EA Sports revitaliza su veterana (y olvidada) saga de snowboarding, SSX, con una nueva entrega muy apetecible para los fans de los deportes extremos en general. Descubre lo que significa la palabra adrenalina deslizándote por las montañas más peligrosas del planeta.
Los amantes de los juegos de snowboard viven una época bastante desfavorable. Atrás quedan los tiempos en los que sagas como 1080 Snowboarding (franquicia a la que muchos echamos de menos, por cierto), Shaun White Snowboarding, Freak Out, Snowboard Kids o la misma SSX copaban el mercado con entregas más o menos frecuentes, algo que ha caído en el olvido. Por fortuna para dicho grupo de usuarios, EA Sports ha querido recuperar esta misma franquicia que tan buenos ratos nos hizo pasar hace ya algunos años, edición que supone una grata sorpresa para los usuarios de PS3 y Xbox 360.
Montañas traicioneras
Aunque a más de uno pueda sorprenderle por el género al que pertenece SSX, lo cierto es que sus desarrolladores se han molestado en crear un argumento que respalda todas las emociones que nos hace vivir este juego. Resulta que el equipo de riders que compone SSX se ha propuesto afrontar los nueve descensos más peligrosos que existen en el planeta, meta que hasta ahora nadie ha conseguido. Sin embargo a esta iniciativa también se ha sumado Griff, un antiguo miembro de SSX que ha decidido afrontarla en solitario, convirtiéndose en nuestro gran rival a batir. Vale, no es el mejor argumento que hemos disfrutado nunca en un título, eso es cierto, pero como excusa nos parece válida.
Después de superar un curioso tutorial mientras practicamos Skysurfing, el título nos invita a probar tres modos de juego diferentes, siendo World Tour el más destacado y profundo de todos ellos. En él debemos ir cumpliendo con nuestra meta ya citada de desafiar las nueve cumbres más importantes y difíciles del planeta, pudiendo participar en cada una de ellas en una generosa variedad de eventos. Unos nos servirán como mero entrenamiento, en otros será necesario demostrar nuestra habilidad a la hora de ejecutar “tricks” o acrobacias, habrá veces en los que lo importante será deslizarnos a toda pastilla para llegar en primera posición a la meta… y como gran novedad, en los más difíciles lo único que se nos pedirá será salir con vida.
Precisamente estos Eventos de Supervivencia son los que más nos han gustado de todo el juego, ya que suponen una descarga de adrenalina casi constante. Durante estas pruebas tan especiales debemos demostrar que desprendimientos, aludes, temperaturas extremas, avalanchas y otras inclemencias naturales no son nada para nosotros (y nuestra habilidad con el pad), traduciéndose en una experiencia única.
Entre unas pruebas y otras se consigue imprimir al título una variedad pocas veces disfrutada en un juego de esta índole, lo que habla muy bien del trabajo llevado a cabo por los desarrolladores de EA Canadá.
Espíritu arcade
Fiel a su tradición, este renacimiento de SSX sigue apostando a las claras por la diversión arcade. De esta forma durante cada descenso es posible realizar saltos de varios metros de altura sin despeinarnos, rebobinar en el tiempo cuando queramos, efectuar tricks imposibles y demás acciones de fantasía que no tendrían lugar en un simulador puro.
Gracias a esto la jugabilidad es bastante flexible y es capaz de acoger a un grupo de usuarios bastante amplio, jugadores que podrán deleitarse con una mecánica de juego muy adictiva. Y es que si bien el sistema de control es muy sencillo de asimilar, ya sea utilizando los botones del pad o el stick analógico derecho, dominarlo es otro cantar. Pero cuando lo conseguimos, podemos disfrutar de unos descensos realmente espectaculares, pudiendo encadenar combos de acrobacias casi constantes, lo que nos permite activar los movimientos Tricky. ¿Y qué conseguimos con esto? Pues mayores puntuaciones y, lo mejor, poder ejecutar acrobacias aún más impresionantes y llamativas que las "normales".
Sin embargo y a pesar de este espíritu arcade, los desarrolladores también han querido insuflar un nivel de profundidad adecuado al título. Y una de las medidas que han introducido para tal fin es el hecho de poder ir mejorando el equipo (ropa, tablas, etc.). Antes de cada prueba es posible seleccionar los complementos que creamos oportunos que va a utilizar nuestro rider, existiendo sensibles diferencias entre unos y otros que debemos considerar en función del tipo de evento que nos toca afrontar. Y atentos, que esta elección puede marcar el resultado de la carrera en cuestión.
A esta magnífica propuesta que nos acerca EA Sports tan sólo se le puede achacar un defecto importante: la ausencia de multijugador real. Y nos explicamos. Al margen del ya citado modo World Tour el título incluye dos más, Exploración y Global Events. Exploración nos permite participar en las pruebas que nos venga en gana de manera independiente, mientras que Eventos Globales pretende ser una especie de modo online masivo pero limitado, ofreciéndonos de manera permanente los mejores tiempos y puntuaciones de todos los miembros de la comunidad SSX (y en tiempo real)… pero que sólo permite eso, nada de competiciones online (ni offline) entre varios jugadores. Y es una pena, porque tratándose de un juego deportivo, este defecto nos parece bastante importante.
Belleza natural
Gráficamente SSX muestra muy buenas maneras, sobre todo en lo que a la concepción de los decorados se refiere. De entrada existe una amplia variedad de localizaciones y escenarios diferentes, pudiendo observar parajes de una belleza realmente cautivadora, algo esencial en este tipo de juegos deportivos. Y es que gracias a esta vistosidad que muestran las montañas y sus alrededores cada descenso se convierte en una experiencia única, espectacular y muy apetecible, pudiendo disfrutar de la nieve en todo su esplendor.
También destaca el gran tamaño que ofrecen la gran mayoría de los recorridos. Cada pista ofrece numerosas rutas diferentes que podemos explorar y surfear, ofreciéndonos múltiples posibilidades y aumentando considerablemente la rejugabilidad de cada una de ellas. De hecho, para disfrutar de todo lo que puede dar de sí estas pistas, es necesario dedicar bastante tiempo a conocerlas.
La recreación de los personajes no es tan espectacular, pero aún así cumple con creces. En este caso se ha optado por imprimir a los riders un aire a medio camino entre el realismo y el "cartoon", lo que les confiere una personalidad muy reconocible. Pero por lo que de verdad destacan es por la vasta variedad de animaciones que son capaces de ejecutar durante cada descenso, animaciones que han sido realizadas de manera impecable.
En cuanto a su parcela sonora, SSX da muestras de una calidad excelente. La banda sonora presenta una interesante representación de temas licenciados de diferentes estilos que, en su inmensa mayoría, acompasan acertadamente cada una de las pruebas que encaramos. Y en cuanto a los efectos de sonido, se agradece la inclusión de un narrador que habla en perfecto castellano, detalle que quizá pueda pasar algo inadvertido en un juego de las características de SSX pero que es digno de ser mencionado. El resto de los efectos (gritos de los personajes, caídas, etc.) cumplen con su papel dignamente, conformando un apartado que roza el sobresaliente.
SSX es un juego de snowboard que sorprende por su calidad. Es cierto que en nuestros días apenas tiene competencia y esto allana un tanto el camino, pero eso no es óbice para no reconocer la calidad que ostenta. Los más puristas pueden no acabar convenciéndoles por su orientación y espíritu plenamente arcade, pero el resto de jugadores disfrutarán deslizándose sobre la nieve de SSX.
Electronic Arts ha resucitado a una de sus franquicias deportivas más queridas y veteranas, SSX, con una nueva edición realmente jugable y excitante. El título nos invita a superar una buena remesa de eventos en los que debemos demostrar nuestra habilidad surfeando las montañas más peligrosas del mundo. Y todo mientras disfrutamos de unos parajes realmente amplios y bellos. SI hubiera incluido modos multijugador reales tanto online como offline, estaríamos hablando de un juego sobresaliente.
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