La idea era llevar a Toon Link a un entorno terrestre, lejos del mar, pero la presión de los fans motivó el cambio de estética.
Durante un tiempo Nintendo estuvo trabajando en The Legend of Zelda: The Wind Waker 2 pero, al final, los de Kioto cambiaron de planes y convirtieron esta colorida aventura en un videojuego más oscuro y realista, en la línea de Ocarina of Time. Se trata, claro, de The Legend of Zelda: Twilight Princess de GameCube y Wii, que este mismo año ha sido remasterizado para Wii U. ¿A qué se debió este cambio?
Gracias al libro The Legend of Zelda: Art & Artifacts, que acaba de publicarse en Japón, uno de los artistas de la Gran N reconoce que la presión de los fans, que pedían justo eso, un videojuego más del estilo de Zelda: OOT, llevó a Nintendo a modificar sus planes de trabajo. "La demanda de un juego más parecido a Ocarina era cada vez mayor en esa época", afirma Satoru Takizawa; "hicimos lo mejor que pudimos con The Wind Waker, y pusimos en él todo nuestro esfuerzo".
Sobre esta secuela, el artista japonés confirma que abandonaría el mar visto en el original para adentrar a Link en un entorno más tradicional, sobre tierra firme, que podría haber explorado a lomos de su caballo. Reconoce que "las proporciones del Link de The Wind Waker no eran adecuadas para que pudiera cabalgar", ni por estética, quedaba bien convertirlo en adulto.
"Mientras se nos planteaba este problema escuchamos la creciente demanda de un estilo más realista. Las películas de fantasía y acción habían aumentado su popularidad en aquel momento, así que considerando todo, decidimos hacerlo así".