Pro Evolution Soccer necesitaba un cambio, un nuevo rumbo que le hiciera reencontrarse a sí mismo, y por ello ha ideado una experiencia de juego desde cero tan arriesgada como innovadora. Un completo simulador donde el fútbol espectáculo cobra sentido desde fuera y desde dentro, un amplio abanico de nuevas oportunidades de juego con un único objetivo: proclamarse campeón.
Konami lo sabía. Eran conscientes de que tenían que hacer un cambio en su serie futbolística. Su simulador deportivo, exitoso en el pasado, ha perdido el reinado en la actual generación; tanto por el buen hacer de FIFA como por deméritos propios al no saber adaptarse a las nuevas exigencias. La edición 2009 es ahora parte del pasado y se ha dado borrón al asunto derrumbando los cimientos anteriores para dar entrada a nueva savia. PES 2010 llega repleto de novedades y con un trabajo realizado desde cero para presentar un PES como pocos antes habían imaginado.
Había ganas de ver algo más del nuevo PES y sobre todo de jugar profundamente a un título que promete mucho, pero del que muy poco se había visto. Konami nos invitó a disfrutar de una beta al 65% de su desarrollo bajo una Xbox 360, hecho suficiente para comprobar que las cosas han tomado un nuevo rumbo: parece que sus creadores se han tomado muy en serio el objetivo de llevar a su simulador a lo más alto.
Tal como la gente de EA con su FIFA, el estudio nipón ha habilitado un foro especial para escuchar a sus usuarios, para aprender de ellos y crear un juego de fútbol a imagen y semejanza de millones de fans que reclamaban cambios, unos cambios que se han introducido en esta nueva entrega para presentar un fútbol que promete ser una explosva caja de sorpresas.
Rehaciendo el camino
Para empezar el motor gráfico se ha creado desde cero. No había ganas de reciclar un engine que ya acusaba desde hacía años sus serias limitaciones. En PES 2010 se ha apostado por un realismo enfermizo, tan real que podemos ver a los jugadores sudar, su bello facial en lugares menos visibles como brazos o piernas, y unas caras idénticas a las reales, tal como puede apreciarse en las imágenes difundidas de Messi y Torres. Es decir, entre otras cosas, un texturizado de calado para un juego de nivel. El modelado de los futbolistas parece mucho más compacto, un factor que, unido al nuevo concepto en las nuevas animaciones realizadas, nos aseguran un espectáculo de grandes proporciones, ofreciéndonos unas animaciones tan naturales como realistas. Mención especial al reflejo de la luz sobre los modelados, que llega a sorprender si se observa en movimiento.
También el apartado sonoro queda potenciado con una participación más activa del público en las circunstancias del partido, variando su comportamiento dependiendo de si animan a un equipo u otro, y con mayor número de grabaciones reales. Por su parte los comentaristas siguen ahora más de cerca las jugadas, en esta ocasión tenemos en la narración a Carlos Martínez de Canal +, que por fortuna sustituye a Juan Carlos Rivero, y de nuevo a Julio Maldonado “Maldini” en los análisis.
No obstante el cambio más radical viene por la parte estratégica que afecta de sobremanera a la jugabilidad. Las tácticas pueden personalizarse de forma tremendamente profunda comparado con las versiones anteriores, apostando por la individualidad personal de cada jugador para dotar de personalidad propia al conjunto. Cada futbolista tiene unas habilidades básicas y especiales que pueden activarse y modificarse, y a partir de ahí el once se adaptará, ya que suelen crearse a imagen de sus estrellas. Esto hace que prácticamente dos equipos nunca sean iguales, y que la personalización sea casi infinita.
Tácticas personalizadas, jugadores únicos
Todo esto se apoya en el llamado Card System, que es una suerte de habilidades especiales que tienen una serie de jugadores, y que en cualquier momento puede activarse o desactivarse. Este sistema pretende dar una frescura mayor y sobre todo reflejar nuestras ideas sobre el juego.
Dejando de lado las tácticas individuales, PES 2010 incorpora a nivel de equipo los llamados “sliders”, unos parámetros generales que podremos ajustar para definir las características globales del equipo. Frecuencia de pase, la defensa, la apertura en bandas, el estilo de juego, el ataque o la presión sobre líneas, son algunos de estos citados parámetros. En el menú de las tácticas podemos ver una preview de los cambios, llegando a variar en tiempo real las tácticas apoyándonos en la cruceta del mando.
El juego, por otro lado, va a un ritmo mucho más pausado, y por lo tanto más en consonancia con la realidad, sucediéndose ocasiones de ataque de manera más comprensible y dejando de lado el carácter de “corre calles” del que mucho se ha criticado en su pasado. En aras de la veracidad ya no será tan sencillo superar la línea defensiva del contrario, y la anarquía de las defensas ha sido eliminada de un plumazo.
Por otra parte, y aunque sólo pudimos disputar partidos amistosos, se nos dieron más detalles sobre la Liga Master, que incluirá la Champions League y la UEFA Europa League. El sistema de traspasos ahora se relaciona más con elementos tales como la clasificación última del equipo, o su papel en las competiciones internacionales, ya que los auténticos cracks van a valorar mucho la trayectoria de un equipo. El juego poseerá un amplio abanico de licencias oficiales de ligas importantes, y también contará con otras de menor calado pero que dejan un paisaje más digno que en las algo rudimentarias últimas entregas. También se ha variado ligeramente el concepto de las penas máximas, con mayor participación del jugador y con situaciones más equilibradas.
La sensación tras disputar varias partidas al juego es más que positiva, con una apuesta por la renovación muy seria. Los partidos se hacen más equilibrados y profundos; y los cambios tácticos se reflejan de una manera mayor a como se esperaba. Ver cómo un equipo se hace a imagen y semejanza del usuario junto con la cantidad de parámetros a variar, hace que guiar los hilos de un club cobre mayor sentido. Dadas las posibilidades de juego se puede leer la disposición de los equipos variando en función del transcurso del encuentro.
Parte de la herencia perdida de los PES de antaño se ha encontrado de golpe con una apuesta ya next-gen, no libre de arriesgadas decisiones, pero que tras lo visto y jugado parece reencontrarse consigo mismo.
Pro Evolution Soccer 2010 aparecerá totalmente renovado este mismo otoño en Xbox 360, PS3, Wii, PC, PSP y PS2 para traernos el fútbol espectáculo tanto gráfico como táctico. Una apuesta arriesgada pero necesaria.