Análisis de Forza Horizon

Análisis de Forza Horizon
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Esencia Forza, espíritu de mundo abierto. En una oración os acabamos de definir lo que es Forza Horizon, un "spin-off" que llega con la intención de expandir el amor por los coches entre el mayor número de usuarios posible. Si ya te subiste con Turn 10 a alguno de sus vehículos, ahora te toca hacerlo con los ingleses de Playground Games. Una vez inicies este festival de conducción, no podrás bajarte del coche.

Amor por los coches. No habría mejor forma de definir la pasión que ha dirigido a la saga Forza Motorsport desde el año 2005, con nada más y nada menos que cuatro entregas, a cada cual más completa y satisfactoria. Los estadounidenses de Turn 10 han dirigido con maestría un volante difícil de dominar, el de la simulación en consolas, consiguiendo una experiencia de conducción realmente profunda, batiéndose con series de tan reputado nombre como Gran Turismo.

Ahora, y en un intento por acercar la franquicia a todavía más públicos, la serie se sale de la senda de la simulación para dar lugar a Forza Horizon, un videojuego creado en esta ocasión por Playground Games, un estudio británico recientemente fundado por los mismísimos creadores de joyas como TOCA, GRID o DiRT. Entre sus filas contamos con trabajadores de compañías tan populares como Bizarre, Criterion o Ubisoft Reflections... y hemos de sentenciar que se nota, porque han creado un digno exponente a mejor juego de conducción del año.

Por supuesto, Turn 10 ha tenido mucho que decir. De ellos se hereda esa autenticidad por tratar a cada marca y modelo de coche con mimo, al mismo tiempo que se toma prestado su sorprendente motor gráfico y de físicas. Pero hay mucho más, y es que aunque el título se salga de la senda de la simulación para adentrarse en territorios arcade, eso no quiere decir que la experiencia pierda enteros. Todo lo contrario. Este juego es un punto y aparte, un "spin-off", una obra que si nos la vendieran sin el nombre "Forza", seguramente creeríamos que es algo completamente nuevo, creado desde cero.

Un festival de mundo abierto
En cierto modo, así es. Recogiendo elementos de varios títulos como Burnout Paradise o, sin ir más lejos, el añorado Project Gotham Racing, los ingleses nos dan lo que podríamos definir como un videojuego de conducción de mundo abierto. Uno que se basa en el conocido como "festival Horizon", al cual acudimos para demostrar quién es el mejor piloto. Como escenario tenemos una amplia región del estado de Colorado (EEUU), con cientos kilómetros de carretera para recorrer y cantidad de eventos que completar.

Es decir, un "sandbox" sobre ruedas cargado de ambiente festivo, pero igualmente de competición. Un auténtico placer para los amantes de los coches, porque aparte de contar con un catálogo extensísimo de modelos, también existe una descomunal diversidad de terrenos sobre los que pilotar, desde carreteras asfaltadas hasta caminos de tierra. Todo ello salpicado por un ciclo día/noche (habilitando la conducción nocturna), el cual no discurre en tiempo real, sino que cambia en función del reloj interno del juego.

En definitiva, un título de lo más completo, y más si echamos un vistazo al mapa. Entonces será cuando nos demos cuenta de la inmensidad del escenario, el cual es muy importante decir que no tiene ningún tipo de barreras a desbloquear. Desde el principio, todo está disponible, menos los eventos, los cuales deberemos ir descubriendo a medida que progresemos en la aventura, una que no destaca por su guión (más allá de derrotar a un tal Darius Flynt, el cual presume de ser un piloto inalcanzable en pista).

Una de las claves del éxito del videojuego es su formidable manejo, satisfactorio sea cual sea el coche que elijamos. Eso sí, la práctica será esencial.
Una de las claves del éxito del videojuego es su formidable manejo, satisfactorio sea cual sea el coche que elijamos. Eso sí, la práctica será esencial.

El señor de las pulseras
He aquí uno de los aspectos más interesantes del programa: nuestra progresión. Comenzamos conduciendo un Volkswagen 95 Corrado, pero más pronto que tarde nos veremos con varios coches en nuestro garaje, los cuales resultan indispensables para participar en los eventos -de distinta categoría- que se presentan en la obra. Habrá desde competiciones diseñadas exclusivamente para "muscle cars", hasta otros que requieren un Ford, y muchos más que nos exigen poseer una configuración de clase C, B, A, S... en nuestro vehículo.

La existencia de estos requisitos de entrada nos obliga a esforzarnos por tener el garaje más completo y variado. Pero hay algo aún más importante que todo esto, ya que el verdadero sentido de progresión viene dado por las "muñequeras" de colores (siete en total), unas que iremos obteniendo a medida que completemos en buena posición las pruebas propuestas. ¿Lo más interesante? Que cada pulsera da acceso a nuevas pruebas, cada vez más complicadas dependiendo de si pertenecen a la categoría verde o a la dorada, por ejemplo.

Pero que nadie se lleve a engaño. La estructura del juego no está tan definida. Al tratarse de un "sandbox", la libertad es sobrecogedora, con lo que entre evento y evento podremos hacer mil cosas, desde pilotar a lo loco por la carretera hasta personalizar con pegatinas nuestro mejor bólido. Eso sí, para los que quieran ir al grano y no deseen perderse, siempre tendrán a su disposición un potente y útil GPS, el cual se puede controlar hasta con Kinect, y de una forma muy sencilla: mediante la voz. El reconocimiento de nuestros comandos no es perfecto, pero podéis creernos si os decimos que si tenéis el periférico muy pocas veces entraréis en el mapa para establecer rutas. Es algo realmente cómodo y práctico. Un diez para Playground Games por haber realizado un uso tan inteligente del dispositivo.

El mapeado es extenso, con múltiples rutas a seguir y aún más eventos a los que acudir. A medida que consigamos pulseras, más posibilidades se nos abrirán.
El mapeado es extenso, con múltiples rutas a seguir y aún más eventos a los que acudir. A medida que consigamos pulseras, más posibilidades se nos abrirán.

Dominando la carretera
La conducción libre es pues uno de los grandes ingredientes de Forza Horizon, más si tenemos en consideración que circulamos por un entorno vivo, con otros coches (tanto de competición como utilitarios) que van de aquí para allá continuamente. Hay hasta alguno al que podremos retar en pleno paseo, pero como mejor nos lo pasaremos es con los retos de habilidad, del estilo de cruzar todo lo rápido que podamos ante cámaras de tráfico o derrapar como si la vida nos fuera en ello.

Existen muchas opciones adicionales, como pasar por el lado de vehículos a toda velocidad, ponernos a rebufo, destrozar vallas, llevarnos señales de tráfico por delante, hacer adelantamientos, quemar ruedas, realizar giros de 180 grados, despegarnos del asfalto durante los saltos... Gracias a estas acciones, ganaremos puntos de popularidad, los cuales a su vez nos harán subir de rango. El objetivo final es muy sencillo: pasar del puesto 250º al 1º, algo que probablemente no lograremos antes de completar la totalidad de los eventos, suponiendo así otra excusa para alargar la rejugabilidad.

Pero antes deberemos completar los eventos propuestos, y ya os adelantamos que no son pocos ni aburridos. Por supuesto, acuden a la cita las carreras clásicas de siempre (que nos premian por llegar los primeros), pero además tenemos las "exhibiciones estrella", con planteamientos tan originales como superar "checkpoints" antes de que lo hagan un helicóptero, un globo o un aeroplano, según el caso. Y eso sin olvidarnos de otras competiciones no tan originales pero aún así siempre llamativas, como podrían ser las de Minis. Hasta se ha pensado en los jugadores más "underground", con carreras callejeras -de mucho dinero en juego- al margen del festival Horizon.

¿Te gusta conducir?
Hay muchos tipos de eventos, pero aún más tipologías de terrenos, desde las pistas polvorientas o sucias a las más montañosas. La diversidad contribuye al éxito en la experiencia de juego, que atrapa hasta el punto que es realmente difícil soltar el mando sin disputar una prueba más. Todo lo citado tiene buena parte de la culpa, pero el estilo de manejo aplicado tiene también mucho que decir. El espíritu de conducción de Forza Horizon es potente y muy bien definido. Casi tanto, que realmente pierde sentido discutir si estamos ante un juego arcade o de simulación.

Lo más importante es disfrutar, y en este aspecto los ingleses triunfan, tanto o incluso más que la serie Forza original. Es otro punto de vista sobre la pasión por los automóviles, algo manifestado en una respuesta satisfactoria y genuina, que muestra diferencias plausibles en la conducción de distintos vehículos. Los hay con más velocidad punta, con buen agarre, con un mejor manejo... pero todos tienen algo en común: es una gozada pilotarlos.

Para que nadie se queje, ni siquiera los más puristas (que no deberían descartar este título en absoluto), el videojuego cuenta con múltiples ajustes de dificultad, los cuales no suponen sólo un incentivo personal, sino que también incrementan el porcentaje de créditos obtenidos en cada prueba. Así, es posible desactivar los frenos ABS, el control de tracción, el trazado óptimo o la técnica de rebobinado. Optar por marchas manuales incrementa igualmente nuestro número de puntos de carrera, al igual que escoger una mayor dificultad en los oponentes: entre fácil, medio, difícil o demencial. No debéis esperar pilotos fuera de serie que os echen de la pista, pero la IA se comporta de forma correcta.

Las carreras de Minis no podían faltar. Y no será la única sorpresa. Cantidad de eventos en un título donde la variedad es la tónica predominante.
Las carreras de Minis no podían faltar. Y no será la única sorpresa. Cantidad de eventos en un título donde la variedad es la tónica predominante.

Tu coche, tus reglas
En consecuencia, desactivar al máximo las ayudas en carrera nos hará un favor. En poco tiempo, ganaremos cantidad de créditos, ideales para comprar nuevos bólidos. La "feria del automóvil" está destinada a tal fin, con un sorprendente catálogo de marcas (50 en total) y de modelos (más de 150). No faltan los clásicos Audi, Hyundai, Citröen, BMW... pero tampoco los más exóticos coches de las casas Ferrari, Jaguar, Lamborghini o McLaren.

Cantidad y calidad en un juego donde podremos pasarnos mucho tiempo en el "garaje de Dak", destinado a personalizar nuestro bólido al milímetro, realizando múltiples mejoras tanto automáticas como manuales. Aerodinámica, neumáticos, llantas, motor, transmisión... Sorprende la cantidad de aspectos que se pueden modificar en Forza Horizon, y todo a cambio de un puñado de créditos. Debido a este añadido, la profundidad y complejidad del producto se dispara.

Los amantes del "tuning" tienen muchos motivos para engancharse al volante, y no sólo por las posibilidades en términos de mecánica, sino porque además contamos con un "taller de pintura". Podremos crear nuestros propios diseños modificando el color de las distintas partes del coche, así como aplicar pegatinas o vinilos. Todo de una forma bastante asequible e intuitiva, y que cuenta hasta con su propio toque de adicción, ya que una vez terminado un diseño es posible subirlo a Internet, ponerle un precio y esperar a que alguien caiga en la oferta. Nosotros, por supuesto, podremos hacer lo mismo y comprar -con créditos, nada de dinero real- los diseños de otros usuarios.

Una de las opciones más curiosas del juego consiste en sacar fotografías de nuestros bólidos. Saca el artista que llevas dentro y compártelo con la comunidad.
Una de las opciones más curiosas del juego consiste en sacar fotografías de nuestros bólidos. Saca el artista que llevas dentro y compártelo con la comunidad.

Gasolina infinita
Es fácil entender después de todo lo comentado que Forza Horizon no es un videojuego corto. Las 20 horas de juego están aseguradas, y eso si no optamos por exprimirlo al cien por cien. En dicho caso, nos resulta difícil establecer un número, ya que todo depende de la habilidad de cada jugador, pero es fácil que la duración se vaya por encima de las 30-35 horas. Es lo que tienen los juegos de mundo abierto, y más en este caso, que posee una cantidad casi descomunal de contenido.

En adición a todo lo ya dicho, podemos encontrar coches abandonados, hallar carteles de descuento, descubrir más de 200 rutas... Después de cada evento, hasta se nos ofrece la oportunidad de retar a un rival prefijado para ganar algunos créditos más. El mundo abierto es tan sólido que hasta goza de "viaje rápido", habilitado por las Avanzadas de Horizon, unos enclaves dispersos por el mapeado que, cada uno, nos ofrecen tres pruebas (de velocidad, de fotografía y de técnica) que si completamos pueden hacer que el viaje nos salga gratis.

Ya que estamos, el Modo Fotografía es uno de los más nos han gustado. Activable desde el menú de pausa, nos permite tomar fotos de la acción mediante todo un conjunto de herramientas: control de obturador, enfoque, diafragma, exposición, contraste, color, brillo, viñeteado, etc. En definitiva, todo lo necesario para que la foto salga tal y como deseamos. Algo que será muy importante, ya que las tomas se pueden subir a Internet y recibir puntuaciones. Desde luego, hay muy pocas cosas dejadas al azar en el título.

Si lo tuyo es pintar y diseñar, en Forza Horizon puede que encuentres tu lugar. Con las herramientas del taller, podrás crear un coche a tu medida y presumir de él online.
Si lo tuyo es pintar y diseñar, en Forza Horizon puede que encuentres tu lugar. Con las herramientas del taller, podrás crear un coche a tu medida y presumir de él online.

Conducción en compañía
La parte online del programa es otro de los aspectos más cuidados de Forza Horizon. Los diseñadores prometieron características de mundo abierto en la faceta online, así como un fuerte énfasis en la comunidad. Se ha cumplido. Una de las mayores pruebas la tenemos en la presencia de "clubes", los cuales podemos crear para invitar a amigos, compartir coches, competir y hasta retar a otros conjuntos de usuarios. Los marcadores no faltan, y tenemos tablas globales, pero también individuales para cada evento.

Sin embargo, donde realmente destaca la obra es en su núcleo multijugador, con partidas públicas o privadas (sólo para amigos) donde tenemos modalidades clásicas -Circuito, Punto a Punto y Carrera Callejera- que se encuentran con otras más originales -Gato y Ratón, Infectado y Rey-. No obstante, la opción de Conducción Libre junto a otros jugadores (hasta un máximo de ocho) es la más bienvenida de todas, al permitirnos recorrer Colorado en compañía para superar una serie de retos.

La cantidad de trazados disponible (más de 40) es muy de agradecer, así como la inclusión de un sistema de progresión, que nos anima a seguir jugando para subir de nivel y obtener cada vez mejores recompensas: desde créditos hasta nuevos coches. Aunque lo mejor viene por parte del correcto comportamiento de los servidores. Existe un ligero "lag" en el movimiento de los bólidos -que hacen extraños-, pero se trata de un detalle menor que no afecta al disfrute.

Admirando el paisaje
Forza Horizon no es un videojuego que gráficamente suponga lo mismo que sus predecesores, pero aún así destaca por ofrecer una personalidad propia, algo muy difícil de conseguir cuando se parte de un motor gráfico preexistente, en este caso el de Forza Motorsport 4. Es de apreciar el esfuerzo realizado por Playground Games al adaptar dicho motor a un juego de mundo abierto. No debió resultar sencillo. En cualquier caso, los resultados obtenidos son espléndidos, siendo especialmente notorios los decorados, con una profundidad de dibujado kilométrica, a la cual no le hace falta ni pizca de niebla.

Puede que con tanto campo para mostrar, los diseñadores no hayan sabido dotar a la región de una mayor variedad de escenarios, pero el uso de colores es magnífico, modificándose el cromatismo con belleza a medida que pasan las horas del día. Los modelados de los coches andan a la par. No son tan espectaculares como los de la saga principal, pero siguen exhibiendo ese gusto por el detalle, tanto en las vistas internas (donde se nos muestra el cuadro de luces y el salpicadero) como en las externas, con cantidad de brillos y reflejos sobre la chapa.

Playground Games ha prestado especial atención al interior de los más de 150 modelos de coches presentes. Un trabajo realmente formidable.
Playground Games ha prestado especial atención al interior de los más de 150 modelos de coches presentes. Un trabajo realmente formidable.

En total, contamos con cinco cámaras desde las que pilotar, siendo la más alejada de todas la mejor para comprobar los daños que se producen sobre nuestro vehículo. Sí, hay un sistema de desperfectos, aunque su función es meramente estética, y no es que resulte especialmente realista. Para empezar a notar daños graves (del estilo de perder alerones o romper cristales), es necesario un golpe bastante intenso. No es algo que nos preocupe demasiado, sobre todo considerando el estilo de juego, pero tampoco estaríamos muy equivocados si dijéramos que una mayor implicación en este sentido hubiera añadido aún más interés al programa.

Forza audiovisual
Otro aspecto muy a tener en consideración es que la sensación de velocidad obtenida es una de las mejores que hemos visto últimamente. Es probable que todo se deba a la más que correcta tasa de "frames" por segundo, firme como una roca, aunque también tiene mucho que ver todo el trabajo gráfico realizado, del cual destacamos los efectos de iluminación, que recuerdan poderosamente a algunos de los últimos videojuegos de Codemasters.

¿Te crees el mejor? Pues tendrás que demostrarlo online. Lleva a tu mejor coche a la pista y deja ver las horas que has estado practicando. Los modos admiten hasta 8 jugadores.
¿Te crees el mejor? Pues tendrás que demostrarlo online. Lleva a tu mejor coche a la pista y deja ver las horas que has estado practicando. Los modos admiten hasta 8 jugadores.

A este respecto, no nos extrañaría, sinceramente, que algún erudito trabajador de la compañía inglesa se hubiese trasladado de oficinas (que curiosamente se encuentran en la misma región de Reino Unido). Entre ingleses andan los coches, podríamos decir. Y es que hasta el gusto por la música se conserva. En este caso, el de Forza Horizon, tenemos una variedad sorprendente de temas que nos acompañan tanto en nuestras travesías por Colorado como en plena competición. La presencia de tres estaciones de radio hace el resto, favoreciendo que cambiemos de canción por si alguna se nos hace repetitiva.

Para completar este competente apartado audiovisual, contamos con una trabajada localización al español (incluido el doblaje). No es la parte más importante del videojuego, puesto que la historia es lo de menos, pero es de aplaudir que las voces introducidas gocen de tanta calidad, desde la que nos sirve de guía en la aventura hasta la del GPS, que por suerte no es tan irritante como en la realidad.

Excelente

Recomendado

Forza Horizon

Por: El equipo de 3DJuegos
Recomendado

Los británicos de Playground Games recogen con éxito las señas de identidad de Forza Motorsport para meterlas en un excepcional juego de conducción de mundo abierto. Un "spin-off" que nadie se esperaba, que comparte el amor por los coches de Turn 10 y que, sobre todo, nos da contenidos de los que resulta muy difícil aburrirse. Respeto por las marcas, un estilo de conducción satisfactorio y un apartado gráfico sensacional son los ingredientes principales de este arriesgado pero exitoso paso en la saga Forza por expandir su mercado de potenciales conductores. Si te gustan los coches, ponte el cinturón y no lo dejes escapar.

Comprar Forza Horizon
Jugadores: 1-8
Idioma: Manual en español, textos en español y voces en español
Duración:
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.