Barbapapa / 22 de julio de 2023 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

El oso y el lobo
Con la primera entrega fui uno de esos escépticos a los que de entrada no le convencía para nada el nuevo enfoque dado a las aventuras de Kratos, aunque a medida que avanzaba en ella me enamoré de su universo y me convenció de principio a fin. Y una cosa me dejó clara, era un God of War de los pies a la cabeza.
Mis expectativas con esta continuación no podían estar más altas, situación que no suele acarrear buenas consecuencias... pero no, en este caso incluso se han visto superadas, algo de lo que me alegro enormemente.

A nivel artístico es insuperable, con una atención al detalle enfermizo, especialmente me dio por fijarme en el repujado y la decoración de las armas y armaduras. Lo que afea un poco es el abuso que hace de la típica situación de paso por un lugar estrecho en el que se aprovecha para cargar el siguiente escenario, un lastre heredado de la anterior generación de consolas.
La banda sonora mantiene el estilo orquestal con unos temas que sacan tu furia interior. Pink Noise vuelve a realizar un trabajo excepcional con el doblaje al castellano, destacando un Rafael Azcárraga soberbio que le da un plus al asesino de dioses.

Jugablemente me ha parecido maravilloso, ya que pasándolo en su nivel más alto de dificultad he disfrutado como un loco aprendiendo los patrones de ataque de los enemigos más duros para así saber cuando y como enfrentarme a ellos. Salvo por un último combate que es totalmente opcional afrontar, me deja la sensación de que se ha conseguido un mejor ajuste que en la entrega original.
Pese a que predomina la acción, también hay tramos de relax en los que se prioriza los diálogos entre personajes con la intención de conocer mejor sus motivaciones que se pueden hacer un poco largos o pesados dependiendo del jugador; a mí me gustan. Lo que ya no me agradó fue encontrarme con algún que otro fallo como en una misión donde mi acompañante desapareció y no fui consciente del error hasta que lo necesité para resolver un puzle, aun cuando escuchaba su voz el jodido no aparecía por ningún lado.

A pesar de que han pasado unos pocos años desde la muerte de Baldur la trama más o menos retoma ese punto, algo lógico viendo por donde van a ir los tiros. En esta ocasión nos tocará explicarle un par de cosas a la plana mayor de Asgard, a veces hay que soltar un par de tortazos para que se tomen a uno en serio.
Quizás esperaba otro tipo de final, más cerrado. Algo que me molesta es que haya secundarias que no se puedan completar hasta llegar al final de la historia principal, soy de a los que les gusta llegar al duelo decisivo con todo hecho.

No me cabe duda de que volveremos a tomar el control del Fantasma de Esparta en algún momento, lo que no tengo tan claro es de que manera, lugar y tiempo. Ya puestos, también me apostaría algo a que tendremos algún contenido extra o spin-off protagonizado por Atreus/Loki.

Guga-jofre / 21 de junio de 2023 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

El Ragnarok ya está aquí, con un broche de oro para despedir
El título de este análisis no es azaroso; tiene dos aristas entre las que se mueve el juego de palabras empleado. Por un lado, se trata de mi último periplo por PlayStation 4 tras unos maravillosos 7 años, pero también obedece al fin del camino para uno de los personajes más importantes que nos ha dado Sony, tras estar casi dos décadas en pantalla a través de cuatro consolas distintas.

Y hablo de fin del camino porque, sin hacer demasiado spoiler (están avisados de que existen, no obstante), el Ragnarok parece finalizar con ese sendero sangriento y tortuoso que ha atravesado Kratos desde el lejano año 2005. Lo vimos sufrir, pelear y matar en PS2, PS3, PS4 y PS5, hasta finalmente conseguir un poco de paz y redención en su vida, algo que con más luces que sombras consigue al final de la aventura que nos compete. Ahondaremos en esto más adelante.

De God of War: Ragnarok poco se puede decir que no tenga la palabra sobresaliente como adjetivo predominante. Es una de las reliquias que cualquier jugador debe tener en su habitación, y un imprescindible para todo aquel que gusta de aventuras con buena jugabilidad y un guión de película. Además, deja la vara bastante alta (al menos en PS4, la versión que disfruté) respecto a toda clase de apartados, ya sea narrativo, jugable, o visual. Difícil tener que elegir un podio, pero sin dudas, lo nuevo de Santa Mónica está en el top 10 de la generación.
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JUGABILIDAD:

Decir que God of War: Ragnarok no es continuista respecto a su predecesor sería negar la realidad. Pero que siga un baremo similar a la primera aventura es algo positivo, porque en esa oportunidad ya las cosas se habían hecho muy bien. A todo lo excelso visto hace cinco años atrás se le incorporan diferentes vertientes que enriquecen el gameplay. Por ejemplo, gozamos de un Kratos algo más ágil, lo que permite combos espectaculares que antes no podían ser realizados. Ni hablar de la introducción de diferentes acompañantes para la aventura; ya no sólo tenemos a Atreus a nuestro lado, sino que podemos luchar junto a otros camaradas con sus respectivos poderes y habilidades.

No obstante, lo más interesante recae en la posibilidad de utilizar a Atreus como personaje jugable. Se trata de un soplo de aire fresco para diferentes momentos de la aventura ya que ofrece una jugabilidad ciertamente distinta, a la par que se nos cuenta una narrativa desde una campana diferente, algo que siempre es bienvenido.

En ese sentido, el hijo de Kratos, lógicamente, no posee las habilidades cuerpo a cuerpo de su padre, pero sí es dueño de una gran elasticidad y un dominio excelso de los ataques a distancia. Jugar con el Dios adolescente se traduce así en un gameplay mucho más dinámico y liviano, y una contraposición contundente en jugabilidad respecto a lo que ofrece el espartano. 

Por otro lado, si bien no se trata de un juego de mundo abierto de manual, Santa Mónica ha rediseñado los niveles para encontrarnos con escenarios realmente vastos con decenas de actividades, en donde no van a faltar puzles, misterios y combates sangrientos. Si bien en la primera aventura esto ya era posible, en Ragnarok se multiplica incluso por fuera de Midgard, con reinos realmente gigantes como Vanaheim, Svartalheim o Alfheim.

Como última arista quiero remarcar la introducción de una mayor cantidad de “jefes finalesâ€, algo que había sido el talón de Aquiles de la primera aventura. En esta pieza que nos atañe, el enfrentamiento ante los “boss†es más común, tanto en misiones principales como en secundarias. Eso sí, las batallas continúan con el estándar establecido desde hace décadas: combate brutal, con un juego de desgaste progresivo que finaliza con la tradicional combinación de botones para ejecuciones igual de violentas y sangrientas que otrora en la Antigua Grecia.

Los únicos puntos negativos (o “flacos†para ser justos) tienen que ver con el árbol de habilidades. Si bien es un apartado que cumple, lo cierto es que muchas veces tenemos más puntos para gastar que habilidades disponibles. Sería interesante que nos obliguen a tener que elegir, como por ejemplo en Hogwarts Legacy. Además, se echa en falta, sobre todo, más variedad de customización para los acompañantes de Kratos y Atreus. 
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GRAFICOS: 

Si God of War (2018) fue puntero en su momento, en God of War: Ragnarok la cosa no es para menos. Estamos en presencia de un apartado excelso, de lo mejorcito de la anterior generación, y me animo a decir que de la actual también.

Si hay algo en lo que sobresale esta pieza de Santa Mónica es en el diseño de escenarios. Si bien el “Fimbulvetr†llegó con dureza, no en todos los reinos ha golpeado de la misma manera. Es por eso que estamos en presencia de una diversidad de biomas. Si en Midgard tenemos montañas de hielo y nieve, en Vanaheim estamos rodeados de bosques espesos y pantanos, en Alfheim cubiertos de tormentas de arena, y en Svartalheim visualizamos humedales por doquier. Esta riqueza en la flora embellece un juego, que también tiene otros puntos altos en el apartado visual.

En ese sentido, los rostros de los personajes y sus expresiones, sobre todo en las cinemáticas, gozan de un realismo notable, al punto de que no tienen tanto que envidiarles a portentos como The Last of Us II. Esto se hace visible un poco menos en Kratos -no es demasiado expresivo que digamos- aunque sí en otros personajes como Atreus, Freya o Sindri. Es fácil de entender las emociones de estos con tan solo mirarles la cara.

Por último, y al igual que sucedió en la primera aventura nórdica con ese épico y memorable combate con “el forasteroâ€, en esta ocasión la puesta en escena para las confrontaciones entre personajes de gran calibre sigue siendo top. ¿Para recordar? Uno de los primeros encuentros, en los albores de la campaña. Sublime. 
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SONIDO:

Una reseña corta y contundente: excelente, tal y como su predecesor. Si bien no hay melodías para la posteridad, lo cierto es que este apartado cumple un papel importante en determinados momentos de la aventura, esos que invitan a la reflexión tanto del personaje como del jugador; es ahí donde brilla el sonido en este Ragnarok.
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INNOVACIÓN:

Al principio de este análisis dejé en claro que estábamos en presencia de un juego continuista. Sin embargo, no por ello hay una carencia de evolución, o mejor dicho, de innovación. La primera novedad surge de la adición de Atreus como personaje jugable, algo que intuía, pero que no dejó de asombrarme cuando por fin pude comprobarlo.

Además, en esta oportunidad somos testigos de una mayor verticalidad en el combate, ya que cada escenario tiene dos o tres niveles distintos poblados de enemigos. Ni hablar de la diferencia jugable que aporta esa dinámica dual entre padre e hijo. 

Por otro lado, Santa Mónica ofrece un nuevo sistema de bloqueo. Ahora, y debido a la posibilidad de utilizar diversos escudos, cada uno de estos ofrece diferentes contraataques si son utilizados con el timming correcto. De esta forma, un arma defensiva se puede convertir en otro poderoso arsenal ofensivo.
Por último, quiero destacar la adhesión de un árbol de habilidades para personajes no jugables, así como también la incorporación del trineo como método de transporte.
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NARRATIVA/HISTORIA:

Si la primera parte narraba la aventura de Kratos y un pequeño Atreus para complacer el último deseo de Faye, en esta oportunidad el camino se forja a partir del arrepentimiento de ambos dioses por sus actos del pasado, y la búsqueda de la redención pese a los complejos tejidos del destino.

Atreus, ahora un adolescente intrépido y sagaz pero con chispazos de inmadures e impulsividad propias de la edad, está deseoso de conocer más sobre quién es él realmente y cuál es su conexión con el pueblo Jotunheim. Por su parte, el otrora Dios de la Guerra griego está harto de peleas y guerras, y su único objetivo es evitar que su hijo siga sus pasos. Esta dualidad de objetivos hará chocar constantemente a ambos a lo largo de la historia, y los obligará a tomar decisiones que engendrarán nuevas problemáticas. Además, las acciones del pasado y sus consecuencias volverán en forma de Odín y Thor, dos aditamentos espectaculares que se suman a un elenco de personajes perfectamente construidos y escritos.

En ese sentido, tanto el “Padre de Todo†como su hijo, el Dios del Trueno, se nos presentan en los albores de la aventura, y desde el primer momento estamos ante esos antagonistas que sabemos que calarán hondo en el jugador. No son los únicos personajes que harán acto de presencia, obvio, ya que volveremos a ver a viejos rostros conocidos como Freya, Mimir y los hermanos Huldra. Claro está que la aventura nos traerá más gente por conocer, algunos con un peso muy importante en la narrativa, pero no quiero contar más de lo debido.

A diferencia de la primera aventura, Ragnarok comienza fuerte y con mucha acción en la primera hora de juego. No es necesaria una introducción demasiado prolongada, porque ya conocemos a los personajes y sabemos cuáles son sus motivaciones de antemano. Eso sí, una vez que la maquinaria narrativa se pone en marcha no hay vuelta atrás; prácticamente desde el comienzo hasta el final viviremos una montaña rusa que nos tentará a quedarnos pegados al mando para ver cómo sigue la historia.

Además, no faltan giros extraordinarios y muy poco previsibles sobre el climax de la aventura; hay uno en particular -obviamente no destriparé cuál- que me dejó la cabeza dando tumbos. Simplemente espectacular. El guión se guarda tres o cuatro momentos imprevistos que hacen gala del excelso trabajo de escritura narrativa que ha hecho el staff de Santa Mónica.

Cabe aclarar, porque nunca es tarde para hacerlo, que estamos en presencia de una historia creada para una mente adulta. El guión es muy maduro y el jugador debe entender, al igual que los protagonistas, que cada derramamiento de sangre es una consecuencia que se debe afrontar. Al igual que lo fue en su momento TLOU y TLOU2, la madurez es lo que prima en esta pieza, por lo que se debe jugar a este Ragnarok sin apuro alguno, con paciencia, con reflexión, y saboreando cada detalle que nos ofrece.

Como único punto negativo respecto a la historia, quisiera remarcar dos cosas que -obvio- están plagadas de spoilers, así que advierto esto de antemano a todos aquellos que lean este análisis y deseen jugar este juego. 

Siendo sincero, el final de Thor y Odín me pareció muy fugaz para los estándares que maneja la franquicia. No digo que no haya estado bien argumentalmente -sobre todo la del Dios del Trueno, que tiene más sentido- pero creo que se pudo haber sacado más jugo. En ese sentido, el “Padre de Todo†fallece en manos de Atreus tras un combate que -siendo honestos y tras haber jugado en la dificultad difícil- no es tan complejo como cabría de esperar. Es que, más allá de querer saber más sobre sus motivaciones (nunca se especifica qué misterios revelaba la grieta) esperaba, tal vez, una resolución más similar a la de Zeus. 

A su vez, no entendí el cambio de opinión tan repentino de Sif. A mitad de la aventura se nos muestra a una mujer arrogante y con mucho resentimiento hacia Atreus y Kratos -ambos asesinaron a dos de sus tres hijos en el pasado-, pero sobre el final de la misma vemos a una persona sumisa y conforme pese a perder a su esposo y hogar de forma dramática. Me pareció bastante forzado, a decir verdad.
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En conclusión, God of War: Ragnarok es UNA OBRA DE ARTE imprescindible para aquellos que se deleitaron con la primera aventura, y una muy pero muy recomendable adquisición para todo jugador ajeno al Dios de la Guerra griego y que busque un videojuego con buena jugabilidad y narrativa en tercera persona.

Como expuse en este análisis, hemos presenciado -creo- el final de Kratos como protagonista de una franquicia, que podría finalizar aquí, o bien tomar otros rumbos en el futuro (Calienta Atreus, que entras). Uno de los mayores “Próceres†de Sony se despide de una generación de jóvenes y adolescentes -hoy ya adultos, como en mi caso- que ha vibrado junto con él por más de 15 años. Y con esta pieza también me despido yo, pero no del gaming sino de la PS4, que me ha dado mucho jugo durante 7 años y ahora le da paso, por fin, a su sucesora.
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LO BUENO: 
- Atreus como personaje jugable es un soplo de aire fresco.
- Continuista respecto a la primera aventura en términos de jugabilidad. Y eso es una buena noticia.
- El gameplay es más dinámico y algo más liviano respecto a su predecesor.
- Mayor verticalidad en el combate.
- Nuevo sistema de bloqueo.
- Más y mejores batallas ante “bossâ€, tanto en misiones principales como en secundarias.
- La introducción del trineo como nuevo medio de transporte para determinados tramos de la aventura.
- La introducción de diferentes personajes que ofician de acompañantes del jugador.
- El árbol de habilidades ofrece más posibilidades, tanto para los personajes jugables como para aquellos que son acompañantes.
- Gráficamente es el techo de la anterior generación, y por el momento, uno de los estandartes de PS5 en este apartado.
- Los rostros de los personajes y sus expresiones están en un nivel altísimo de realismo; casi que compiten con TLOU2.
- La densidad de biomas en los diferentes escenarios jugables.
- El sonido no brilla, pero cumple un papel importante en determinados momentos de la aventura.
- El juego brilla narrativamente; de las historias más maduras del catálogo actual.
- La dualidad de Freya y Thor, dos personajes muy bien escritos y llevados a la pantalla.
- Odín es un personaje sádico, arrogante e inteligente como pocos, tal y como se nos había planteado en la primera aventura.
- La construcción de personajes secundarios de mucho fuste. 
- La lucha contra el destino como plot principal de la historia.

LO MALO: 
- El árbol de habilidades tiene poca variedad y pocas herramientas para mejorar.

Jaime83 / 1 de mayo de 2023 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

Tremendo juegazo! Lo mejor de 2022
Nunca hago análisis. Acabo de terminar de sacar el platino y solo quiero escribir 4 líneas para dejar constancia del juego tan increíble que acabo de jugar. Mejora en todo al del 2018: gráficos, combates, música, creación de personajes... Y la historia.... Los pelos de punta con el final.  Si, como yo, eres padre, alguna lágrima asomará por tus ojos. 
Qué maravilla. 
Obra maestra. 
Sin más. 
Por último solo añadir que me da pena la cantidad de gente que se pierde estas experiencias por no ser jugador... cuánto talento hay hoy en día en este medio.

Ravana / 10 de febrero de 2023 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Imprescindible pero...
Le doy un 9,5 porque estamos ante una obra colosal y eso es indiscutible pero hay cosas que no me han gustado. 
En el apartado gráfico por ej. los paisajes están muy bien pero el modelado de los personajes deja bastante que desear, algunos parecen muñecos de cartón y están más cerca de lo que hemos visto en los Fallout que en lo visto en TLOU2 por ej. Los entornos, a pesar de lucir muy bien, no siempre son explorables y en muchas ocasiones avanzas a través de un pasillo muy disimulado. 
Del sonido y  la banda sonora no tengo nada negativo que contar, me parece sobresaliente.  En cambio los diálogos son muy cansinos, con expresiones a veces demasiado " modernas" para la naturaleza de los personajes. 
La jugabilidad es desigual, los combates suelen ser bastante sencillos pero con picos de dificultad en ocasiones exasperantes. Espectacularidad tienen, muchas veces no sabes si estás en medio de una pelea o pintando un cuadro: fuegos artificiales, lucería, polvos de colores, no parece tragedia, es pura fiesta.
Histora: una ida de pinza en toda regla, unas movidas de padre y señor mío, todo muy incoherente. Necesito algo de coherencia para meterme en la historia. Tú ves al Kratos en el combate con Thor ahí en plan super saiyan y después cuando vas a explorar con el es como un mandril ahí colgado de una viga para superar una estructura de madera, que te preguntas: para qué carajo tienes el hacha? Revienta esa mierda y tira para adelante pero nada, cosas que no se entienen pero bueno, si partimos de que un dios vive en una choza de madera ya solo con eso nos podemos esperar cualquier cosa. Todo aparentemente muy dramático pero después te la pasas de un lado para otro abriendo cofres y haciendo recaditos. Así con todo las partes de exploración y de ir a tu bola resultan las más entretenidas porque la parte de la historia es un pasillo con todos los eventos programados de modo que no tienes ninguna libertad y llega a hacerse cansino, sobre todo cuando vas con Freya que parece la típica feminazi desquisiada. Puro asco tan grandísimo de personaje se han trabajado, en ese aspecto prefiero mil veces el anterior que ibas siempre con Atreus, el cual, por cierto, no era tan flipao como en esta entrega. 
Dicho todo esto, es un juego que hay que tener porque es de ese tipo de obras que solo salen cada dos o tres años pero podría haber sido mucho mejor si se hubiesen marcado un TLOU2 y hubiesen arriesgado en lugar de tirar por el camino de la ñoñería (juego, al final, para niños).

Fedex18 / 31 de enero de 2023 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

8 Muy Bueno

Sabor extraño
Disfruté el juego pasandolo con un amigo pero no era el final que no esperabamos, como incompleto, tal vez por todo el post game que tiene este god of war y no el anterior, ya que nos pareció un mejor final. En fin, contentos de pasarlo y veremos como sigue esta franquicia, mucha curiosidad.
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Jordicule / 28 de diciembre de 2022 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Fimbulwinter, profecías y Ragnarok
He de reconocer que llegué tarde a esta saga y debuté  ya con el GOW (2018), que me cautivó, e hizo que esperara este Ragnarok como agua de mayo, así que venía con las expectativas altas.

En primer lugar decir que ya se intuía que iba a ser muy continuista respecto al anterior, y de hecho así es, pule algunas mecánicas de combate, añade novedades importantes jugables, mejora el diseño de niveles y gráficamente eleva el nivel, pero la esencia es la misma. 
Así que si te gustó el del 2018 te va a gustar este, y si no es el caso no tienes nada que hacer. 

En lo que respecta a la historia tengo que decir que tengo sentimientos encontrados. Por momentos me gusta más el anterior y en otros me parece superior este. 
Mientras que su antecesor tiene un aura más solemne, este es más coral y grupal, dando más importancia a más personajes aparte de Kratos y Atreus, sin olvidar la relación paternofilial de estos, siendo Atreus más adolescente ya, y cayéndome mejor también. 
Teniendo momentos épicos y emocionantes, el final me dejó un poco frío tanto por el combate final, como por algunas decisiones narrativas. Aún así Odin me ha parecido un personaje espectacular, Thor también me ha gustado mucho y tanto Freya como Brok y Sindri han ganado mucho protagonismo de forma muy acertada. 

En el aspecto jugable el combate es como el del 2018 pero más refinado, más rápido y con más opciones, igualmente visceral y una delicia, en mi opinión el combate que más he disfrutado en un videojuego. También tenemos los clásicos puzzles, cofres de las normas, sellos...una exploración muy buena aunque quizás excesivos cofres lo que hace que se pierda la emoción de ver que habrá dentro. 

A nivel sonoro me parece un escándalo con una banda sonora exquisita y un doblaje excelso como nos tiene acostumbrados ya Sony. 

En definitiva, me lo he pasado en grande en las más de 50 horas que me he tirado entre contenido principal y secundario y que no me ha decepcionado lo más mínimo, en mi pensamiento está rejugar el anterior y este del tirón para que el viaje y la aventura sea completo. Un imprescindible del catálogo de PlayStation sin lugar a dudas.

Rabangel / 26 de diciembre de 2022 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Sobresaliente
HISTORIA: Es imposible dejarla, su complejidad va en aumento y ningún personaje queda afuera. Es vital realizar las misiones secundarias, aunque el contra efecto es que son muy largas(pero no malas), por lo que la misión principal se nos va haciendo cada vez más lejana de terminar.
JUGABILIDAD: Nuevas Innovaciones a lo que ocurrió en el 2018(al principio parece sólo un DLC de éste), pero a medida que avanza el juego se pueden hacer muchas más cosas lo que es impresionante, ya que no sólo aumenta la calidad de las batallas, sino también de los puzzles.
GRAFICOS: Prácticamente sublime en todo sentido. No hay paisaje, escena, batalla que no goce de majestuosidad. Realmente hermoso de verlo en la mejor calidad posible que se disponga. Además mejoras pequeñas como los colores de los elementos, que antes eran bastantes más oscuros.
SONIDO: Con la música de principio, que te parte el alma apenas das inicio al juego, viene una banda sonora y efectos acorde al producto en general.
NEGATIVO: Quizás las ayudas de los personajes secundarios, que te permiten resolver los acertijos muy rápidamente. También algunos diálogos de Kratos que terminan dándole un aspecto de pesadez al personaje(la intención es que sea denso, pero a veces se recalca mucho)

Dabo3K / 16 de diciembre de 2022 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

8,5 Excelente

Más de lo mismo
Historia predecible pero buena, gameplay repetitivo pero sistema de lucha impecable, mínima innovación pero funciona. 
Estamos delante de uno de los mejores juegos de año, pero se queda lejos de ser el mejor. 
Durante todo el tiempo estaba deseando que llegaran las cinemáticas porque durante el juego solo sueltan lore de relleno que se interrumpen cada vez que quieres continuar a pie. 

En definitiva, buen juego pero podría ser un DLC del anterior.

Danycara / 14 de diciembre de 2022 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

El juego que merece un dios
Escribo este analisis para describir desde mi
Perspectiva lo increiblemente bueno que es este juego.
Al principio me parecio un poco mas de lo mismo
Pero a raiz que vas avanzando el juego te va dejando poco a poco sin palabras. Mejor en los combatesâ€con lo que eso significa†una historia mas larga que te tiene pegado a la pantalla continuamente y unas zonas de munsdo abierto con misiones secundarias que simplemente te dan ganas de hacerlas todas. Hay misiones secundarias que me han enganchado mas que la propia historia y hay una variedad de monstruos y peleas increibles.
En lo visual es un juega claramente de ultima generacion y en lo sonoro tiene un doblaje al castellano perfecto.
Por todo esto god of war me parece un juego a dia de hoy que roza la perfeccion , de esos que pasara tiempo hasta poder olvidar esta obra maestra.
Gracias santa monica por regalarnos este juego , ojala haya mas en el futuro.

Flost / 6 de diciembre de 2022 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

GOTY 2022, tardaremos años en ver algo de un calibre similar
Pocos juegos rozan la perfección como lo hace este título, obviando la parte técnica de la cual no vamos a hablar porque es increíble (Gráficos, jugabilidad, diseño artístico, doblaje, optimización, etc.) quiero hablar (Sin spoilers) de lo que realmente me ha llevado a ponerle un 10 sobre 10.

El comienzo del juego es algo inusual, empieza tan brutalmente bien con un ritmo tan alto, que a las 2 horas de jugar lo que en otro título te estaría pareciendo un buena historia, aquí sientes que pega un bajón, pero si te pones a pensar no es que el modo historia haya ido perdiendo calidad, si no que esa sensación realmente te la produce los primeros compases del juego.

No obstante, llega un punto en la historia principal en el que simplemente no puedes dejar de jugar, la inmersión es tan sublime que literalmente parece que estás viendo tu película favorita por primera vez. Los personajes tienen muchísimo carisma, y no solamente hablo de Kratos o Atreus, si no las mini historias que cuentan sobre los personajes secundarios que hacen que sientas afecto por ellos, incluso con los que aparentemente son malos. 

Realmente te hace reflexionar sobre que está bien o que está mal, ya las cosas que hace cada personaje independientemente de que sea de nuestro bando o del contrario hay una razón sólida detrás del por qué lo hace.

En conclusión, me gustaría no comparar con otros videojuegos lanzados este año, pero como he dicho en el título del análisis, para mi GoW Ragnarok está un peldaño por encima de cualquier título lanzado en 2022 (Sin haberlos jugados a todos he de decir) y es claro merecedor de los premios GOTY 2022