El circo de la Formula 1 regresa a la nueva generación de consolas, aunque esta vez con un nuevo magnatario: Codemasters. Los británicos, expertos en el género de la conducción, nos dejan dar unas vueltas al circuito de Spa Francochamps para comprobar la experiencia de circular bajo lluvia en un simulador tan exigente como la propia competición en que se basa.
Demasiado tiempo sin Formula 1 o, al menos, del bueno. Los aficionados a esta glamourosa y exigente competición llevan ya muchos años sin ver un simulador a la altura, pero Codemasters se ha planteado durante este 2010 lanzar al mercado uno de los videojuegos más avanzados, pulidos y detallistas de este gran circo.
Paul Jeal (jefe de desarrollo de F1 2010) estaba en el E3 para contarnos los secretos de su último título de conducción, un género que la compañía británica ha cultivado tradicionalmente. Y los resultados saltan a la vista, porque su obra es, de todas las existentes hasta la fecha, tal vez la más fiel a la realidad de pilotos, escuderías y, ante todo, sensación de conducción.
"Hemos querido reflejar todo lo que vive el piloto desde que ficha por un equipo hasta que se convierte en campeón del mundo. Para ello, no sólo tendremos que tomar decisiones a lo largo de la temporada (como tomar asiento en un equipo para ir progresando), sino también que lidiar con entrevistas o negociar con nuestro manager. Todo esto se nos mostró representado desde el menú principal de juego, donde incluso podíamos apreciar -en cada momento del fin de semana de carreras- cuál era la presencia de periodistas en nuestro "motor home". Si ganamos una carrera, abandonamos un equipo o nos salimos de una pista perteneciendo a un equipo grande, estarán allí para sacarnos una declaración. Si simplemente somos de un equipo modesto y no conseguimos nada especial, apenas veremos a un par de ellos.
El circo más exigente
En este menú de juego, que repetimos es una representación del "paddock" de nuestro equipo, pudimos apreciar la presencia de modalidades como Carrera, Time Trial, o Multiplayer justo antes de ponernos el casco para circular a 300 km/h por el circuito de Spa Francochamps (Bélgica), uno de los más atractivos de todo el campeonato.
La fidelidad de los trazados es enorme, con baches, ondulaciones del terreno e incluso en lo referente a elementos exteriores de la pista (gradas, árboles, praderas, público...), pero lo que más nos llamó la atención de todo fue el efecto agua. "Las condiciones climáticas es un aspecto en el que hemos puesto especial énfasis. Como en las carreras reales, el espectáculo aumenta cuando está lloviendo, y así lo hemos querido reflejar", nos comentaba Paul Jeal mientras nos salíamos de la pista con el trazado mojado, las gotas de lluvia moviéndose por nuestro monoplaza y el barro saltando por encima de nuestra chapa al volver de nuevo a la pista con unas ruedas que iban dejando poco a poco la gravilla que habían cogido.
El nivel de detalle alcanzado por F1 2010 en términos gráficos es extremo, pero no para que resulte un recurso meramente estético. Ante nuestra pregunta sobre si notaremos la degradación de los neumáticos, el desarrollador nos respondió: "Por supuesto. Aparte de disponer de un gráfico con los daños del coche, podrás ver directamente a través de la vista interior (perspectiva del piloto) si tus ruedas han sufrido desgaste".
Siéntete como un piloto de F1
Los daños estaban desactivados en esta versión de demostración, aunque era difícil salirse de la pista si tenías las ayudas activadas (control de tracción, ayuda a la frenada, ABS...), así que pedimos a Paul que desactivara todo... y bajo la lluvia. Los efectos se hacen notar. No sólo hay que controlarse, sino que hay que empezar a frenar mucho más pronto para no hacerlo de golpe. De no hacerlo las ruedas patinarán, llevándonos hasta las vallas de protección para dejarnos apreciar, por otra parte, el efecto de la fuerza G sobre la vista del piloto, que se distorsionará durante una fracción de segundo.
La mejor experiencia de juego se logra con la cámara del "cockpit" (la que vemos en las retransmisiones de TV), aunque existen más vistas; entre ellas, dos externas y dos más internas, una sin ver el chasis y otra contemplando todo desde el mismísimo casco del piloto, para hacernos así conscientes del detalle aplicado a cada volante.
Otra brillante incorporación consiste en la posibilidad de optar entre diferentes configuraciones de coche no sólo antes de salir de la pista, sino una vez sobre ella. Así, gozamos de la oportunidad de modificar alerones (más altos o más bajos) y rendimiento del motor al momento, pulsando "arriba" en la cruceta digital. Como ocurre con los pilotos profesionales, será una buena manera para cambiar configuraciones en tiempo real dependiendo de las exigencias de cada zona del circuito. Así será posible lograr las mejores vueltas rápidas.
Podio asegurado
Gracias a la inclusión de un sistema dinámico de meteorología, se da la oportunidad de que pequeños equipos salten a la fama. Y es que durante las carreras donde caigan gotas de lluvia será más fácil obtener resultados sorprendentes, aunque formemos parte de equipos modestos. "Hemos querido incorporar la posibilidad de que te subas al podio con equipos como Toro Rosso si demuestras tu pericia como piloto en situaciones adversas. Como ocurre en la competición del mundo real, aquí puedes tener tu momento de gloria aún partiendo de la última línea de parrilla. Hemos invertido mucho talento y dinero para que cosas como éstas sean posibles en F1 2010", nos aclaró el jefe de desarrollo.
Por último, cabe destacar que el título tendrá multijugador (online incluido), además de soporte a pantalla partida, aunque nunca para jugar una competición en cooperativo.
No obstante, parecen elementos más que suficientes para convertir a F1 2010 no sólo en el mejor simulador de Formula 1 de esta generación, sino en uno de los más destacados títulos de toda la historia del subgénero. En septiembre comprobaremos en Xbox 360, PlayStation 3 y PC hasta donde han sido capaces de llegar los desarrolladores de Codemasters. Aunque seguro que al menos consiguen el podio.