La nueva versión del simulador de gestión deportiva más adictivo del mercado está ya a punto de lanzarse, y Sports Interactive tiene lista una hornada de novedades muy interesante. Football Manager 2012 llega con más capacidad en las relaciones con jugadores y prensa y una mayor profundidad en cuanto a las negociaciones son las claves de un juego continuista pero igualmente rotundo en términos de calidad.
Los videojuegos de tipo Tycoon tienen ramificaciones muy diferentes, pero la única que parece estar prosperando a una velocidad proporcional a la que lo hace el mercado en general es la de los gestores deportivos: especialmente los futbolísticos. En este campo el principal referente es Football Manager, y es que la saga del veterano estudio británico Sports Interactive lleva ya muchos años haciendo las delicias de aficionados de todo el mundo.
La entrega de la temporada 2011/2012 es, en muchos sentidos, mucho más continuista que, por ejemplo, el episodio del año pasado, que traía consigo abundantes incorporaciones como la de los agentes, pero sí sigue siendo un videojuego muy recomendable en todos los sentidos. Adicción máxima y deliciosa ejecución jugable para un título que, nuevamente, no puede faltar en la estantería de ningún amante del deporte rey.
Fútbol como Ciencia
Al arrancar una partida en Football Manager 2012 lo primero que hacemos es escoger elementos como nuestros datos personales, el tamaño de las bases de datos o las ligas jugables, visibles, etcétera... Y en esta parte vemos la primera novedad del juego, la posibilidad de sumar o restar al vuelo competiciones completas. ¿Cómo funciona esto? Por ejemplo podemos comenzar nuestra partida con las dos grandes ligas del momento (La española y la Barclays Premier League británica), y más adelante decidir que en un instante determinado queremos sumar otras como la Serie A italiana o las ligas alemana y francesa.
Sencillamente nos dirigimos al menú de Preferencias durante cualquier partida y ahí ponemos y quitamos los campeonatos y divisiones que deseemos para dejar la oferta de clubes enteramente a nuestro gusto. Lo que Sports Interactive busca con esta decisión, y que busca en realidad con la práctica totalidad de novedades de Football Manager 2012, es flexibilidad de cara al jugador. Se acabaron las encorsetadas decisiones del pasado a la hora de escoger las características de la partida sólo en su inicio, y es que así podemos tener un control completo sobre todo lo que recrea el videojuego con sólo un margen de unos días (en el tiempo de juego), ya que desde el momento en el que tomamos la decisión de añadir o sustraer torneos del juego hasta que se ejecuta el cambio pasa alrededor de una semana (también en el tiempo de juego). Así, por ejemplo, los usuarios que gustan de probar los tarros de las esencias de las ligas de diferentes países podrán hacerlo con sólo una o dos ligas activas en todo momento, sin tener que cargar de este modo con una base de datos enorme que pudiera lastrar los tiempos de carga del juego.
En cuanto a las siempre temidas pantallas de carga, los responsables del juego continúan trabajando poco a poco y entrega tras entrega para mejorar los tiempos de espera con bases de datos grandes. Si realmente deseamos una experiencia completa es bastante necesario el activar al menos las ligas europeas y sudamericanas más importantes y activar las pestañas de Bases de Datos en "Grande", y para ello hace falta un equipo fuerte; y aún así, con mucha memoria y un muy buen procesador, podremos estar ante de tiempos de carga ciertamente largos.
En cuanto a la representación de los partidos en 3D puede que no la utilicemos siempre, y es que el control absoluto y la visualización completa de todos los encuentros (aunque sea a cámara rápida) la dejamos para los más fans del fútbol, pero cuenta con una ejecución en pantalla bastante agradable para seguir al detalle los partidos más importantes de cada temporada o para ver cómo se ajustan nuestros futbolistas a algún nuevo sistema de juego. En este sentido los cambios con respecto al juego anterior son también minúsculos, no obstante se pueden detectar algunas perspectivas nuevas en cuanto al menú de cámaras y algunas nuevas animaciones en los futbolistas y una mayor carga poligonal en su forma de mostrarse en pantalla.
Hay también otros muchos ajustes visuales. Por ejemplo ya no hace falta entrar a una ficha para ver los goleadores de un partido ajeno a nuestro equipo que se nos muestre con los partidos de Otros Resultados, se expondrá directamente. En este sentido todo contribuye a que tengamos que hacer el menor número de clics posible para acceder a las diferentes informaciones que se nos facilitan, muchas de las acciones que antes nos obligaban a "serpentear" por los en ocasiones laberínticos menús del juego desaparecen, y muchos elementos se fusionan o aparecen mostrados directamente desde pantallas más genéricas. Hay infinidad de partes del juego donde se aplica esta política (filtros de fichajes, resultados...) no obstante, y por describir un único ejemplo, podemos hablar de la Preparación de Partido, que en Football Manager 2011 aparecía separada con una pestaña independiente y que ahora está incluida en un costado de la vertiente táctica. Al principio llamará la atención y puede incluso que desagrade a los aficionados que más tiempo invirtieron en el anterior juego, no obstante con sólo unas horas en el nuevo título nos daremos cuenta de que las opciones son las mismas y que en realidad es incluso más cómodo el nuevo planteamiento.
Terapeuta de Grupo
Uno de los aspectos a los que más atención ha prestado siempre Football Manager ha sido a la de la moral de los futbolistas que conforman nuestra plantilla, y desde hace algunos años también a nuestra relación con ellos para cuidar este aspecto. Un equipo desmoralizado, como es lógico, tiene menos posibilidades de salir vencedor de los envites más difíciles, y una gran victoria por goleada puede ser tan beneficiosa para la estimulación de nuestro equipo como lo puede ser de efectiva una charla bien pronunciada en el descanso de un partido en el que vayamos por detrás en el marcador.
Tocar la fibra sensible de nuestros jugadores a la hora de motivarlos va a ser ahora más importante que nunca, y es que el juego se ha volcado en este factor. Ahora cada vez que nos reunamos con un jugador en concreto de la plantilla o con nuestro equipo al completo, podremos escoger el tono con el que pronunciar nuestras palabras, algo que nos va a facilitar la opción de no dejar nada en el aire y contar con un control máximo sobre las charlas individuales o colectivas. Así pues el menú será idéntico al de entregas anteriores, sólo que coronado con una barra llamada Tono en la que encontraremos seis alternativas: Agresivo, Positivo, Apasionado, Calmado Prudente o De Mala Gana. Como es lógico muchas de las frases se repetirán entre los diferentes tonos aunque con su pronunciación de una u otra forma obtendremos unos u otros resultados, no obstante también habrá otras que serán especificas de cada tonalidad verbal, y es que sería un poco absurdo criticar después de un partido la entrega de nuestros hombres con un tono Apasionado.
Las conversaciones vuelven a poder pronunciarse en cualquier momento del año en privado, al comienzo de un partido, en el descanso o al final de un encuentro, aunque ahora veremos la reacción exacta conseguida ante nuestras palabras. Por poner un ejemplo podemos mencionar la final de la Champions y nuestras palabras en el vestuario antes de saltar al césped. ¿Apelaremos a la pasión? ¿Seremos prudentes en nuestro discurso? Si acertamos veremos cómo el perfil de nuestros futbolistas se tiñe de verde y tendremos cuidadas descripciones de su estado moral en el momento basado en lo que hayamos detectado por su lenguaje corporal; si por el contrario nos equivocamos en la charla general veremos cómo algunos (o todos) nuestros futbolistas se teñirán de rojo y se mostrarán alicaídos. Además de la charla general podemos hablar con nuestro 11 inicial por líneas (Defensa, Mediocampo y Ataque) y además hacerlo de modo individualizado, así que con estos tres escalones (General, Líneas e Individual) tenemos hasta tres oportunidades para motivar a nuestros deportistas como es debido.
Como siempre habrá que ser muy inteligentes y observadores a la hora de fomentar el ánimo de nuestros jugadores con las charlas, y el nuevo método de visualización de los efectos sobre nuestros futbolistas al vuelo nos va a permitir aprender más sobre los mecanismos que emplea el juego para ello. Así, como era obvio pensar, será absurdo por ejemplo tratar de motivar a nuestro once inicial emplazándoles a dar una alegría a la afición si acaban de llegar al club este mismo verano, siendo ésta en cambio una táctica muy inteligente para sacar lo mejor de los jugadores canteranos, que sí demostrarán esta conexión con sus aficionados.
En última instancia cabe recordar que las relaciones con los agentes vuelven a ser, igual que en Football Manager 2011, importantísimas para llevar a cabo las contrataciones más optimizadas en cuanto a pagos. En este año debuta la opción del "candado", una alternativa en el interfaz de la negociación del contrato que nos permite hacerle saber al agente qué partes no estamos dispuestos a negociar y que desplaza la "guerra" con él a otras partes en las que nos mostremos más flexibles.
Football Manager 2012 puede que no aporte un número de novedades deslumbrante, pero sí hace los suficientes ajustes como para tenerlo en cuenta. Vuelve a haber algunos bugs de muy leve importancia, pero sólo por disfrutar de los nuevos interfaces y de las mejoras en las contrataciones ya merece la pena hacerse con él y volver a disfrutar de su adictiva propuesta.
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