Emideadman / 26 de febrero de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

7 Interesante

Esperanza en la republica del control
Nacido para celulares, République lleva en una nueva version su experiencia a Pc. Con mecanicas jugables interesantes y una historia protagonista, debemos ayudar a Hope a escapar del regimen en el que está atrapada, aunque no todo funcione tan bien como podria.

El punto de partida de République y su ambientación no es nada original, inspirado en grandes obras como 1984 y tocando un tema ya bastante tratado, las primeras horas nos muestran una sociedad sumida en el control del Gran maestro, un regimen totalitario donde lo importante es servir al sistema, a esta nacion llamada Metamorfosis. La trama avance lentamente y casi nada se sabe de la ciudad ya que solo visitamos instalaciones muy basica y solo habitadas por guardias, pero lo que empieza como simple y predecible, con el paso de las horas (y gracias a un buen uso de documentos para dar contexto), las cosas se van tornando más interesantes para que en las ultimas horas la narrativa pase a ser el principal motor gracias a las intrigas que se disparan y algunos giros. No hay personajes memorables, pero ciertamente la historia se desarrolla bien.

Jugablemente estamos ante un titulo que nacio para dispositivos moviles y que en varios cosas puede entenderse que funcionaran mejor para ellos que para Pc. La experiencia gira en torno a que Hope encuentra un celular y desde él se comunica con nosotros, quienes ponemos movernos a traves de las camaras de seguridad y ayudarla a escapar de las instalaciones mediante el sigilo, el desbloqueo de puerta y el hackeo de otros dispositivos. Se trata de un planteamiento interesante y que nos situa en una posición poco habitual, por lo que ir ayudando a Hope de por sí ya es algo atractivo. Ella puede robar a los guardias y usar tres artefactos en su defensa: gas pimienta, taser y bombas somniferas. Nostros por otro lado iremos acumulando puntos cuantos más coleccionables encontremos y asi desbloquear habilidades como distraer guardias, ver recorridos, etc. Los escenarios tambien esconden bastantes objetos con los que interactuar, que podemos escanear o tomar con Hope y para asi conocer mejor el transfondo de lo que ocurre en Metamorfosis, siendo muchos de estos coleccionables de peso narrativo. Y por ultimo hay algunos minijuegos, pero son escasos y, pese a que ayudan a dar un toque de variedad, no es suficiente para paliar el principal problema del juego.
République se divide en 5 capitulos y pueden ser superados entre 12 a 14 horas, y lamentablemente la experiencia sufre de monotonia debido a lo poco que varian las cosas a lo largo de las horas, las cuales se sienten demasiadas para lo que el juego tiene para ofrecer. Todo se resumen en avanzar sigilosamente con Hope, y el sentimiento de que estamos haciendo siempre lo mismo aparecerá a las pocas horas, y aqui se hecha en falta un buen trabajo por parte de estudio para crear situaciones, variantes y agregados que mantengan el interes. No lo hay, y la repetición de situaciones, lo pobre del comportamiento de los guardias y algunas imprecisiones en el control o cierta lentitud, hacen que la experiencia se termine resintiendo bastante para la segunda mitad.

Visualmente salta a la vista que el titulo no ofrece un trabajo destacable en lo tecnologico, en sus modelados, texturas y elementos en los escenarios. Pero teniendo en cuenta que se trata de un juego de moviles, el ver el traspaso de uno a otro revela un buen trabajo y un resultado aceptable en este sentido. En lo que respecta a la direccion artistica es bastante convencional, con las tipicas instalaciones de laboratorios o zonas ostentosas de clase alta, sin lograr en ningun momento destacar en este sentido y limitandose a lo funcional.

En lo sonoro cabe destacar el buen trabajo de voces, los personajes principales en la historia poseen buenas personalizaciones y un buen trabajo de voz para recrearlos, dotandolos de caracter y sorprendiendo al tratarse de un juego de moviles. La banda sonora es más modesta, y pese a funcionar y acompañar bien la experiencia, en general se limita a ser un acompañante que no llama la atencion y con la variedad justa. Por ultimo, los efectos de sonido estan bien y, tambien sin destacar, cumplen su cometido dentro de su mundo.

En conclusión, République es una experiencia interesante, con una buena historia y mecanicas llamativas, que sabe entretener por algunas horas y ofrece un resultado aceptable, pero que solo llega a eso debido a sus notorias carencias, principalmente en su experiencia jugable y monotonia.

Sepherim / 23 de julio de 2016 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

4,5 Malo

Insuficiente, una oportunidad desaprovechada
Republique no es un mal juego, pero si es una idea buena desaprovechada. Nos plantea la situación de jugar un juego de sigilo sin controlar a la protagonista más que indirectamente, a través de nuestra acción con cámaras como hacker; además, la protagonista no es ni una asesina ni una ninja, como en otros juegos de sigilo, sino una chica normal que quiere huir. El planteamiento es bueno, pero el desarrollo no tanto. Primero, porque a nivel de mecánicas de juego y jugabilidad, esa buena idea rápidamente acaba haciéndose repetitiva porque los retos a lo largo de todo el juego varían muy poco, igual de poco que las herramientas para enfrentarse a ellos, lo cual hace al juego muy repetitivo. Y segundo, porque la historia está contada de aquella manera, con algunos saltos argumentales sin demasiado sentido que nunca llegan a explicar bien o justificar y con un exceso de peso en los textos y audios que vas encontrando si buscas. Por no mencionar un final muy malo tras una de las secuencias más absurdas y sinsentido del juego. Y a eso hay que añadir algunos sinsentidos argumentales como que, cada vez que te pillan, te encierren en la celda más cercana de la que inmediatamente escapas... 

A nivel gráfico la verdad es que no está mal. No es puntero, desde luego, pero si está bien diseñado y tiene una buena ejecución que lo hacen agradable, aunque quizás las zonas son un poco grandes de más y demasiado similares, lo cual genera cierto cansancio. El sonido cumple bien, especialmente las voces, aunque la música y los efectos sonoros pasan más discretamente. La IA es un tanto pobre y excesivamente predecible, lo cual redunda en la previsibilidad y cierto aburrimiento del juego a medida que avanzamos.

El resultado no es exactamente un mal juego, pero si da la sensación de que podría haber llegado mucho más lejos.