Análisis de Portal 2

Análisis de Portal 2
Facebook Twitter Flipboard E-mail

Los videojuegos de puzles son tradicionalmente un género destinado a minorías, sin embargo hay una saga que ha conseguido cambiar la tendencia. Portal, de los geniales desarrolladores de Half-Life, tiene ya segunda parte para PC, y ésta es incluso superior a su predecesor; regalándonos el que es, de momento, el más firme candidato a juego del año.

La saga Portal se ha convertido para los videojuegos en una de las pocas franquicias capaces de poner de acuerdo a todos los aficionados acerca de su sobresaliente condición. ¿Cómo lo ha conseguido? Con unas cotas de calidad formidables que quedan fuera de toda duda, y que son capaces de lograr una unanimidad en su aceptación que otras sagas sólo pueden soñar. Puede que el nuevo juego de Valve no arrase en sus ventas, se lo merecería pero no tiene aspecto de ser el típico blockbuster revienta tops, pero sí logrará algo mucho más difícil: Conseguir el aplauso generalizado.

La excelente acogida de la que gozó la primera parte, sin lugar a dudas, se reedita en la secuela; principalmente por la habilidad de Valve para repetir los éxitos del original y de ampliarlos con las novedades que les permite introducir el hecho de que ésta será por primera vez un juego plenamente retail e independiente (recordemos que el primer Portal se vendió conjuntamente con The Orange Box). El equipo creador de Half-Life consigue, de este modo, un videojuego mucho más redondo en todos los sentidos, con más contenidos e inspiración; y que, a pesar de perder lógicamente el factor sorpresa de su predecesor, brinda a los aficionados un lanzamiento mucho más completo.

La adición del cooperativo para dos usuarios (a través de internet o a pantalla dividida en consolas) es la incorporación más notable y llamativa, no obstante ésta no debe distraernos del hecho de que hay muchas novedades más y también de enorme importancia: Una narrativa más compacta, unos rompecabezas más imaginativos, un tempo mucho más acertado... Portal 2 es, en definitiva, un mejor videojuego y sobre todo una demostración increíblemente brillante de que los juegos de rompecabezas y destreza mental no tienen porqué estar reñidos con la habilidad con las manos y los reflejos.

Sujeto de Pruebas
Portal 2 comienza de forma espectacular. Eliminando los nexos puros y duros con la primera parte en los primeros minutos, caminaremos tan desorientados como nuestra protagonista por los compases iniciales del programa. Al comienzo descubriremos que nada es lo que parece, y que lo que en los instantes de apertura parece ser una aventura en la que caminaremos solos, rápidamente recibe inesperados aliados y viejos conocidos entre los enemigos.

No vamos a dar muchas pistas sobre el argumento porque Valve lo traza con habilidad y salpicaríamos el análisis de los siempre molestos spoilers, pero sí adelantamos la vuelta de GlaDOS puesto que Valve se ha encargado de promocionarla a menudo durante el desarrollo. El memorable villano, escogido entre nuestros favoritos en el reciente especial "Encantado de Odiarte", vuelve a ser la audaz pero pueril IA que nos hacía la vida imposible en la primera parte y que ahora vuelve con renovadas ansias de venganza.

Situaciones geniales como vernos a nosotros mismos través de un portal interdimensional son habituales en Portal. Extraordinario para entender en qué consiste el juego.
Situaciones geniales como vernos a nosotros mismos través de un portal interdimensional son habituales en Portal. Extraordinario para entender en qué consiste el juego.

Los mejores momentos del juego de hecho nos los regala ella con sus comentarios para desanimarnos, algunos de ellos fáciles e infantiles como su propia personalidad, y otros verdaderas puñaladas traperas en la espalda que resultarán geniales e hilarantes. No es que el videojuego sea un prodigio de narrativa precisamente, no cuenta en realidad gran cosa más allá de nuestra enésima huída de unas instalaciones ahora derruidas por los eventos acaecidos en el original, pero lo divertido que resulta este sencillo periplo es el verdadero objetivo que ha buscado Valve en la campaña individual, y por todo ello es un auténtico triunfo.

La simpatía gana por goleada al argumento o al desarrollo de personajes, especialmente en una segunda mitad de campaña algo rutinaria en cuanto a la historia, no hay nada de eso en Portal 2 y ni falta que hace. Lo que sí hay son monólogos muy agradables y divertidos, ingeniosamente escritos por los guionistas de Valve (Erik Wolpaw y Chet Faliszek) e impecablemente ejecutados por un doblaje a nuestro idioma sencillamente fantástico pero del que ya hablaremos más adelante. Chell, la protagonista, estará a menudo acompañada por las voces y presencias de Wheatley, la simpática esfera de IA, y de la propia GlaDOS: Cuyas divertidas y antagónicas personalidades nos dejarán los momentos más divertidos y agradables del programa.

Aquí  comienza nuestro periplo en la campaña de Portal 2. ¿Acogedor? Puede ser, pero el infierno no tardará  mucho en desencadenarse.
Aquí comienza nuestro periplo en la campaña de Portal 2. ¿Acogedor? Puede ser, pero el infierno no tardará mucho en desencadenarse.

Pero, ¿quién es Chell? Hemos dejado premeditadamente a la protagonista del juego para el final por dos motivos: En primer lugar su manifiesta falta de carisma, que palidece especialmente si la comparamos con el gracejo que demuestran en cada palabra que pronuncian el resto de personajes; en segundo lugar por preservar el argumento del primer título del que ella también es protagonista para todos los usuarios que no tuvieron ocasión de disfrutar de él. Lo único que señalaremos es que, al igual que en Portal, volvemos a ser un sujeto de pruebas en unas instalaciones científicas en las que deberemos resolver infinidad de puzles con la ayuda de nuestra arma para crear entradas y salidas con portales interdimensionales; todo ello con la intención de escapar de unos laboratorios -los Aperture Laboratories- en los que estamos atrapados.

El Futuro eres Tú
Describir en qué consiste Portal es tan sencillo como genial, y es el propio concepto de llaneza y al mismo tiempo complejidad del título que nos ocupa. En el juego de Valve somos un personaje humano, al que dirigimos en primera persona como en un shooter cualquiera, que como decimos cuenta con un arma capaz de crear puertas de entrada y salida en diferentes puntos de los escenarios; y que con la única ayuda de esta improbable herramienta debe superar infinidad de tests, pruebas e intrincados rompecabezas que el villano del juego, la mencionada IA GlaDOS, le pondrá por delante.

Lo que supone el verdadero logro del videojuego es su capacidad para utilizar una premisa aparentemente simple, no obstante de un ingenio increíble, para construir una experiencia jugable que mezcla con inusitada habilidad tres géneros aparentemente imposibles de cuajar conjuntamente: Acción en primera persona, plataformas y rompecabezas.

Y es que Portal 2, al igual que la primera parte, comienza sencillo con acertijos de una lógica aplastante y de un componente muy simple. No obstante esto es sólo un remanso de calma para que el aficionado, especialmente el debutante, se haga con las mecánicas de la experiencia: Con una curva de dificultad gradada de forma insuperable, poco a poco va aumentando el reto y se van intercalando componentes más y más difíciles de precisión y habilidad.

El simpático Wheatley nos echará  una mano con sus divertidas instrucciones y su estrambótico sentido del humor.
El simpático Wheatley nos echará una mano con sus divertidas instrucciones y su estrambótico sentido del humor.

Así pues al comienzo un rompecabezas puede ser tan simple como crear una puerta azul (de entrada) en el piso de abajo de una construcción y una de salida (naranja) en el piso superior para sortear un desnivel imposible de saltar. Sencillo, ¿no? No lo es tanto cuando a esta aparentemente sencilla mecánica le añadimos más adelante infinidad de elementos secundarios como torretas ametralladoras, lásers que activan mecanismos, plataformas que aparecen y desaparecen, geles de repulsión, plataformas de salto, tubos succionadores y una verdadera infinidad de mecanismos sencillamente geniales.

El primer videojuego ya era un ejemplo de innovación a la hora no sólo de proponer una mecánica de juego muy novedosa sino, especialmente, de cultivarla con ingeniosos dispositivos que aumentan la diversión y la complejidad de todo lo que hacemos; la segunda entrega es un ejemplo exponencialmente más labrado de ello. De este modo es divertido y reconfortante resolver los más sencillos puzles, pero todavía lo es más cuando debemos, por ejemplo, crear un portal de entrada para que pueda traspasarlo un fluido que derribe una plataforma mientras al mismo tiempo corremos en dirección contraria hasta un punto de propulsión que nos permita cruzar la estancia volando antes de que la plataforma vuelva a recomponer su posición inicial. ¿Complicado? Quizá, pero el juego dosifica tan bien su dificultad que prácticamente sin darnos cuenta estaremos solucionando complicadísimos rompecabezas que mezclarán habilidad, precisión e ingenio sin darnos cuenta de que hace sólo unas horas resolvíamos unos desafíos que, en comparación, serían como quitarle un caramelo a un niño.

El videojuego está  repleto de guiños incluso en los paneles de instrucciones de los laboratorios.
El videojuego está repleto de guiños incluso en los paneles de instrucciones de los laboratorios.

Para ampliar la propuesta jugable y de vida útil del programa, Valve ha introducido también como novedad un modo cooperativo que permite a dos usuarios aunar esfuerzos para resolver diferentes a través de Steam, con una modalidad a pantalla dividida ausente en la edición de compatibles. La aventura está protagonizada por dos encantadores robots que se ayudarán el uno al otro para resolver divertidos rompecabezas del mismo tipo que los de la campaña individual. Y decimos del mismo tipo porque obviamente las premisas de esta campaña alternativa son las mismas, pero sus responsables han tenido la habilidad de incorporar unos retos diferentes para sacar partido del tipo de jugabilidad que aportan dos personajes al mismo tiempo. Así pues será imprescindible que los dos trabajen conjuntamente, pasándose objetos el uno al otro, activando un botón para que el otro acceda a una estancia, marcándole los objetivos a su compañero, etcétera.

En lo tocante a la duración siempre es complicado cuantificar en términos de horas lo que puede suponer acabar un videojuego, y más todavía en títulos de puzles, de modo que no nos inclinaremos por mencionar un número. ¿8 horas? ¿12? La duración de la suma de las campañas individuales y cooperativas dependerá muy mucho de la habilidad del jugador para resolver este tipo de situaciones, y también en buena medida de si jugamos o no a la primera parte puesto que la mecánica de algunos rompecabezas se repite del original.

¿Peligroso? No necesariamente, las habilidades de Chell le permiten saltar grandes alturas sin hacerse daño.
¿Peligroso? No necesariamente, las habilidades de Chell le permiten saltar grandes alturas sin hacerse daño.

Un Nuevo Mundo -Gráficos y Tecnología-
En lo visual Portal 2 es un videojuego tan resultón como el original, pero en esta ocasión apoyado por una serie de directrices estéticas que contribuyen a hacer de la segunda parte una obra mucho más redonda. En el original no salíamos de las instalaciones científicas y no dejábamos en ningún momento de recorrer unos asépticos escenarios prácticamente idénticos entre sí. Es esta ocasión Valve deja claro desde el primer instante que busca romper con la monocromática dirección artística de la primera parte, apoyándose en el hecho de que las instalaciones están prácticamente destruidas y ello aporta interesantes réditos de diseño.

La vegetación se abre paso con enredaderas y plantas donde antes había impolutos pasillos, y los escombros que inundan algunas de las estancias dan un toque bien diferenciado a primera y segunda entregas de la serie. No obstante no todo son cambios, también se recuperan impecables diseños como los de la propia GlaDOS o los de las carismáticas torretas ametralladoras, aderezándolas además con algunos trabajos de nuevo cuño.

Todo el juego se desarrolla en primera persona, lo que permite la misma sensación de inmersión que el primer título de la saga. Las características de impresión de velocidad cuando volamos o caemos también reflejan de nuevo un gran trabajo por parte de Valve, especialmente en lo tocante a unas físicas tan bien conseguidas como lo que la compañía creadora de Half Life nos ha venido acostumbrando: Quizá no por una espectacularidad en la línea de los resultados ofrecidos por Euphoria en, por ejemplo, GTA IV; pero sí con unos réditos sobresalientes en cuanto a realismo y veracidad.

Siguiendo con la faceta tecnológica el videojuego deja noticias muy positivas en su práctica totalidad, aunque hay un elemento que enturbia algo el conjunto. Entre lo bueno, muy bueno más bien, hay que citar una tasa de imágenes por segundo robusta y fluida independientemente del equipo con el que contemos por una optimización extraordinaria, una mecánica de fluidos novedosa y muy cuidada, así como unas técnicas de iluminación que debutan para ofrecer un panorama mucho más realista a todo lo que hay en pantalla. No obstante lo mejor de todo este dispendio tecnológico es que se conjunta con las ya mencionadas físicas, formidables, para potenciar la jugabilidad: No es que el motor visual emplee estos avances para consolidar un juego muy vistoso sino que también, y como principal virtud, lo que se consigue es hacer un título más divertido. ¿El precio? Unos tiempos de carga muy reiterativos a pesar de que en la versión para compatibles son sensiblemente más breves que en las ediciones de consolas: Cada sección de capítulo está separada de la siguiente por una pantalla de carga, lo que hace que en algunos casos pasemos un par de minutos (especialmente en los niveles iniciales) resolviendo un puzle y accedamos al ascensor que nos lleva hasta el siguiente separándolo con un, en ocasiones, exasperante por repetición tiempo de carga.

Los dos robots que protagonizan la experiencia de juego cooperativo son una suerte de revisión del estilo de El Gordo y el Flaco en clave robótica.
Los dos robots que protagonizan la experiencia de juego cooperativo son una suerte de revisión del estilo de El Gordo y el Flaco en clave robótica.

Por lo que respecta a los elementos característicos de la versión de compatibles hay que destacar las variadas opciones visuales que nos permiten configurar al detalle la experiencia estética. Desde el menú podremos alterar la resolución del título, además del antialiasing, el modo ventana, los filtros anisotrópicos, la sincronía vertical, los detalles de efectos, modelos y texturas y del matizador. Además podemos activar un modo de preservación de batería muy útil si disfrutamos del programa en portátiles. Con todas las opciones disponibles al máximo el juego presenta un aspecto francamente bueno, muy superior al de consolas en cuanto a nitidez y fluidez, y que rinde de forma extraordinaria.

En el equipo de pruebas de redacción -i7, GeForce GTX 260, 8 GB de Ram- los resultados han estado en todo momento muy por encima de los 60 frames por segundo, y tras el testeo en un equipo algo más modesto pero rayano en los requisitos mínimos del juego los frames por segundo también han sido generosos con los lógicos recortes en algunos de los parámetros. Cabe destacar también de la versión de compatibles que el juego ocupa algo más de 12 GB y que permite configurar el pad de Xbox 360 para utilizarlo como método de control alternativo.

En lo sonoro el título es sencillamente redondo. La música no es particularmente dominante, pero cuando aparece lo hace con efectividad (momentos de tensión) o con simpatía (momentos de alivio cómico). Los efectos de audio son sobresalientes y el juego, como ya adelantamos, llega a nuestro país completamente traducido y con un nivel sobresaliente, y francamente por encima de a lo que los trabajos de localización a nuestro idioma nos han venido acostumbrando.

Los rompecabezas que veremos en el cooperativo son imposibles de resolver sin la colaboración de los dos usuarios.
Los rompecabezas que veremos en el cooperativo son imposibles de resolver sin la colaboración de los dos usuarios.

Piensa en Clave, Piensa en Portal...
Con Portal 2 Valve consigue lo que parecía difícil, mejorar la primera parte y labrar un título igual de formidable en todos los sentidos, pero con una duración mayor, unos retos más complejos y reconfortantes y nuevas y ricas incorporaciones a la vida útil del videojuego como un modo cooperativo.

Portal 2 es genial por muchos motivos, pero quizá el más meritorio es su capacidad para llegar a infinidad de tipos de usuario completamente diferentes. ¿Cómo hacer que un juego de rompecabezas sea atractivo para el gran público? ¿Cómo conseguir que un juego de acción sea atractivo para los amantes de los puzles? El videojuego de Valve demuestra una capacidad inusitada de llegar a diferentes espectros de población, elaborando un perfecto cóctel de propuestas jugables que no sólo no dejará indiferente a nadie, sino que consigue enganchar tan fácilmente a un hardcore de los videojuegos como a un neófito en el arte del entretenimiento interactivo.

Esa es la verdadera maestría de los chicos de Valve, uno de los más reputados estudios especializados en first person shooters, que demuestran que saben salirse del patrón Half-Life para acercarse a un estilo jugable aparentemente similar en la forma pero, en realidad, diferente por completo en el fondo de las aventuras de Gordon Freeman. Portal es como esa joya de cine independiente que puede no ser tan popular como las grandes marcas cinematográficas, en esta ocasión de videojuegos, pero que atesora no sólo una calidad con pocos parangones, sino que además es capaz de sorprender de forma muy agradable a jugadores y no-jugadores.

La falta de variedad en los escenarios fue uno de los puntos negativos del original, en la secuela se ha introducido una mayor diversidad en este campo.
La falta de variedad en los escenarios fue uno de los puntos negativos del original, en la secuela se ha introducido una mayor diversidad en este campo.

Portal 2 es tan hipnótico y adictivo para el que juega como para el que simplemente observa, y esta es una facultad que, sin ofrecer unos gráficos de ultimísima generación del tipo de Uncharted o Gears of War, es prácticamente imposible de conseguir en estos tiempos sin una propuesta jugable tan impresionante como la suya.

A todo esto hay que sumar una duración variable en función de nuestras habilidades pero muy razonable, potenciada además por la inclusión de un modo cooperativo especialmente rejugable y en el que dos usuarios pueden divertirse por igual con los imaginativos desafíos que propone el título.

Imprescindible

Obra maestra

Portal 2

Por: El equipo de 3DJuegos
Obra maestra

Sentido del humor, rompecabezas tremendamente ingeniosos y hábil mezcla de destreza cerebral con habilidad... ¿Imposible de combinar? En absoluto. Valve demuestra una vez más su increíble maestría con uno de los mejores videojuegos en lo que va de año. Portal 2 es, al mismo tiempo, imaginativo, estimulante, adictivo y cargado de momentos hilarantes, y como tal puede ser recomendado a cualquier tipo de público (sin importar edad ni condición) con la seguridad del acierto.

Comprar Portal 2
Jugadores: 1-2
Idioma: Manual en español, textos en español y voces en español
Duración:
Ver requisitos del sistema
Comentarios cerrados
VÍDEO ESPECIAL

25.094 visualizaciones

20 MEJORES JRPGS DE 2024 Y MAS ALLA

Hace sólo unos días que publicábamos nuestro especial sobre los RPG, Action-RPG y CRPG que llegarán a lo largo del año 2024 y en el futuro todavía más lejano, y hoy toca el día de hacer lo propio con los videojuegos JRPG que más esperamos de los próximos tiempos...