El famoso superhéroe de Marvel entra por la puerta grande de PlayStation VR protagonizando una aventura de acción en primera persona bastante interesante a pesar de sus defectos. Análisis de Iron Man VR, el salto a la realidad virtual del héroe de Marvel.
Para muchos aficionados al mundo de los cómics, Iron Man se ha convertido a lo largo de los últimos años en uno de los personajes más queridos y conocidos del universo Marvel. Y eso es mucho decir. No tengo claro si llega a codearse con auténticos pilares de la cultura actual como puede ser Spiderman, por ejemplo, pero está clarísimo que su figura se ha visto muy potenciada durante los últimos tiempos gracias a las películas.
Precisamente y aprovechando su tirón, Sony y el estudio Camouflaj, que saltó a la fama con Republique, una aventura originariamente diseñada para sistemas móviles que personalmente me gustó bastante, han querido dar forma a una aventura de acción protagonizada totalmente por Tony Stark y su famosa armadura. Un título que se ha convertido en uno de los lanzamientos más importantes para la realidad virtual de PlayStation VR, que en los últimos tiempos ha perdido fuerza en cuanto a lanzamientos importantes. Por tanto, ya de entrada, es una gran alegría que Sony haya apostado decididamente por sacar el máximo provecho a esta tecnología. Y no podía hacerlo con un mejor aval.
El principal reclamo que posee este título tiene que ver ya no sólo con que esté protagonizado por tan famoso personaje, sino porque gracias a las cualidades de PSVR, nos da la posibilidad de convertirnos en él. Que es un gran incentivo para apostar por este videojuego exclusivo de PS4.
No juegues como Iron Man: conviértete en él
Iron Man VR nos ofrece una experiencia de juego bastante absorbente que, incluso en ciertos momentos, nos regala escenas que pocas veces hemos tenido el gusto de experimentar en título alguno, ni siquiera en el formidable Spider-Man de Insomniac Games. Pero debo señalar que también posee defectos importantes de los que más tarde daré buena cuenta.
Desde una perspectiva en primera persona, debemos encarnar el papel de Tony Stark y hacer un buen uso de la famosa armadura acorazada del héroe. Conviene señalar antes de nada que para poder jugar, es necesario y obligatorio usar dos mandos PS Move, existiendo por cierto un pack en el que se incluyen dichos periféricos junto al juego por unos 100 euros (el normal tiene un PVP de unos 40). Y gracias a estos mandos es posible efectuar las acciones que tantas veces hemos visto realizar a Iron Man de una forma muy "realista", desde usar los propulsores a todo tipo de armas de fuego. La respuesta que nos ofrece PSMove a nuestros gestos resulta bastante precisa en general, si bien y como sucede a veces con el control por movimientos, el periférico puede no reconocer nuestras acciones a la perfección como sería deseable, aunque por fortuna es un defecto que se da pocas veces y apenas tiene un impacto negativo en la jugabilidad.
Para tratarse de un juego de este tipo, es justo afirmar que la narrativa posee cierto peso. Un argumento que, por cierto, es narrado en español, un detalle que debemos agradecer a Sony en este caso aunque, también, no esperéis encontrar el mismo nivel de perfección que el plasmado en obras recientes como The Last of Us Parte II, por ejemplo. Sin entrar en demasiados detalles para evitar spoilers innecesarios, debemos enfrentarnos a un villano que ha robado parte de las características del armamento diseñado por Stark. Una trama que se expande a lo largo de una docena de niveles y que consta de bastantes escenas de vídeo, por cierto, algo que si bien a mí me viene bien para poder relajarme durante unos minutos y evitar la sensación de mareo, habrá usuarios a los que puede llegar a molestar. Y eso mismo sucede con los dilatados tiempos de carga, que en ciertos casos pueden hacerse un poco pesados.
La fórmula de juego principal es una apuesta por la acción total y frenética, algo a lo que pocos títulos de PSVR nos tienen acostumbrados. Bajo la coraza de Iron Man, tenemos que llevar a cabo tareas como volar a toda pastilla por los escenarios, disparar y acabar con decenas de rivales que no paran de moverse a velocidades de vértigo por la pantalla en plan shooter 3D, reparar ciertos objetos dañados… una jugabilidad realmente excitante por momentos que no hemos disfrutado en demasía en el entorno virtual de PS4 desde hace mucho tiempo, siendo un título que sólo por eso pienso que merece la pena probar. Algo que cualquiera puede hacer ahora mismo dado que es posible descargar una demo gratuita de esta misma producción desde PSN.
Este cóctel también incorpora otros elementos que merece la pena mencionar, como por ejemplo la posibilidad de recorrer el "hábitat" de Stark y disfrutar de ciertos minijuegos (como uno de mini basket que a mí me gusta bastante a pesar de su simpleza), mejorar paulatinamente nuestra armadura con diversos dispositivos y armas, entrar en contacto con otros personajes del universo Marvel que no voy a desvelaros pero que añaden interés al asunto, etc. Por todo esto y sin ser perfecta, la experiencia de jugo que alberga Iron Man VR no está nada mal y si bien no se sitúa en los mismos niveles de calidad que los recreados en obras como Resident Evil VII, Blood & Truth o, mi favorito, Astro Bot: Rescue Mission, se perfila como una de las producciones más llamativas, ambiciosas y atractivas de cuantas han aparecido en PSVR durante este año.
Sin embargo el esquema de juego también presenta algunas pegas importantes. Una de ellas es lo variable que resultan los niveles en cuanto a su brillantez se refiere, pasando de fases tremendas a otras más insulsas en cuestión de minutos. Tampoco puedo evitar tener esa sensación de que, de las ocho o nueve horas que dura el juego, lo cierto es que me han sobrado un par de ellas. Y para terminar, la variedad no es uno de sus puntos fuertes, dado que se repiten muchos elementos jugables hasta la saciedad, si bien esto es algo más o menos común en muchos de los juegos de acción.
Técnicamente estamos ante un título bien perfilado que, teniendo en cuenta las limitaciones que suelen estar ligadas a este tipo de obras destinadas para PSVR, luce un aspecto relativamente vistoso, al menos en la mayoría de los casos. Eso sí, no esperéis encontraros con una producción que alcance los mismos niveles de calidad que los atesorados por las obras referenciales que os comenté antes, entre otras cosas porque el motor Unity tampoco es que dé mucho más de sí. Sin duda las secuencias más espectaculares nos las brindan los momentos en los que volamos a toda pastilla por los decorados mientras eliminamos a cuantos rivales salen en pantalla, pudiendo disfrutar de una sensación de estar realmente volando muy conseguida y efectos especiales que quedan realmente bien bajo el entorno virtual en el que nos encontramos. La forma en la que está recreada la armadura de Iron Man también es fantástica, al igual que el aspecto que muestran ciertos personajes, algo que contrasta con la irregular calidad que se deja ver en los fondos.
Los escenarios que recorremos (o sobrevolamos, mejor dicho) resultan muy poco variados y se repiten más veces de lo que sería deseable. Unos pocos muestran un nivel de detalle más o menos decente, pero también es posible divisar otros demasiado poligonales y carentes de pulido en general. Pero lo peor de todo tiene que ver con el rendimiento que muestra el título, algo que en este caso sí que afecta a la jugabilidad en función de cada usuario. Y me explico. Las bajadas de frames no son constantes pero sí perceptibles, algo que puede molestar mínimamente a los usuarios que mejor se adaptan a los entornos virtuales o, por el contrario, causar más problemas relacionados con los mareos a los jugadores menos habituados. Tened esto en cuenta.
Y para terminar, el apartado sonoro es bastante bueno en general. La banda sonora se adapta muy bien a la acción, los efectos especiales suenan de maravilla y el doblaje (en español, reitero), sin ser el mejor que he escuchado nunca, por lo menos deja clara la intención de los desarrolladores de tratar de aportar la mayor calidad posible a su producción en este sentido.
Camouflaj nos brinda una de las obras más notables de las que se han dejado ver en los últimos meses en PSVR. Un título que a pesar de presentar un ritmo de juego imperfecto y ciertos problemas derivados de su acabado técnico, a cambio ofrece unas 8 o 9 horas de entretenimiento (aunque le sobran un par de ellas) y ciertos momentos realmente frenéticos que cuesta disfrutar en casi cualquier otro título diseñado para PlayStation VR.
Comprar Iron Man VR- Las sensaciones que transmiten algunas escenas de acción son increíbles
- El control es bastante preciso y hasta "realista"
- Su duración es estimable y además es un título rejugable
- Llega completamente en español
- Los escenarios son poco variados y su calidad es irregular
- Los tiempos de carga rompen bastante el ritmo de la aventura y su narrativa
- Las caídas de frames se notan bastante y pueden provocar mareos
