El año fiscal de la distribuidora norteamericana se cierra con un flujo neto de 1.160 millones de dólares.
El año fiscal 2010 que concluyó el pasado 31 de octubre era tremendamente importante para Take-Two, especialmente después de que en el pasado período perdieran 140,5 millones de dólares. Sin embargo con títulos como Red Dead Redemption o NBA 2K11 parecía difícil que pudieran repetirse esos números, y desde luego no se ha repetido el caso.
Hasta tal punto no ha sido así que, gozando de las enormes ventas de los dos mencionados videojuegos, la distribuidora norteamericana ha logrado alzar hasta los 1.160 millones de dólares los ingresos del presente año fiscal, obteniendo unos beneficios de 42,6 millones de dólares.
"Hemos conseguido nuestra meta de ser rentables en un año sin el lanzamiento de ningún Grand Theft Auto", declaró Ben Feder, recordando de este modo que el sacar a delante un año fiscal sin la presencia de la más popular de las franquicias de Rockstar era uno de sus retos para esta temporada. "Nuestro crecimiento económico, por encima de lo esperado, se ha debido principalmente a la alta demanda de un catálogo tan variado como el nuestro".