¿Asesina, dama o esclava? El nuevo Assassin's Creed para PS Vita nos propone cambiar entre tres identidades para librar de la esclavitud a la nueva América. Una nueva lucha entre asesinos y templarios que se resuelve en un cartucho ambicioso, que se proponía exprimir el poder de la portátil de Sony al tiempo que nos ofrecía uno de los mejores "spin-off" en la serie jamás creados. Te contamos si Aveline ha conseguido la revolución en Liberation.
No han sido pocos los intentos de llevar la serie Assassin's Creed a las plataformas portátiles. Sin embargo, ninguno de ellos, incluyendo títulos como Altair's Chronicles (Nintendo DS) o Bloodlines (PSP), han llegado a la gran calidad mostrada por la saga en la presente generación de consolas de sobremesa. Por ello, la llegada de los asesinos a una máquina tan potente como PS Vita era doblemente esperada: primero, para comprobar lo que podía ofrecernos su "hardware"; y segundo, para demostrarnos precisamente que las tornas podían cambiar.
Y en cierto sentido se ha cumplido. Porque Assassin's Creed III: Liberation no es que sea una obra tan grande como sus hermanos mayores, pero sí que se ha convertido en la mejor entrega que nos ha dado Ubisoft para una consola portátil. Más en concreto, los desarrolladores de la facción búlgara de la compañía (Ubisoft Sofia), que se han esforzado por traernos -justo el misma día en que llega al mercado Assassin's Creed III- un más que competente videojuego de acción y aventura en mundo abierto.
Las claves de la franquicia están aquí perfectamente representadas, desde el espíritu "sandbox" hasta los sistemas de navegación y animaciones originales, pasando por los combates y, cómo no, por la eterna disputa entre templarios y asesinos. Es más, en esta ocasión se va un paso más allá, ya que Liberation cumple con uno de los deseos más demandados por los usuarios: tener a un protagonista femenino. Ella es Aveline de Grandpré, posee ascendencia franco africana y luchará por la libertad de la clase esclava.
Una asesina entre templarios - Guión y concepto
Para los amantes de las buenas historias, no obstante, hemos de sentenciar que no nos encontramos, ni mucho menos, ante el Assassin's Creed más interesante. La temática, relativa a una nueva búsqueda de la verdad, a la reclamación de justicia y a acabar con los aliados de la esclavitud poseía los ingredientes necesarios para triunfar. Pero no ha sido así, resultando un argumento poco más que intrascendente, sin apenas ritmo y el cual acabaremos dejando al margen para interesarnos por el sistema de juego, que después de todo es lo más importante.
En este sentido, uno de los aspectos que más llaman la atención de Liberation es su elevada sensación de mundo abierto. Cierto es que no conviene esperar algo tan complejo como lo visto en la última edición numerada, ni tampoco tan duradero, pero reconforta ver cómo los desarrolladores se han esforzado por recrear con mimo ciudades como la Nueva Orleans del siglo XVIII. Cada secuencia en el juego se corresponde con una región (ciudad, bosque, pantano...), no existiendo un nexo entre partes. El paso del tiempo tampoco está representado, de forma que la hora viene más bien predeterminada por la misión que estemos jugando.
Detalles importantes, pero que no logran enturbiar la experiencia "sandbox", dotada de un carácter vivo, con cantidad de habitantes yendo de aquí para allá, incluyendo animales (menos los caballos). La extensión del mapeado, por supuesto, es más limitada que en Assassin's Creed III, pero aún así sorprende lo que es capaz de mover una máquina tan pequeña como PS Vita. Verdaderamente, y ateniéndonos a las características del dispositivo de Sony, no tenemos más que halagos.
Contra la esclavitud - Misiones
Además, hay cantidad de cosas que hacer. Podemos comprar en tiendas, robar a transeúntes, encontrar las tradicionales atalayas y hasta comerciar con otros países, enviando barcos en la que se plantea como una especie de minijuego estratégico (ideal para incrementar nuestra fortuna). Y si os lo preguntáis, carecemos de secuencias a bordo de navíos. Lo máximo será llevar nuestra propia canoa o incluso un carruaje, suponiendo pequeños interludios que ayudan a incrementar la variedad del programa.
Pero lo realmente importante, como en cualquier Assassin's Creed que se precie, son las misiones. Es relevante recalcar que Ubisoft Sofia no ha prestado gran interés a añadir tareas secundarias, algo que limita considerablemente la rejugabilidad del videojuego. Eso sí, misiones relativas a la historia hay una cuantas y cumplen bastante bien, con planteamientos variados que nos invitan a tender emboscadas, provocar pequeñas revueltas y, cómo no, acabar con enemigos sin ser vistos.
Eso sí, tal vez no tengamos muchos eventos adicionales, pero sí que hay cantidad de objetivos secundarios dentro de las misiones, del estilo de completar la tarea dentro de un plazo de tiempo o sin levantar sospechas. Si lo conseguimos, nuestra tasa de sincronización en esa secuencia será del 100%. Si no, y esto es de gran importancia, siempre podremos repetir la misión en cualquier momento (desde el menú de juego) para cumplirla como lo haría un auténtico asesino.
La contemporánea de Connor - Navegación y combate
Otro de los aspectos que más sorprenden en Liberation es la enorme fidelidad que mantiene en lo que se refiere a los sistemas de navegación y combate originales. Puede que si nos fijamos en los detalles, ciertos aspectos no estén tan pulidos ni sean tan profundos, pero en esencia están completamente basados en todo lo visto en Assassin's Creed III, algo que incluye a la integración de escenarios con árboles y una mayor versatilidad en lo que a enfrentamientos con enemigos se refiere.
Empezando por la navegación, Aveline demuestra un instinto asesino que ya todos conocemos, relativo a moverse con soltura no sólo por las calles (haciéndose paso con naturalidad entre los NPCs), sino también por tejados y azoteas, haciendo de la escalada un talento innato y muy intuitivo en términos de control. Lo mismo ocurre cuando subimos a árboles y nos movemos entre ramas. Todo se realiza de forma extraordinariamente orgánica gracias a un sistema de animaciones heredado de Connor, el cual se ha integrado tal cual, y no sin nuestra sorpresa, en esta versión portátil.
No podemos decir lo mismo de las batallas, un escalón por debajo de otros títulos de la saga, pero al menos mantiene el tipo. La posibilidad de que un segundo rival nos sorprenda está aquí presente, y eso es también de agradecer, pero creemos que el ritmo global de las contiendas podría haberse incrementado... o al menos su variedad. En ocasiones, todo se reduce a esperar y pulsar cuadrado en el momento adecuado. Sí, es posible usar dardos envenenados y hasta rifles, pero eso no logra disimular la simplicidad que destila el sistema combativo.
Asesina, dama y esclava - Las identidades de Aveline
Hasta ahora hemos estado hablando de aspectos que ya tenían otros Assassin's Creed. Pero, ¿qué hace diferente a Liberation? El secreto lo encontramos en Aveline, una protagonista femenina, pero no una cualquiera, sino una con tres identidades distintas. De esta manera, en el título vamos a poder ser asesinos, faltaría más, pero también vestirnos de dama o de esclava. Algo de vital importancia, puesto que cada rol implica un estilo diferente. De hecho, tendremos misiones que sólo se podrán completar con una determinada identidad.
Creemos que tras unas horas, y como nos ha ocurrido a nosotros, acabaréis pecando de utilizar la identidad asesina, al poseer mayor fuerza en combate y una gran agilidad para el desplazamiento por el mapa. Pero la esclava no se queda atrás. Cierto es que su capacidad ofensiva es algo menor, pero puede ocultarse entre grupos de trabajadores (que no son pocos), así como provocar revueltas. En cuanto a la dama, la verdad es que con los tacones no corre mucho, y si es atacada recibirá más daños, pero a cambio puede sobornar a personajes, flirtear con caballeros y usar una letal sombrilla para acabar sigilosamente con sus víctimas.
Esto, en principio, abre un abanico de posibilidades de lo más interesante, y es algo que se manifiesta en unas misiones dotadas de variedad. En ocasiones se nos pide que hasta intentemos usar las tres identidades en una misma misión, algo que es posible gracias a los vestidores repartidos a lo largo del mapeado (los cuales podremos ir desbloqueando a cambio de unas cuantas monedas).
Asesinato táctil - Las funciones únicas de PS Vita
Un aspecto muy ligado a las identidades es el sistema de notoriedad, encargado de vigilar cuál es nuestro estado de búsqueda en el mapa del juego. A este respecto, la principal novedad consiste en que la notoriedad es diferente para cada una de las tres identidades (asesina, dama y esclava), y que para reducirla deberemos arrancar carteles en el decorado, acabar con testigos y sobornar a jueces con dinero.
Nada que no conociéramos, aunque hay otros aspectos en Liberation que sí nos resultan inéditos. Por ejemplo, un buen caso lo tenemos en el aprovechamiento de las características únicas de PS Vita. Con la pantalla táctil no solamente es posible navegar entre menús, robar en la calle o remar en una canoa; sino que además podemos hacer uso del conocido como esquema "chain-kill", empleado durante las contiendas para acabar con varios rivales de una sola vez. Sólo tendremos que pulsar la cruceta para que se detenga la acción, y a continuación tocar con nuestro dedo a cada uno de los enemigos a abatir.
Fácil y rápido, aunque tal vez menos satisfactorio que practicar asesinatos dobles y en salto, de esos que tanto nos gustan (también incluidos). Una curiosa alternativa que nos hace pensar, no obstante, que la integración de estas funciones es más obligada que acertada. Una sensación que se manifiesta en todo su esplendor cuando determinadas secciones del juego nos proponen acciones tan innecesarias como colocar la cámara de nuestra portátil apuntando hacia una fuente de luz para resolver un minijuego.
Yo quiero más - Extras, multijugador y duración
Existe otro conjunto de ideas más apropiadas, como contenidos adicionales, en el caso de que enlacemos el videojuego con su homólogo Assassin's Creed III. Si lo hacemos, obtendremos una serie de recompensas entre las que se encuentran el "tomahawk" de Connor, un personaje multijugador inédito, más capacidad de munición y una misión adicional. La función Near, relativa a compartir objetos del videojuego con otros usuarios, también es llamativa.
Para completar el aprovechamiento de PS Vita, no se nos priva de una variante multijugador, dotada de una naturaleza estratégica-táctica muy prominente, la cual versa sobre escoger un bando (asesinos o templarios) para empezar a luchar por el dominio de un mapa-mundi real. Resulta curioso que si escogemos empezar en nuestra región de origen se nos premie con un mayor poder, ideal para batallar con nuestros agentes en combates que se resuelven sobre el papel, en función de los atributos de las unidades enfrentadas.
Un planteamiento que no va más allá de la mera curiosidad y que dejará a los jugadores con ganas de más, sobre todo después de que conozcan que les llevará algo menos de 10 horas completar la campaña de Liberation. Podríamos irnos hasta las 15 -o quizás algo más- en caso de que decidamos completarlo al cien por cien, pero aún así la duración se hace escasa. Mejores elementos de rejugabilidad y un multijugador con más posibilidades habrían ayudado a obtener un resultado diferente.
Belleza Franco Africana - Gráficos, tecnología y sonido
Liberation ha tomado la arriesgada decisión de aprovechar el motor AnvilNext (el mismo que mueve Assassin's Creed III) y no se puede decir que las consecuencias hayan sido negativas. Debido a ello, el título es capaz de mostrar gran cantidad de objetos simultáneos en pantalla, consiguiendo que las ciudades parezcan densas y repletas de vida. Esto se acompaña de una extraordinaria distancia de dibujado, realmente sorprendente incluso para PS Vita, así como de texturas de una calidad muy elevada.
El conjunto plástico que conforma la obra es muy agradable, algo que viene acompañado de una representación de rostros correcta, sin alardes. Pero hay un aspecto que falla clamorosamente: el técnico. Aún después de instalar el primer parche disponible para el juego (versión 1.01) la obra demuestra una falta de fluidez continua, con saltos en animaciones y errores de todo tipo, desde enemigos que flotan en el aire hasta otros que desaparecen como por arte de magia. Los "bugs" en los juegos de mundo abierto son comunes, pero tal vez estemos ante un caso de especial descuido, que en ocasiones nos obliga incluso a cargar el último punto de control.
Aún así, los tiempos de carga son correctos y, por lo general, los errores no son tan graves como para tachar el trabajo realizado por Ubisoft Sofia. Una obra que cuenta con unas melodías variadas y brillantes en algunos casos. Todo recubierto por una cuidada, pero no explosiva, localización al español (incluidas voces), que hacen de Assassin's Creed III: Liberation un cartucho recomendable pero que se encuentra muy lejos de la calidad atesorada por la serie numerada. No se ha convertido, como muchos esperaban, en uno de los imprescindibles de la portátil de Sony, pero aún así sigue siendo un título atractivo y al que se le puede dar una oportunidad.
La llegada de Assassin's Creed a PS Vita era uno de los acontecimientos más esperados del año para los poseedores de la portátil, y se resuelve con un título ambicioso, valiente al calcar los atributos jugables de sus hermanos mayores (incluidos los sistemas de navegación y combate), al tiempo que nos da un nuevo protagonista... y femenino. Además, el título se permite innovar con el uso de tres identidades -asesina, dama y esclava-, aparte de que contiene misiones muy interesantes. Sin embargo, un guión poco absorbente, la poca duración de su campaña -menos de 10 horas-, un multijugador anecdótico y múltiples defectos de programación (en ocasiones graves), evitan que Liberation se convierta en algo más que en un juego recomendable pero lejos de la calidad representada por la serie numerada.
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