Análisis de Nidhogg II. ¡Estocada mortal!

Análisis de Nidhogg II. ¡Estocada mortal!
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Simple y directo, sí, pero también divertido como pocos. Nidhogg se ganó el aplauso de crítica y público gracias a sus alocados duelos con espada, y la secuela de este videojuego de acción no hace sino ahondar en las grandes virtudes del original... si bien es verdad se queda corto en cuanto a novedades como vemos en este análisis de Nidhogg 2.

Batirse en duelo con espadas es un arte, una lucha noble, elegante, hasta cierto punto bella... a no ser que decidas lo contrario; que frente a ese espíritu de justicia y respeto por el adversario se imponga el combate más vil y rastrero. En ambos casos el objetivo es el mismo, acabar con la vida del contrario, pero ciertamente la segunda opción, la de ir a por todas sin importar lo canallas que seamos, es la más divertida de todas. Justo una de las razones que hicieron de Nidhogg un videojuego tan apreciado por los aficionados a la acción. Era simple en extremo y, sin embargo, resultaba casi imposible no pasarlo bien con sus locos duelos de esgrima. Patadas voladoras, golpes bajos, estocadas por la espalda ¡y sí!, también la opción de arrojar tu arma contra el rival para ensartarlo cruelmente... o quedarte indefenso, solo con tus puños, tratando de sobrevivir a su venganza. Rápido, directo y brutalmente adictivo, tal ha sido el éxito cosechado por esta obra del estudio independiente Messhoff que, era cuestión de tiempo, ahora disfrutamos de una secuela igualmente divertida aunque muy corta de novedades.

La esencia es exactamente la misma, ¡nada cambia!, a excepción de la posibilidad de usar una mayor variedad de armas con sutiles diferencias que obligan a adoptar distintas estrategias de combate dependiendo, también, del arma que porte en sus manos el rival. Nada especialmente complejo, es verdad, pero suficiente para lograr que las batallas sean más divertidas y delirantes que las del videojuego original. Tiene mérito. Los últimos días no he dejado de reír mientras mataba y moría en este loco juego de acción 2D cuyo mayor problema es que ofrece una diversión efímera. Es innegable que su sistema de combate, aun a pesar de su simpleza, es puro vicio; una vez empiezas la partida te olvidas de todo lo demás, ya solo piensas en las perrerías con las que puedes sorprender al contrario. Pero ante su alarmante falta de novedades y modos de juego alternativos que ofrezcan nuevos desafíos, este cruento espectáculo puede tornarse repetitivo con demasiada prontitud. Más si reniegas del multijugador, que en Nidhogg 2 lo es todo.


¡Te pillé!

Espada en alto, con la mirada puesta en el adversario, tratando de dilucidar cuál será su siguiente movimiento. Tal vez corra y lance un golpe bajo, o salte con el fin de sorprendernos por la retaguardia. ¡No lo sabes!, y eso crea cierta tensión. Una incertidumbre que se convierte en emoción cuando rechazas una estocada directa al corazón, o te deslizas entre las piernas del rival para evadir su ataque. No hay muchas opciones, al final es siempre lo mismo... y a la vez distinto. Es la gran fortaleza de un videojuego con el que cuesta no pasarlo bien, especialmente cuando el que tienes delante es un amigo. Que no os engañe su aparente simpleza. Aunque apuesta por una acción directa y sin contemplaciones, el ir por ahí lanzando estocadas sin ton ni son solo conduce a la derrota. Hay que medir bien cada movimiento; estudiar al rival antes de atacar y, si es posible, reaccionar a tiempo para corregir una mala estratagema.

Hay diez escenarios en los que combatir, todos ellos muy distintos entre sí... en lo artístico, porque a nivel de mecánicas, poco varían, y es una lástima.
Hay diez escenarios en los que combatir, todos ellos muy distintos entre sí... en lo artístico, porque a nivel de mecánicas, poco varían, y es una lástima.


Si saltas y él tiene la espada en alto ¡despídete!, seguramente acabes ensartado, como ocurrirá si ruedas por el suelo cuando tu enemigo ha decidido poner su arma a esa altura. ¡No tendrá que hacer nada!, tú mismo acabarás con tu vida. Suena horrible, en verdad lo es, pero Nidhogg 2 consigue que este sangriento espectáculo sea una experiencia terriblemente divertida. Al final, como decía, siempre es lo mismo. Corres, te enfrentas al rival, y sigues adelante hasta alcanzar el final del nivel, si no es que acabas tras sus pasos evitando que él haga lo propio en la dirección contraria. La cuestión es que esto es un no parar; combates y mueres mientras sacas a relucir tus peores instintos gritando, maldiciendo y clamando "¡victoria!" cada vez que cubres de sangre tú arma. Engancha, emociona, divierte y por momentos, incluso sorprende con genuinas situaciones de combate con las que es imposible no soltar una carcajada maligna. Imaginad lanzar al abismo a un enemigo usando una patada voladora, o asesinarlos con la flecha que ellos mismos habían disparado. ¡Puro deleite! Y al final, la mejor descripción que se puede hacer del videojuego.

¡Estocada mortal!


No hay muchas opciones, al final es siempre lo mismo... y a la vez distinto

Este es un título de reflejos, de responder en cuestión de milisegundos a las acciones del contrario, buscando siempre el modo de sorprenderle con un golpe definitivo. Aquí no suele haber segundas oportunidades. Una estocada significa la muerte, así que vives la acción con ese temor; con miedo a un fracaso que se acrecienta cuando, en un mal movimiento, te desarman y te ves sin una espada con la que repeler los ataques del contrario. ¡Qué tensión!, y qué emocionante puede ser Nidhogg 2 cuando se lo propone. Lástima que esté tan falto de novedades. Las pocas armas que ofrece saben a poco en un videojuego que no ha sabido crecer planteando nuevos desafíos. Ya sea un mandoble, un cuchillo, el arco o el florete, hay pocos cambios en la acción. Tampoco los diez niveles en los que se desarrollan las batallas ofrecen variables más allá de lo estético; en uno hay trampas, en otros objetos móviles que pueden agilizar o ralentizar la marcha... pero en general, las arenas son bastante simples. Así que pasadas unas horas llegará el momento en el que el juego se torne repetitivo.

¡Estocada mortal!


Matar al rival con la flecha que él mismo disparó ¡es una sensación increíble! Es uno de esos momentos que hacen grande a este loco juego de acción.
Matar al rival con la flecha que él mismo disparó ¡es una sensación increíble! Es uno de esos momentos que hacen grande a este loco juego de acción.


Siempre es divertido echarse una partida contra otros jugadores, y el que puedas competir en un torneo contra ocho personas para determinar quién es el mejor está muy bien, pero cuando hablamos de un título que cuesta 19,99 euros no parece suficiente. Hay una gran evolución a nivel gráfico. Del estilo minimalista del original, con ese aire a los tiempos de Atari, se pasa a un videojuego mucho más colorido con unos escenarios repletos de detalles y unos monigotes como protagonistas que, si bien no terminan de convencerme a nivel de diseño, muestran una gran variedad de animaciones que dotan de cierta espectacularidad al videojuego. Pero en lo que importa, a nivel jugable, el equipo de Messhof ha pecado de excesivo conservadurismo. Ni tan siquiera la campaña para un solo jugador ofrece nada realmente interesante. Es un tutorial que te enseña a usar distintas armas contra enemigos cada vez más inteligentes y peliagudos… y ya está. Una vez superada, en unos 20 minutos, a no ser que quieras batir tu marca e intentar completarla en el menor tiempo posible, no encontrarás en ella un desafío digno ni nada nuevo realmente. Es un título pensado para disfrutarse en multijugador, mejor en local, por eso de verle la cara al contrario, aunque también admite opciones online.

Bueno

Sin sello
¡Estocada mortal!

Nidhogg II

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Es tan divertido como se esperaba pero Nidhogg 2 peca de excesivo conservadurismo. Cambia su imagen, ahora es más vistoso, y añade nuevas armas con las que enfrentarse a otros jugadores en emocionantes duelos con espada, pero lo nuevo de Messhoff se queda muy corto de novedades. Es un más de lo mismo, realmente adictivo en su faceta multijugador, que ofrece diversión inmediata pero también efímera. Se echan en falta más desafíos, nuevos retos con los que hacer frente a su loca acción.

  • Diversión instantánea. Cuesta no reírse con sus disparatados duelos
  • Su multijugador es diversión en estado puro
  • Nuevas armas y escenarios muy variados...
  • ... aunque con pocos cambios a nivel jugable
  • Se echan en falta nuevos desafíos. Es un juego muy conservador
  • Su acción se siente algo limitada. En solitario pierde casi toda su diversión
Jugadores: 1-2
Idioma: Textos en inglés
Duración: Incalculable
Ver requisitos del sistema
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

12.876 visualizaciones

100 DETALLES OCULTOS de RED DEAD REDEMPTION 2

¿Qué detalles ocultos guarda Red Dead Redemption 2? En el video de hoy os presentamos más de 100 curiosidades distintas acerca de la aventura de Arthur Morgan y de John Marston que nos presentó Rockstar Games en 2018.