Ivalice vuelve a mostrar la grandeza de sus tierras con una cuadrícula táctil a doble pantalla que representa la apasionante historia de un niño con la importante misión de volver a casa. El futuro de Luso Clemens está por escribir… ¿Te gustaría ser el autor de sus inminentes aventuras?
El estilo RPG más táctico de Square Enix regresa a una portátil tras haber experimentado el poder de máquinas como Game Boy Advance o, más recientemente, PSP. La saga Tactics aumenta su familia, ahora en Nintendo DS, y lo hace con un título que, de paso, incrementa el número de videojuegos que a día de hoy ya conforman la conocida como Alianza Ivalice, nutrida de obras que centran su historia en un mundo muy particular creado con la intención de atraer nuevos jugadores a la mítica franquicia Final Fantasy. El resultado vuelve a ser un videojuego tremendamente largo, completo y con una profundidad capaz de atraer tanto a los fans de la saga como a los más exigentes del género.
La trama, poco madura pero altamente interesante (y localizada íntegramente al castellano en un espléndido y no muy frecuente ejercicio de traducción) , nos pone en el lugar de un joven muchacho llamado Luso Clemens que, como muchos de nuestros lectores, ya ha acabado sus estudios y se prepara para unas merecidas vacaciones. No obstante, su comportamiento no ha sido el mejor durante el curso y es castigado por su profesor en el último momento para ayudar en la biblioteca mientras que el resto de sus amigos celebran su liberación estudiantil. Obviamente, no era la mejor forma de pasar aquel día, hasta que descubre un libro repleto de ilustraciones fantásticas con varias hojas en blanco que llenaremos a través de las decenas de horas, de batallas y de giros argumentales que componen esta destacada obra.
Toda una historia por escribir
Tras poner su firma sobre el misterioso libro, Luso es llevado a un lugar de ensueño, ambientado en otra época y en un mundo desconocido, el cual recibe el peculiar nombre de Ivalice. Este lugar es representado en nuestra “dual screen” aprovechando las dos pantallas, estando la inferior dedicada en la mayor parte de los casos a mostrar la acción de unas batallas que, como viene siendo habitual en la serie Tactics, se basa en los turnos y en una división del escenario de combate mediante cuadrantes. En este sentido, es un juego lento que poco tiene que ver con otros Final Fantasy, salvando el hecho de que aquí también hay una historia que narrar y carismáticos personajes que conocer.
Precisamente, la posibilidad de tener en nuestro grupo de combate a varios combatientes a la vez es algo que dota de especial fuerza a Final Fantasy Tactics A2. Habrá un límite por cada batalla, pero normalmente podremos llevar cerca de seis personajes a la vez, suponiendo todo un reto usar las habilidades de cada uno de ellos (guerrero, arquero, hechicero, ladrón…) para conseguir una victoria sobre unos enemigos que también basan su juego en el uso de la estrategia. Unas tácticas que no se limitan a dar órdenes de movimiento, de ataque o de una habilidad u objeto especial, puesto que aquí además habremos de tener en cuenta la posición del enemigo para acertarle, si es posible, con una ofensiva por la espalda que le cause mucho más daño.
La profundidad de Ivalice
El videojuego está muy focalizado en las batallas y en la personalización de los héroes con todo tipo de armamento y armaduras, sin contar la suculenta opción de cambiar en todo momento sus oficios entre los más de 50 disponibles en el juego. Podemos convertir a nuestro guerrero en un arquero o en un intrépido ladrón a la vez que hacemos que una maga blanca pase a ser una maga verde. Evidentemente, el atuendo cambiará, pero también lo harán unas habilidades y una equipación que a partir de ese momento serán completamente diferentes. Cada personaje y cada profesión es todo un mundo, así que de nosotros dependerá cuál es la combinación que más conviene al clan al que pertenecen.
Y hablando de clanes, es importante matizar que durante la primera parte del juego nos acompañará Cid, un aliado de renombre dentro de la franquicia que nos guiará a modo de introducción por un título que muestra una leve pero continuada curva de dificultad a través de la cual siempre estaremos aprendiendo cosas nuevas. Y es que Final Fantasy Tactics A2 es muy profundo. Una prueba son las cerca de 400 misiones que guiarán nuestra aventura en pos de rellenar las líneas de historia del diario de Luso hasta que encuentre su camino a casa. Algunas “quests” no tienen otra finalidad que hacernos ganar objetos y algo de dinero, pero otras son realmente vitales para el desarrollo de una trama donde tendremos que enfrentarnos a todo tipo de enemigos.
La Alianza fortalece su brazo táctico
Completar misiones no es complicado si el nivel de experiencia de los protagonistas está a la altura, aunque la duración de cada una es verdaderamente elevada (cerca de media hora). No es que sea algo negativo para el título, puesto que aumenta su longevidad mientras que resta algo de linealidad a un progreso basado en hallar nuevas regiones con poblados y tiendas donde encontrar pistas y objetos con los que llevar a Luso de vuelta a casa. Hubiera sido preferible que en este viaje el stylus hubiese tenido un mayor protagonismo, ya que se limita a darnos la posibilidad de seleccionar acciones en los combates y opciones en los menús. Al final, el resultado es que acabaremos usando la cruceta y los botones, los cuales resultan más rápidos y prácticos para estos quehaceres.
Por suerte, contamos con una opción inalámbrica con la que justificar un poco el uso de la tecnología de Nintendo DS, aunque el problema reside en que la comunicación se limita a intercambiar objetos con otro usuario que posea el videojuego. Pocos contenidos adicionales, por tanto, para un título que en el plano visual destaca por un uso extraordinario de las dos dimensiones, caracterizado en escenarios muy variados, coloridos y que son capaces de albergar una infinidad de personajes a la vez. Es cierto que se echa de menos la posibilidad de poder rotar la cámara, pero la inclusión de unos “sprites” de personajes ciertamente detallados (en los que se puede distinguir hasta el estado de ánimo) y de una banda sonora muy rítmica (marca de Hitoshi Sakimoto) ayudan a poner de manifiesto que estamos ante otro gran representante de la Alianza Ivalice.
Con la excusa de llevar a un niño hasta su hogar, Square Enix nos presenta un nuevo Final Fantasy Tactics que intenta llegar a un “target” más joven pero bajo el mismo planteamiento RPG táctico de siempre. El resultado es un videojuego largo, con muchas opciones y una gran profundidad de contenidos. No logra innovar con respecto a lo anterior y no consigue aprovechar las funcionalidades táctiles de DS, pero aún así nos encontramos ante un producto tremendamente sólido al que podrían acercarse tanto los fieles seguidores de la saga como aquellos que busquen un buen RPG con toques de estrategia. Completamente recomendable.
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