Belanner / 5 de diciembre de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

7,5 Bueno

La alternativa definitiva a Hearthstone da un inexplicable paso hacia atrás 
Gwent ha supuesto desde su beta cerrada la alternativa definitiva a Hearthstone. El juego de CDProject es un juego que destaca por ser prácticamente el polo opuesto al juego de cartas de Blizzard, que ha sido desde sus inicios una versión más dinámica y casualizada de las Magic en formato de videojuego F2P.
Y con polo opuesto me refiero a que es un juego de difícil acceso y que gracias a sus originales mecánicas, te permite casi sacar lo que quieras cuando quieras en función de la estrategia que quieras tomar, dando así una importancia enorme a la estrategia y una mínima al azar.
  
Al contrario que en modelos tipo Magic como Hearthstone, Eternal, TESL, Fable Fortune y un largo etcetera,  aquí no hay valores como "fuerza", "resistencia" o "coste de maná", igual que no hay "vidas" que quitar al rival para vencerlo. 
Este juego pasa de todas esas reglas y se inventa las suyas propias: aquí cada carta tiene un único valor numérico que es tanto su fuerza como resistencia, así como puntos para ganar. Y para ganar hay que acumular más puntos en mesa que el rival (que son la suma de todos los numeros de todas tus cartas en mesa).
Tremendamente sencillo en la teoría, pero realmente complicado en la practica debido a la imprevisibilidad de no haber una curva de maná que dicte qué es lo más probable que vaya a sacar el rival cada turno.

Esto es algo que se ha ido puliendo a lo largo de sus dos años de beta, dando lugar a un juego pulido y muy atractivo para el que busque una alternativa a Hearthstone.


El problema viene con la salida oficial del juego, a la que se le ha llamado Homecomming, y es que de forma innentendible, CDProject ha realizado un gigantesco rework a las cartas y las propias reglas del juego al punto de que el juego que se ha lanzado tiene que ver lo justo con lo que se ha venido jugando durante dos años de beta. Tales son los cambios que no hay ni una carta igual a la beta: lo único que no ha sido alterado son las ilustraciones.

Esto es ya de por si bastante molesto, pero lo es aún más el hecho de que CDProject ha decidido aumentar significativamente el peso del azar, quitandole al juego complejidad y estrategia, y es que actualmente apenas hay cartas que busquen otras cartas (algo que anteriormente era el pan de cada día, y lo que permitía jugar lo que quisiéramos cuando quisiéramos), así como ha reducido el máximo de copias de una misma carta de 3 a 2, dando lugar a muchas menos probabilidades de encontrar lo que deseamos.
De igual manera que antes podías tener un máximo de 4 legendarias y 6 épicas en el mazo, igualando así a todos los jugadores y no dando lugar al típico mazo top lleno de legendarias como ocurre muchas veces en Hearthstone (Cubelock, Kazakus, Reno, Priest DK o Control Warrior son buenos ejemplos de ello)... y sin embargo ahora debido al nuevo sistema que han impuesto en la creación de mazos, esta situación se puede dar de nuevo.

Como guinda, hay varias cosas que han modificado muy para mal.
Ahora la interfaz no tiene tan bien señalados accesos como las frases rápidas y el uso del poder de líder se vuelve confuso ya que ahora no es una carta sino una habilidad que hay que activar a la vez que otra corta... además de que por alguna inexplicable razón, el turno ya no pasa automáticamente cuando no tienes nada que hacer. 
Pero de todo esto, el premio se lo lleva el que antes también se diferenciaba para bien de Hearthstone en que era facil conseguir un mínimo de un barril (los sobres de cartas) al dia, mientras que ahora tiene el mismo sistema de misiones que Hearthstone dejando la media en medio barril diario.
Eso, y que se producen situaciones surrealistas, como que un juego salido de una beta de dos años, tenga bugs nuevos y gordos (como no poder hacer mulligan si juegas con Niilfgard, al menos en la versión de GOG) porque se ha cambiado el juego entero. Seguramente estos bugs se solucionarán en breve, pero no deja de ser un sinsentido.


En definitiva: es un pedazo de juego (para mi gusto el único que puede mirar de tú a tú a Hearthstone), pero que de manera inexplicable (¿¿para que haces una beta de dos años si luego decides el último dia cambiar todo lo testeado hasta ahora??) ha perdido muchísimo respecto a lo que era en su versión anterior (si se hubiera mantenido como en la beta le habría dado un 10 como un castillo). Quizás en algún momento haga un segundo analisis si veo que cambia, pero a dia de hoy, el sabor es tremendamente agridulce por todo lo mencionado.  

Aún así, muy recomendable para el que busque una auténtica alternativa a Hearthstone en cuanto a mecánicas y complejidad, que pese a lo perdido, sigue siendo más enrevesado y diferente que el resto de videojuegos de cartas que seguramente guste mucho más a los nuevos jugadores que a los veteranos de la beta que pudieron probar un mejor juego menos casualizado y monetizado y con mucho menos factor azar... y en definitiva mejor.


P.D: Esto lo escribe un jugador de Gwent de Xbox One desde su beta cerrada hace 2 años, que posteriormente lo jugó mediante crossbuy en Windows Store y desde hace un mes lo juega en GOG a su versión final.