El sensacional juego de plataformas de NES, DuckTales, se presenta en los formatos móviles con una versión remasterizada, como ya sucediera hace un par de años con las versiones destinadas a PS3, PC, Wii U y Xbox 360.
Las Patoaventuras nos hicieron disfrutar a muchos de nosotros cuando éramos críos. Y lo hicieron por partida doble, tanto en la serie de televisión (muy famosa hace ya varias décadas) como, también, en formato videojuego. Y uno de los más destacados fue DuckTales, una obra de Capcom realmente magnífica que expuso en NES los mejores valores que debían formar parte de un juego de plataformas de scroll lateral multidireccional al más puro estilo Super Mario Bros. Bien, pues ese mismo título, que más tarde acabó siendo remasterizado en los formatos de sobremesa que ya os hemos citado, acaba de aparecer en dispositivos iOS y Android… y de manera muy solvente.
La trama que da pie a la aventura tiene que ver con la afición patológica (y nunca mejor dicho) del Tío Gilito por la riqueza y los tesoros. Su meta en esta odisea es la de encontrar cinco tesoros que, en teoría, aparte de su valor monetario poseen otras cualidades que van más allá de eso… pero que, por desgracia, están bien custodiados.
Sí, porque además de tener que recorrer medio mundo (¡e incluso la Luna!) para poder dar con ellos, también es necesario eliminar a cinco sendos jefes finales que las protegen y, peor aún, eliminar a una bruja más malvada y peligrosa de lo que pudiera imaginarse el protagonista en un principio. De hecho, la salud de los sobrinos del Tío Gilito (Jaimito, Jorgito y Juanito) también está en juego…
Saltos animados
La jugabilidad que encierra esta aventura es tan sencilla y simple como lo eran estas producciones en la época de los 8 y 16 bits. De esta forma el avance es siempre lateral, jugabilidad 2D de la vieja escuela, siendo necesario atravesar escenarios de un tamaño apreciable en los que deambulan adversarios de diversas formas. En función del entorno en el que nos encontramos (las minas africanas, el Amazonas, etc.), debemos enfrentarnos a la fauna local de turno, pudiendo hacerlo gracias a la utilidad del "arma" principal del protagonista: su bastón.
Dicho bastón es fundamental para realizar los llamados pogosaltos, la habilidad especial del Tío Gilito. Gracias a esta técnica es posible tanto acabar con la mayoría de los rivales como, también, aprovechar el impulso adicional que proporciona esta maniobra para llegar a zonas en principio inaccesibles de los fondos. ¿Y para qué? Pues, en muchos casos, para poder avanzar en la fase en la que nos encontramos y, más importante aún, para descubrir alguno de los muchos secretos que esconden los escenarios.
El diseño de los cinco niveles principales que alberga el título es algo laberíntico. No llega al mismo plasmado en otros juegos como los Metroid o Castlevania clásicos pero, aun así, no son lineales, lo cual ayuda a dinamizar y añadir más gracia a las partidas. Existen multitud de gemas y coleccionables esperando a ser hallados, lo cual picará especialmente a los usuarios más expertos.
Precisamente este grupo de usuarios será el que reciba con mayor entusiasmo el modo Extremo de dificultad que ostenta el juego, título ya de por sí bastante desafiante en su nivel de dificultad estándar, sobre todo en el tramo final. Pero para que nadie ponga el grito en el cielo, también se ha integrado una modalidad mucho más asequible (modo Fácil) para que cualquier usuario pueda disfrutar de este clásico de las plataformas.
Sencillez, adicción y nostalgia son las tres virtudes principales que presenta esta obra, a lo que es necesario añadir un apartado gráfico cuidado y atractivo, así como una faceta sonora notable. De hecho, el único defecto importante que presenta el título es su control táctil, que si bien no es malo en absoluto, de vez en cuando no resulta lo preciso que un juego como éste necesitaría, aunque por lo menos el juego es compatible con la mayoría de mandos Bluetooth.
Aquellos usuarios que ya jugaran a esta adaptación del clásico de NES en las consolas domésticas y PC pertinentes no encontrarán ningún motivo para adentrarse de nuevo en este gran juego de plataformas 2D. Sin embargo, los demás usuarios encontrarán en él un título adictivo, bien realizado, muy jugable y con la simpatía de los clásicos iconos Disney.
Las plataformas clásicas 2D siguen siendo uno de los principales reclamos para las compañías que desarrollan títulos para dispositivos iOS y Android. DuckTales Remastered es una joya de las plataformas tradicionales, un juego realmente cautivador que presenta un gran número de cualidades jugables y artísticas y leves defectos. Merece la pena.
- El diseño de niveles no lineal aporta gracia al asunto
- A pesar del tiempo transcurrido desde la salida del original de NES, sigue siendo un juego enganchante
- El modo Extremo de dificultad supone todo un reto para los jugadores más avezados
- Su ambientación es magnífica: cada uno de los cinco mundos es muy diferente
- El control táctil no es lo preciso que un título como este demanda
- No es el juego más largo del mundo, especialmente si domináis el plataformeo clásico
