1.970 millones de dólares en este ámbito, y 51 millones de usuarios únicos durante los tres meses.
La distribuidora norteamericana Activision, en propiedad de marcas tan potentes como Overwatch de Blizzard o la saga Call of Duty, ha anunciado sus resultados económicos para el primer trimestre de su año fiscal 2018. Uno trufado de éxitos comerciales para la editora.
Este período de tres meses ha registrado una cantidad neta de beneficios por ventas de 1.380 millones de dólares, un aumento notable respecto a los 1.200 millones de dólares del mismo período del año pasado. Si hablamos de brutos, sólo los canales digitales han supuesto 1.200 millones de dólares en ingresos, también un incremento respecto a los 1.070 millones del mismo período del año anterior. Y, por último, si hablamos de los totales, los beneficios netos han sido un nuevo récord para la firma, con 1.970 millones de dólares por los 1.730 millones del mismo período del año anterior.
Los datos han sido tan positivos gracias a la excelente vida comercial que sigue atesorando Call of Duty: WWII, que sólo ha sido superado en réditos comerciales para ese trimestre por el ya veterano Call of Duty: Black Ops 3.
Si hablamos de usuarios mensuales activos, un dato que le gusta compartir a Activision, encontramos que ha habido la friolera de 51 millones de personas registradas en este ámbito, con la franquicia Call of Duty registrando un particular aumento en estos números durante este período y siendo 38 millones de ellos pertenecientes a los juegos de Blizzard.