decora entera de una misma temática, se venden materiales especiales y únicos, además de realizarse acciones que no podrían ser posibles en otros días. 
En los días normales, cada tienda abre y cierra a un horario, además de haber días en las que no todos los locales abren.
El pueblo sin dudas es uno de los puntos más fuertes de Stardew Valley, que además de ser muy pintoresco, le aporta profundidad al título y un soplo de aire fresco a la experiencia, resultando aún más carismática. 
Otro de los factores que componen esta maravillosa jugabilidad son las misiones, que si bien nos desvelan un poco del lore de Stardew Valley y abren nuevos caminos, están relegadas a un plano secundario de la experiencia ya que su realización no nos trae claros beneficios. 
En algunos amaneceres cuando salgamos a nuestra granja, veremos al costado derecho de la cabaña un buzón que, cuando tenga un ícono de mensaje arriba, podremos comprobar y así aceptar una nueva misión que se almacenará en nuestro diario y podremos realizar en cuanto queramos. La mayoría de encargos constan de obtener cierto objeto y llevárselo a X personaje, con el fin de obtener una recompensa monetaria o el acceso a nuevos lugares de un mapa lleno de sorpresas. También existen otros objetivos en las mismas, pero generalmente son bastante sencillas de realizar y de comprender, aunque una vez más el videojuego incita a tomarse toda la aventura con calma, no hay apuro de absolutamente nada, y que un título con semejante cantidad de información, de contenido, y de actividades realizables tenga un ritmo tan bien marcado, dividido en años que a su vez se separan en estaciones cada cual con sus características definidas, con el fin de no agobiar al jugador y permitirle disfrutar de todas sus posibilidades al máximo es sin dudas lo mejor que tiene Stardew Valley, englobando a todo el conjunto del mismo y convirtiéndolo en una obra tan divertida como adictiva, además de bien pulida y estupendamente diseñada hasta en lo más mínimos detalles que logran un resultado fabuloso y una gran demostración de lo que el desarrollo independiente es capaz de lograr. 

Con respecto a los extras, hay una cantidad aberrante de pequeñas actividades y detalles que llenan al videojuego de vida, y al igual que prácticamente todas las partes que lo componen, añaden un buen número de horas.
Eventos aleatorios como la caída de un meteorito en nuestra granja (que no causará mayores estragos) y es una fuente estupenda de iridio, o un hada que vendrá por la noche para hacer florecer nuestros cultivos prácticamente al instante.
En cada fragmento de texto el videojuego nos quiere decir algo, intenta mostrarnos constantemente un nuevo secreto de los tantos que tiene en su haber de una manera sutil y bien medida, además de que cada uno es muy interesante e inclusive enriquece la experiencia del jugador. 
De hecho, Stardew Valley nos da una sensación de, conforme avanza la aventura, estar en constante descubrimiento. Es una locura como con ochenta horas de juego, además de poder jugar otras ochenta más tranquilamente, uno puede seguir descubriendo cosas por hacer y en las cuales se puede profundizar más y más. En determinado momento hay una carga excesiva pero magnífica de recados que cumplir, siendo este el momento donde el videojuego comienza a tragarse por completo el tiempo de su comprador. 
Además de todo esto también está el centro cívico, que se nos presentará como un lugar destruido pero que podremos reparar con la ayuda de unos extraterrestres muy simpáticos, que además nos darán premios gigantes conforme realicemos sus encargos.
Los mismos constan de completar una serie de seis bundles mayores, que particularmente están conformados por bundles menores. El objetivo es llenar los casilleros con los objetos correspondientes para obtener las recompensas de los bundles menores, y una vez realizados todos recibiremos una única recompensa que se obtiene al completar el bundle mayor. Entre estos premios se encuentra, por ejemplo, el invernadero. 
Además, por finiquitar cada uno de los seis bundles que existen, las salas del centro cívico se renovarán y una vez hayan sido todos directamente completados el edificio entero volverá a estar en buenas condiciones. 
Como si fuera poco, Eric Barone anunció que Stardew Valley recibirá múltiples actualizaciones que continuarán ampliando el abanico de opciones jugables, desde nuevos objetos, nuevos eventos en el pueblo y demás, e inclusive la inserción de un modo multijugador que podría ser un añadido interesante para tener un modo de juego que a día de hoy parece imprescindible en cualquier proyecto salido de esta industria. 
Con esto interpretamos que estamos ante un título enorme que se seguirá expandiendo con el tiempo, por lo que se asemejará más a un producto como servicio que, por el momento y muy probablemente, será gratuito. Y si lo cobrasen sería justificado, debido a que esta obra se encuentra a un precio muy reducido en la totalidad de plataformas en las que se encuentra disponible. 
Además, tenemos la página oficial de Stardew Valley donde encontraremos foros de la comunidad, incluyendo una wiki que en un videojuego con tantas opciones es imprescindible de ver para que nuestra experiencia no sea prácticamente imposible de explotar satisfactoriamente. En este sitio de internet también nos podremos comunicar con los desarrolladores, y observar qué bugs han sido resueltos en los últimos parches, divididos por cada versión de cada sistema, para más exactitud. 
Por último creo que vale la pena destacar que Eric Barone realizó unas declaraciones en las que afirmaba que Stardew Valley tenía un secreto muy oscuro que estaba tan escondido que dudaba que algún jugador pueda descubrirlo. Con esto claramente está logrando que muchas personas se compren el videojuego únicamente para superar este reto, además de conseguir que muchos otros lo retomen con la misma meta.
Aun así, es muy difícil aburrirse en Stardew Valley, por no decir imposible. En lo personal, como ya dije pero vuelvo a repetir, llevo ochenta horas en esta maravillosa obra y mantengo la sensación de que podría seguir jugando hasta el hartazgo. Es maravilloso. 

A modo de conclusión, pienso que Stardew Valley es una obra apta para todo el público que guste disfrutar de un buen videojuego. Vendió muy bien para ser un indie, pero sin embargo me sigue pareciendo que está infravalorado; además de que ahora el título cuenta con un parche que añade el idioma español en todas las plataformas. 
La obra de un único desarrollador es un trabajo mastodóntico que contiene una cantidad aberrante de opciones para hacer un número prácticamente indefinido de actividades que lo convierten en un videojuego con un principio pero sin un final, ofreciendo una suma de horas infinita que se ven potenciadas por un apartado técnico que tiene encanto y gracia. Si a esto le sumamos que el título continuará siendo dotado de contenido, claramente estamos hablando de un producto con una vida útil muy extensa.
Stardew Valley encuentra su mayor virtud en la tranquilidad con la que está planteado desde un comienzo, con el fin de dejarle en claro al jugador que toda esa cantidad de información puede ser ejecutada según los tiempos que él mismo maneje.
Stardew Valley es uno de mis videojuegos preferidos, y creo firmemente que hay pocas compras correspondientes al mundo de los videojuegos tan seguras como esta última, realmente.