Que DK llevara una escopeta realista no hizo especial ilusión al creativo japonés
Nintendo tiene a gala crear títulos tan ingeniosos como amigables para toda la familia. Muchos de ellos, y tal vez los más populares, son fruto de la imaginación de Shigeru Miyamoto, quien supervisa los diferentes proyectos de Nintendo. Sin embargo, el icónico padre de Super Mario se llevó una desagradable sorpresa con el prototipo de Donkey Kong 64. A fin de cuentas, no entraba en sus planes que DK tuviera acceso a una escopeta realista; motivo por el que rediseñó dicha arma en el acto para darle un toque más infantil y simpático.
En una interesante entrevista concedida a GamesRadar+ en 2019, George Andreas, Grant Kirkhope, Mark Stevenson y Chris Sutherland, desarrolladores de la mítica Rare, repasaron algunas de las anécdotas más interesantes de su trabajo en este título. Y sus declaraciones incluyeron un incómodo momento en el que Miyamoto descubrió que en el juego aparecía un arma de fuego real.
Según detallaba Andreas, todo parecía ir bien con el juego durante una demostración ante Miyamoto, Satoru Iwata y Howard Lincoln, presidente de Nintendo America en ese momento. Las mecánicas gustaron a los responsables de Nintendo, pero en un momento determinado "apreté el botón para sacar el arma. No era una pistola texturizada como cabría esperar, sino una escopeta realista, con balas volando y con horribles efectos de sonido". Y añadió: "¡Estaba disparando a castores, giré la cabeza y vi esa expresión de horror en la cara de Miyamoto! Luego sonrió y, con papel y lápiz, diseñó una escopeta de cocos para nosotros".
En resumen, Miyamoto fue el responsable de que DK recibiera su clásico 'Escupecocos'; el arma desbloqueable para dicho personaje en Donkey Kong 64 que, como su nombre indica, dispara unidades de la fruta tropical. Lo que, en definitiva, se establece como una muestra más del ingenio del padre de Super Mario y su facilidad para encontrar soluciones creativas sobre la marcha.
Donkey Kong mantiene su espíritu familiar en 2025
La idea de establecer a Donkey Kong como un personaje vinculado exclusivamente a juegos familiares se ha mantenido hasta la actualidad. Este mismo año, Nintendo ha cautivado a los fans de las plataformas y las propuestas originales con un Donkey Kong: Bananza que ha encantado tanto a los niños como a los adultos con escenarios coloridos, plataformas completamente destruibles, desafíos de todo tipo y una dupla de protagonistas (DK y Pauline) que aporta humor a la experiencia en general.
De hecho, la nueva peripecia de Nintendo Switch 2 es tan buena que ha llegado a competir por el GOTY 2025 en los The Game Awards; certamen que, si bien ha premiado a Clair Obscur: Expedition 33 con el galardón más relevante de la gala, también ha aplaudido el trabajo de la Gran N brindándole la estatuilla de Mejor Juego Familiar. Y es que es difícil no pasárselo en grande con una aventura tan entretenida como la que ha lanzado Nintendo este año.
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