Un joven Sam Lake puso cara y algunas animaciones a Max para ahorrar en el desarrollo.
Es una de las historias más conocidas de Remedy: la cara de Max Payne en su primera aventura a principios de la pasada década es la de Sam Lake, uno de sus creadores. El desarrollador se ofreció para ahorrar un dinero en Remedy y no tener que contratar a ningún actor o profesional para el papel del protagonista. Aunque hay contenido del juego original, parece que en los cajones de Remedy aún restaba elementos inéditos. Lake ha querido hacerlos públicos.
De su difusión se ha encargado el portal DualShockers, que estuvo presente en una reciente charla impartida por el mismo Sam Lake en París. En el vídeo se pueden ver algunas tomas reales usadas en el juego y la comparación con el resultado final. Entre las tomas hay algunas divertidas tomas falsas protagonizadas por el propio Sam Lake y un cargador de pistola algo travieso. Los orígenes de una producción mítica en PC y consolas como PlayStation 2 o Xbox.
La actualidad de Remedy pasa por Quantum Break, que espera su lanzamiento exclusivo en Xbox One el próximo 5 de abril.